En un salón auditorio repleto, los trabajadores y trabajadoras no médicos deliberaron por espacio de dos horas en un ejercicio de la más pura democracia obrera. Finalmente se aprobó la moción que expresaba: suspender el paro y participar mañana viernes 22 a las 11:30 en la paritaria en el Ministerio de Trabajo. El primer punto que lleva la comisión negociadora es que los 300 pesos vayan al básico.
La asamblea que se realizó esta tarde en el hospital Garrahan no puede circunscribirse solamente a la noticia de que se aprobó la suspensión del paro de 72 horas que había comenzado ayer. Dos elementos más fueron refrendados por todos los asistentes que participaron en la reunión: la unidad de los trabajadores y el apoyo total y de viva voz a la Junta Interna de ATE-Garrahan.
Cuando este despacho se está escribiendo, los multimedios del sistema estarán atronando con la noticia de la suspención del paro. Pero lo que se vivió hoy en el aula magna del Garrahan fue mucho más que eso.
Todos los oradores que intervinieron recalcaron como un triunfo la unidad alcanzada a lo largo de estos días de lucha, inclusive aquellos que fueron oposición al actual cuerpo de delegados.
Otro momento que marcó un punto de inflexión en el clima se construía minuto a minuto en la asamblea, fue cuando todo el auditorio, de pie, respaldó a la Junta Interna y su principal figura, Gustavo Lerer.
La importancia del paso que dan los trabajadores al suspender la medida de fuerza y concurrir mañana al Ministerio de Trabajo a negociar con la patronal, hay que medirla desde esos parámetros. No va una dirección burocrática, a espaldas de los trabajadores a sentarse en un cómodo despacho ministerial. Al ministerio van genuinos representantes de sus bases a continuar la lucha por otros medios.
El paro se suspendió en el punto más alto del conflicto, con toda la prensa del sistema pegándole duro a los trabajadores, con los representantes del gobierno tachándolos de irresponsables y salvajes. El ministro de Salud, Ginés González García, dijo que el conflicto está contaminado por el "activismo político". Y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, afirmó que los integrantes de la comisión interna "deberán responder a la sociedad por lo que han promovido".
Para aquellos que, desde el pueblo, observan el desarrollo de este conflicto no le quedan dudas, y hasta se puede coincidir con las afirmaciones de Alberto Fernández. Los empleados del Hospital Garrahan y su Junta Interna tendrán el orgullo de responder ante la sociedad por haber promovido: la solidaridad, la decisión de luchar por sus derechos, la unidad y el más puro ejercicio de la democracia de los trabajadores. Seguramente no era ha esto a lo que se refería el jefe de Gabinete, pero si el ejemplo que se desde el pueblo.
Agencia Walsh