Fabián Kovacic
Brecha

El juez federal argentino Daniel Rafecas, a cargo de la causa por el secuestro y asesinato de Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz, Rosario Barredo y William Whitelaw, recibió a la abogada querellante Hebe Martínez Burlé, apoderada de la familia Michelini, en el marco de la inminente decisión de la Corte Suprema de Justicia que declarará inconstitucionales las leyes de obediencia debida y punto final. La causa estuvo en manos del juez subrogante Rodolfo Canicoba Corral desde 1998 hasta fines de noviembre último, cuando el gobierno designó a Rafecas al frente del juzgado.
"Vinimos a interiorizarnos de la marcha de la causa teniendo en cuenta que hay varias indagatorias y testimoniales pendientes, entre otras la de Julio María Sanguinetti y los familiares de Michelini", informó a BRECHA Martínez Burlé. Sin embargo la inminencia del fallo de la Corte Suprema debe considerarse como un dato central a la hora de imaginar estrategias futuras en relación con las causas por violación a los derechos humanos en el marco del Plan Cóndor. Acompañada por la abogada del Centro de Estudios Legales y Sociales Florencia Plazas, Martínez Burlé se entrevistó con el juez durante casi dos horas para analizar la marcha de las investigaciones. "La causa en Montevideotuvo algunos avances interesantes y esperamos que en Buenos Aires pueda avanzarse aun más, teniendo en cuenta los documentos desclasificados por Estados Unidos y los antecedentes establecidos en las causas Pinochet, Videla y Scilingo en España. Toda esa información jurisprudencial abona el terreno para alentar novedades ", sintetizó la abogada uruguaya.
En los despachos judiciales aún mastican bronca por la negativa de Uruguay a extraditar a José Gavazzo, Manuel Cordero y el resto de los involucrados en los crímenes de uruguayos en Buenos Aires. "Es cierto que el ex presidente Jorge Batlle no mostró mayor interés en el tema, pero esperábamos que (Tabaré) Vázquez tuviera otra disposición a encarar el tema. Analizando la ley de caducidad uruguaya no hay motivo para hacer hincapié en algunos casos y no en otros, como se refleja en los medios de prensa por influencia del Ejecutivo. "La filosa frase pertenece a un integrante de los equipos que trabajan en los tribunales federales argentinos y conoce a fondo la causa del Cóndor desde que se inició en 1997. Sin decirlo apuntó directamente al compromiso asumido por Vázquez con Néstor Kirchner en el caso María Claudia García de Gelman.
La posibilidad de que la Corte Suprema declare inconstitucionales las leyes de impunidad, incluidos los indultos, empezó a tomar cuerpo a partir de la anulación de esas leyes en el Congreso en agosto de 2003, a cuatro meses de la asunción de Kirchner. Era el tiempo en que empezaban los primeros movimientos por modificar la composición de la Corte y eliminar los resabios del menemismo. La llegada de Eugenio Zaffaroni, el único penalista entre los nueve supremos, alentó la posibilidad de revocar esas normas dictadas durante el mandato de Raúl Alfonsín. Todo indica que la decisión de la Corte es inminente y se prevé que en la reunión del próximo martes el lema sea tratado y quizá se llegue a una "acordada ese misino día. "Sin las leyes pueden tomar impulso todas las causas paralizadas desde 1987, aunque con la anulación del Congreso fue suficiente. Ocurre que los jueces prefieren esperar a la Corte por una cuestión de evitar problemas y hasta sanciones en una segunda instancia. Es lo que ocurre con la causa de Michelini: el juez avanzó pero no cuenta con la misma celeridad por parte de la Cámara Federal, que debe aprobar lo actuado. Los camaristas esperan el fallo de la Corte para expedirse. Eso aceleraría mucho los trámites", aseguró Florencia Plazas.
Entre los aportes novedosos al expediente se cuenta el libro Operativo Cóndor. Una década de terrorismo internacional en el Cono Sur, del investigador estadounidense John Dinges, quien a partir de su entrevista en octubre de 2002 con el ex comisario Hugo Campos Hermida revela que el asesino de Michelini y Gutiérrez Ruiz sería el sub-comisario de la Policía Federal Miguel Ángel Trimarchi. "Presentamos el libro al juez y pedimos a Dinges que cuando venga a Buenos Aires declare en la causa, pero por ahora es apenas una versión", aseguraron Martínez Burlé y Plazas.