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9 de mayo del 2002
Negocio de poderosos
Xavier Caño Tamayo
Centro de Colaboraciones Solidarias
Un amigo argentino me dice: "En Argentina ya se usa el trueque; se cambia
una camisa o un aparato de radio por comida: no hay plata". Y rememoro un escrito
de Mempo Giardinelli que denunció que unas veinte mil personas dirigentes
y poderosas saquearon el patrimonio público argentino durante años
y evadieron más de 100.000 millones de dólares, reduciendo a la
pobreza a la mitad de la población. Ciertamente, el descalabro argentino
ha sido por corrupción y saqueo continuado, pero no hubiera resultado
posible de no haber existido paraísos fiscales, esos minúsculos
estados de opereta cuya verdadera razón de ser es la evasión de
impuestos, la especulación económica, la ingeniería financiera,
la fuga de capitales y el blanqueo de dinero.
Un escándalo español saca de nuevo a primer término de
la actualidad esos cánceres de la armonía económica y social
que son los paraísos fiscales. En la Unión Europea, en España,
recién averiguamos de nuevo el papel de esos paraísos. El Banco
Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) es una poderosa y honorable entidad financiera
española extendida por el mundo. En 1987 inició movimientos oscuros
de dinero en los paraísos fiscales de Jersey (una isla del Canal de la
Mancha), principado de Liechenstein (minúsculo país fronterizo
con Suiza y Austria), la isla de Nieu (cerca de Nueva Zelanda) y las conocidas
islas Caimán. Ahora ha estallado el escándalo en España
porque, además, se ha descubierto que se constituyeron en Estados Unidos
veintidós jugosos fondos de pensiones millonarios para beneficio clandestino
de otros tantos consejeros del banco. El asunto ha llegado a la Audiencia Nacional,
al juez Baltasar Garzón, que investiga si ha habido delitos de defraudación,
falsedad en balance, falsedad de cuentas, bloqueo de capitales, blanqueo de
dinero, soborno, apropiación indebida y falsedad documental.
De momento el juez ha descubierto que se han ocultado importantes cantidades
de dinero en paraísos fiscales y realizado pagos ilícitos a personas
o entidades de Venezuela y México. Además, se investiga las operaciones
por las que el BBVA consiguió el control del Banco Mercantil Probursa
(México), Banco Ganadero (Colombia) y Banco Continental (Perú),
porque hay indicios de que en esos movimientos de dinero se pudieron blanquear
millones de dólares procedentes del narcotráfico; también
se sospecha de pagos ilícitos a políticos corruptos (al expresidente
peruano Alberto Fujimori y su asesor Vladimiro Montesinos), camuflados como
préstamos. Y quizás se concedieron créditos cuantiosos
que no eran reales sino instrumentos para sacar dinero blanqueado de Colombia
y Panamá.
La investigación ha aportado más datos: el BBVA redactó
un "Manual para Productos Fiduciarios" como guía para sacar capitales
fuera de España, invertir dinero "opaco" en paraísos fiscales
y evitar impuestos. La Fiscalía Anticorrupción española
descubrió que el BBVA Privanza (la filial del BBVA en el paraíso
fiscal Jersey) ofrecía doce productos financieros secretos a clientes
con grandes patrimonios (grandes empresas y deportistas o artistas con elevados
ingresos) y les garantizaba "absoluta confidencialidad, opacidad y máxima
optimización fiscal", así como también búsqueda
de consejeros para sociedades pantalla. El BBVA en Jersey operaba por medio
de Canal Trust Company, de la que es propietario al cien por cien. Canal Trust
se describe como "un trust educacional, religioso y de caridad". Según
la Fiscalía Anticorrupción española, los productos financieros
del BBVA en Jersey son instrumentos idóneos para la defraudación
de impuestos y el blanqueo de dinero. De momento, se ha averiguado que el dinero
sospechoso del BBVA manejado en paraísos fiscales asciende a unos 200
millones de dólares. El Fiscal Anticorrupción ha solicitado la
imputación de veintisiete altos cargos del BBVA.
A la vista de los hechos, el juez Baltasar Garzón ha solicitado ayuda
a William Bailhache, Fiscal General de Jersey, pero éste se ha negado
a colaborar, alegando que las operaciones y conductas a las que se refiere el
magistrado español son legales en Jersey y que los clientes del Privanza
BBVA tienen derecho a la privacidad de sus asuntos. El juez español ha
respondido que, siendo la privacidad un derecho esencial, no es absoluto ni
incondicional. Quizás la clave para entender la conducta de Bailhache
sea el hecho de que antes fue presidente del Barclays Bank Finance Company Limited
y, como asegura el refranero burlón español, "entre bomberos,
no se pisan la manguera".
Hasta aquí el escándalo en un país del Norte, un miembro
de la Unión Europea. Doscientos millones de dólares en danza no
parecen una cantidad exagerada, pero la inmensa mayoría de los argentinos,
por ejemplo, calculará que es una enormidad, sobre todo si piensan que
el saqueo de su país quizás se hizo a base de evasiones de doscientos
en doscientos millones de dólares.
Según la ONU, cada año se blanquean alrededor de 750.000 millones
de dólares en el mundo procedentes de actividades criminales, fuga de
capitales y evasión de impuestos: este blanqueo de dinero y los movimientos
secretos proporcionan comisiones y honorarios de 150.000 millones de dólares
a bancos, intermediarios financieros, sociedades pantalla, directivos de trust
y sociedades fiduciarias en paraísos fiscales...
Resulta obvio que los estados-paraísos fiscales no colaboran en la lucha
contra el blanqueo de dinero y la corrupción: perderían un gran
negocio. Si no se pone remedio, los paraísos fiscales continuarán
garantizando un secreto bancario a prueba de bomba, asegurando la ausencia de
control en el cambio de divisas, avalando cualquier tipo de contrato o transacción,
así como la constitución de todo tipo de sociedades fantasma y
el absoluto anonimato de sus accionistas. O se controla a los paraísos
fiscales o crecerá la corrupción y con ella la economía
criminal global y, naturalmente, también la pobreza y la desigualdad.