El neoliberal Astori anunció su dimisión y así impuso al gobierno su visión en el Presupuesto

El ministro Danilo Astori decidió ayer al anochecer dejar sin efecto su voluntad de renunciar luego de que el presidente, Tabaré Vázquez, se aviniera a aceptar una fórmula para financiar el presupuesto de la enseñanza que a juicio del secretario de Estado no violenta los compromisos internacionales del país en materia de metas fiscales.

Fue sobre la medianoche del martes cuando Astori le transmitió a Vázquez que entregaría el proyecto de ley presupuestal con la asignación de recursos a la educación exigida por el presidente y que al día siguiente (ayer) presentaría la renuncia al Ministerio de Economía. Hasta ese momento, el jefe del equipo económico estaba tranquilo porque, en la tarde, había acordado con Vázquez una fórmula que contemplaba las aspiraciones de ambos.
El encuentro se realizó en la Asociación Española, donde el presidente atiende semanalmente a sus pacientes oncológicos.
El ministro no estaba dispuesto a presentar un proyecto de ley presupuestal con gastos superiores a los ingresos del Estado. Ello supondría, argumentó Astori, poner en cuestión los compromisos de pago de la deuda externa con los organismos internacionales, algo que el ministro se juramentó a cumplir..
La idea supone asignar recursos por ley hasta el entorno del 4% y mecanismos contables en base a supuestos de crecimiento económico que permitirían llegar al 4,5% del Producto Bruto Interno (PBI) en el año 2009.
Astori se retiró aliviado de la mutualista. De allí se trasladó al Ministerio de Economía y continuó en la tarea de elaborar el articulado.
Pero, en la noche, recibió llamadas de varios jerarcas de la educación, quienes rechazaron la idea de no recibir, en forma directa, el 4,5% del PBI..
Entonces, el ministro de Economía llamó por teléfono al presidente y le planteó la exigencia de las autoridades de la enseñanza. Vázquez le respondió que, así las cosas, volviera a diseñar una Ley Presupuestal que asignara recursos según el compromiso electoral del 4,5% para la educación.
A su vez, el ministro le contestó que entregaría el articulado bajo esas directivas, pero le anunció que renunciaría.
GENESIS El episodio de la renuncia empezó a gestarse el lunes durante el Consejo de Ministros, cuando Astori llegó sin fórmula alguna para contemplar la promesa electoral de la izquierda en materia de recursos para la educación. El ministro de Economía dijo que sería "extremadamente difícil" alcanzar esa meta, pero, ante su sorpresa, el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Carlos Viera, presentó una propuesta propia, que suponía llegar hasta un 4,22% del PBI. Vázquez zanjó la situación. Dijo que había reflexionado en soledad y ordenó cumplir con la plataforma que lo llevó a ganar las elecciones de 2004.
La movida de Viera, que responde a la Vertiente Artiguista (VA), fue considerada un triunfo por ese sector político frente al líder de Asamblea Uruguay. A la postre, la VA quedó bajo fuertes cuestionamientos en la coalición de izquierda porque esa movida inconsulta fue la que desencadenó la crisis. Astori no tenía idea de que Viera manejaba una propuesta sobre el presupuesto educativo. La decisión del presidente lo dejó mal parado políticamente y, por primera vez desde asumido el gobierno, sin el respaldo del mandatario.
El ministro se retiró de la reunión con una idea fija: reunirse mano a mano con Vázquez para explicarle las consecuencias económicas y políticas de la resolución. El lunes de tarde anunció en el Consejo Político de Asamblea Uruguay, su grupo, que acataría la resolución presidencial y que le pediría una entrevista, la que se realizó el martes.
El miércoles de mañana, después que la noche antes le anunciara a Vázquez su voluntad de dimitir, el ministro recibió a tres colegas en su despacho del Ministerio de Economía: José Mujica (Ganadería), Héctor Lescano (Turismo) y Jorge Lepra (Industria). Todos intentaron que el colega Astori depusiera su actitud bajo el argumento de que su renuncia dañaría en forma grave al gobierno. Además resaltaron que la dimisión estaba planteada el mismo día en que venció el plazo para presentar la Ley Presupuestal, lo cual agravaría la significación del episodio.
Astori afirmó que la clave del asunto era asumir que no se puede presentar un presupuesto desfinanciado y que ello traería graves consecuencias para el país. Insistió en que el Fondo Monetario Internacional consideraría eso como un desvío del acuerdo de pago de la deuda celebrado este año. El informativo de canal 10, Subrayado, aseguró ayer que la oficina local del FMI fue informada sobre la crisis política el martes de noche.
Los tres ministros no lograron disuadir a Astori, pero Mujica volvió solo, algunas horas después. Fuentes del gobierno dijeron que Vázquez le encomendó al ministro de Ganadería resolver la crisis.
En la tarde llegó hasta el MEF el secretario de la Presidencia, Gonzalo Fernández, quien le entregó a Astori una copia del Presupuesto sin la firma de Vázquez, una muestra de que todavía se estaba a tiempo de resolver la situación.
A la hora 18, Vázquez se reunió en la residencia de Suárez con Mujica, Lepra y Lescano, para analizar las respuestas de Astori y elaborar una estrategia que impidiera la renuncia del ministro de Economía. Allí, el presidente accedió a aceptar la fórmula que antes le había presentado Astori en la Asociación Española y encomendó a Fernández que se lo transmitiera.
El alto funcionario volvió a la sede ministerial y así lo hizo. Astori aceptó y la tormenta se disipó. Los ministros reunidos en Suárez respiraron aliviados y, ante una prensa ávida de información, Mujica transmitió que el gobierno seguía jugando "con el mismo equipo".
Pero las dudas no se disiparon del todo hasta algunos minutos después, cuando, en el Centro, Fernández dijo a la prensa que Astori permanecería "en funciones" y que la fórmula presupuestal acordada permite asignar el 4,5% del PBI a la educación "sin afectar el programa financiero del gobierno".
Agregó que las diferencias se habían generado en aspectos de "técnica presupuestal" y negó que Astori hubiese presentado formalmente la renuncia.
El episodio terminó con los integrantes del equipo del Ministerio de Economía en el Parlamento. Todos fueron, con Astori a la cabeza, a entregar, en mano, al despacho del vicepresidente, Rodolfo Nin Novoa, el primer Presupuesto elaborado por la izquierda.