Joan Samit
El Periódico

Nawal al Sadawi, con gesto rotundo y verbo apasionado, no se anduvo ayer por las ramas al criticar la invasión de Irak por Estados Unidos yel Reino Unido, y aseguró que "no vivimos en un periodo poscolonial, sino en una época neocolonial". "Estados Unidos --aseguró-- ha invadido Irak por dinero, por petróleo y por el comercio". Tras la guerra. dijo, han aparecido dos superpotencias, "EEUU y el poder de la gente", que se ha manifestado contra la guerra en todo el mundo. "Ésa es la esperanza".
La famosa médica y escritora disidente egipcia, nacida en Kafr Tahla en 1931, recibirá hoy el 15° Premi Internacional Catalunya, dotado con 80.000 euros, que anualmente concede la Generalitat a personas que se han distinguido por su contribución al desarrollo de los valores culturales, científicos y humanos en cualquier parte del mundo.
Al Sadawi y su esposo, el también médico y escritor egipcio Sherif Hetata, protagonizaron hace unos años en su país un proceso que tuvo repercusión mundial: un abogado integrista la acusó de haber renegado de la religión musulmana y de despreciar los preceptos del Islam, y reclamó a su marido que se divorciara de ella. Tenían tras ellos 37 años de matrimonio.

VESTIGIOS PAGANOS

Nawal al Sadawi había escrito en una revista que la peregrinación a La Meca es "un vestigio del paganismo". El marido se negó al requerimiento y el integrismo se les echó encima, pero la justicia egipcia rechazó la demanda. Fue un gran triunfo del progresismo frente a la intolerancia radical.
La galardonada rechazó la palabra Oriente Medio, "acuñada por el colonialismo británico", y tras mostrarse contraria a cualquier forma de terrorismo, denunció el terrorismo de Estado de Israel contra los palestinos y de EEUU contra Irak. "¿Quién es el terrorista? ¿Los iraquís, que han sido invadidos y muertos, o EEUU, que les ha invadido y matado?", clamó.
Desde posiciones que recordaban vagamente la teología de la liberación --"no hay más que un Dios para todos y lo que importa es que toda la humanidad goce de los mismos privilegios", dijo--, negó la existencia de un mundo cristiano y otro islámico y proclamó con rotundidad: "¿Por qué hemos de montar esta gran comedia entre religiones? Vivimos todos en un solo mundo, pero dominado por el patriarcado capitalista". Tras la caída de la URSS, "el mundo capitalista necesitaba otro enemigo y lo ha encontrado en el Islam", remachó.
Confesó que los pueblos árabes en general y el palestino en particular tienen puestas grandes esperanzas en Europa, sobre todo en los pueblos de Europa "que se han mantenido firmes frente a Estados Unidos".

FEMINISTA DE IZQUIERDAS

Nasserista, de izquierdas, disidente del islamismo dominante en las sociedades árabes, firme defensora de los derechos de la mujer, Al Sadawi aseguró que las mujeres sufren opresión y falta de libertad en todo el mundo, porque "son las principales víctimas de la pobreza y eso afecta a la libertad".