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Latinoamérica

Uribe acepta el diálogo para el canje humanitario

El Comercio

Redacción Quito

El Gobierno de Colombia anunció de forma sorpresiva que está dispuesto a reunirse de inmediato y sin condiciones con delegados de las FARC para gestionar la liberación de 59   personas secuestradas.

El alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo,   anunció que tiene instrucciones del presidente Álvaro Uribe para reunirse con las FARC "en cualquier sitio, el día y la hora que ellos establezcan con unas condiciones de seguridad que les den confianza".

No obstante, la familia de la política Ingrid Betancourt, secuestrada por las FARC desde el 2002, y la  Iglesia Católica advirtieron  que la ofensiva militar contra el número dos de las  FARC, ‘Raúl Reyes’, frustrará el canje humanitario.

"Luego de la reunión (el martes) con el presidente  Uribe me enteré  de los operativos para capturar a ‘Raúl Reyes’ y eso me dolió mucho porque  dañaría todo", dijo  Yolanda Pulecio, madre de Betancourt. "Confío en que Uribe respete el compromiso que asumió"  con los familiares  y que "sea tan generoso" con las FARC "como lo ha sido con los paramilitares" en diálogos de paz.

El sacerdote Darío Echeverri,  de  la comisión de la Iglesia que promueve el canje de 59 cautivos por unos 500  guerrilleros encarcelados,  señaló que la persecución contra ‘Reyes’ genera  "incertidumbre".

"La hay porque se disponen todas las posibilidades de tiempo y lugar, y sin  embargo hay una contradicción con los operativos que se están llevando a cabo  en Putumayo tendientes a capturar a aquel que por las FARC  es el responsable para negociar el acuerdo humanitario", indicó Echeverri.