EEUU considera que la cadena es "un instrumento de la  propaganda autoritaria  del presidente Chávez"

 Antonio Maira
inSurGente

Les ha faltado tiempo. Telesur, un proyecto de televisión puesto en marcha por Venezuela, Uruguay, Argentina y Cuba, que pretende terminar con el virtual monopolio de la CNN en el continente americano -como fuente distribuidora de noticias y de opiniones, y cómo cadena continental en lengua española-, desata las iras del Imperio.
El nuevo medio latinoamericano ha realizado las primeras pruebas el martes día 24. Apenas unas horas después el presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de los EEUU, Richard Luggard, ha empezado ya el juego de advertencias y amenazas, a la que probablemente se unirá pronto el aliado fiel: la UE. La independencia de los países de América Latina no le gusta nada a los EEUU. Y de eso se trata: "Por primera vez los latinoamericanos vamos a vernos a nosotros mismos con nuestros propios ojos y hacernos ver ante el mundo como somos", ha dicho en diversas entrevistas el uruguayo Aram Aharonian, director de la cadena, que además puntualiza con toda precisión definiendo a Telesur como "el primer proyecto contra-hegemónico de carácter masivo en América Latina". La difusión de las culturas latinoamericana e indígenas es otro de los elementos fundamentales.
Cualquier proyecto latinoamericano, que no sea la hasta ahora servil OEA, es inmediatamente fulminado por los EEUU. Con mayores razones uno que pretende nada menos que la implantación de una red de información vía satélite, preferentemente dedicada a "noticias, documentales, reportajes de investigación y películas, principalmente sobre América Latina" según ha explicado Jorge Botero, Director de Noticias de Telesur. Telesur es un canal de televisión de fuentes propias que busca competir con cadenas latinas transmitidas desde EEUU, como CNN en español.
La Falsimedia latinoamericana, en defensa de las oligarquías a las que representa, está utilizando como punta de lanza contra el proyecto a los medios privados de Venezuela. Tienen discurso elaborado y experiencia.
En cuanto al discurso se han opuesto con uñas y dientes a la determinación constitucional del derecho humano a la "información veraz" y más tarde a la Ley de Responsabilidad Social de los Medios, vinculando la gran propiedad privada de los mismos a la Libertad de información. Ahora afirman que Telesur ofrecerá únicamente la visión de los gobiernos que la han puesto en marcha, en particular la de Hugo Chávez.
En lo que se refiere a la experiencia, los medios venezolanos estuvieron implicados directamente en el golpe de estado y en los sucesivos intentos de derribar al presidente democrático de Venezuela. Llegaron a construir guiones para los sucesivos golpes: el del 11 de abril, el del cierre empresarial y sabotaje petrolero, la "guarimba", convirtiéndolos en Órdenes de Operaciones, más o menos exitosas. En el golpe mediático-militar de abril de 2002, se construye una realidad en las pantallas de televisión que arrastra a los hechos en la calle.
La cuestión de las amenazas del presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, afirmando que "la cadena es un instrumento de la política autoritaria de Chávez" no es para tomarla a broma. A medio plazo o cuando cambie la fase de la luna. Hay varios precedentes muy próximos sobre la resolución de enemistades de este tipo: recordemos los bombazos contra la televisión yugoslava y contra Al Jazeera.
La televisión latinoamericana plantea una cuestión fundamental. "Es una cuestión de enfoque" han dicho sus directivos, Aharonian y Botero. De hecho, en las últimas semanas muchas agencias latinoamericanas han introducido expresamente el lema "Enfoque americano" -en lugar del lema oculto "made in USA" de las noticias de Falsimedia- en las informaciones que se refieren al continente.
"Es un problema de enfoque. Ellos ven a América Latina desde allá. Nosotros queremos ver nuestro continente desde nuestro continente y que nuestras cámaras lleguen adonde nunca llegan ellos", ha dicho Jorge Botero, quien también ha señalado que "La independencia la tenemos que garantizar nosotros, que estamos dentro del proyecto y estamos dispuestos a batirnos por esa independencia".
Telesur continuará emitiendo en prueba hasta mediados de julio. A partir de ese momento empezarán a introducirse algunos programas. En septiembre saldrá al aire 24 horas al día y con la programación completa.