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23 de abril del 2002
Comunicado de Amnistía Internacional
Israel y los Territorios Ocupados: No basta con hablar
Amnistía Internacional
Ante la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para debatir
sobre la grave situación de Israel y los Territorios Ocupados, Amnistía
Internacional reitera su petición de que haya una investigación
internacional sobre los presuntos abusos contra los derechos humanos cometidos
contra los palestinos en el campo de refugiados de Yenín desde el 3 de
abril de 2002 y de que se despliegue una fuerza internacional de observadores
de derechos humanos.
Los delegados de Amnistía Internacional que visitaron Yenín declararon:
«Hay claros indicios de que la Fuerza de Defensa Israelí violó
en Yenín los derechos humanos y el derecho internacional humanitario».
El delegado de Amnistía Internacional Derrick Pounder, patólogo
forense, realizó las autopsias de dos cuerpos en el hospital de Yenín
y en ambos casos observó «motivos de sospecha». Los delegados escucharon
testimonios de casas demolidas cuando todavía había gente dentro
y recibieron informes de ejecuciones extrajudiciales.
«Cuanto más tiempo se estén descomponiendo los cuerpos, más
se deteriorarán las pruebas», afirmó el profesor Pounder. «Esto
exige una investigación de expertos urgente, independiente e internacional»,
manifestó Amnistía Internacional.
En una declaración presentada ayer ante el Consejo de Seguridad, Amnistía
Internacional volvió a pedir el despliegue de observadores de derechos
humanos expertos, que podrían salvar vidas israelíes y palestinas.
El mandato de estos expertos sería observar, investigar e informar sobre
el respeto de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, incluido
el Cuarto Convenio de Ginebra. Estos observadores deberán tener acceso
a todos los lugares y poder realizar entrevistas de forma libre y confidencial.
Tanto el gobierno israelí como la Autoridad Nacional Palestina deberán
permitir a los observadores trabajar con eficacia dentro de sus jurisdicciones
y ayudarlos a conseguirlo, así como tomar todas las medidas necesarias
para garantizar su seguridad.
Desde el campo de refugiados de Yenín, Javier Zúñiga, de
Amnistía Internacional, declaró: «Se necesitan urgentemente informes
independientes e imparciales, al igual que medidas que garanticen que la ayuda
humanitaria, tan necesaria, llega sin bloqueos a todos los que la necesitan.
No basta con hablar, son necesarias medidas prácticas».
La declaración del 18 de abril de Amnistía Internacional ante
el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (Índice AI: MDE 01/003/2002)
sobre el despliegue de observadores está a su disposición.