21 de marzo del 2003
Colombia: Entrevista al comandante Antonio García, del ELN
'Uribe es la guerra'
El Espectador
El comandante Antonio García, del ELN, segundo al mando de esa organización, contestó un cuestionario enviado por El Espectador.
P. Cual es el estado actual de los acercamientos con el Gobierno del Presidente Uribe. ¿Ustedes cerraron la puerta definitivamente?
R. El país sabe que Uribe nunca ofreció una salida de paz, ni mucho menos que sea un amigo de ella. Pese a estos antecedentes el ELN consideró conveniente explorar y escuchar sus iniciativas como presidente. No pasaron las reuniones introductorias y todo quedó perfectamente claro, el gobierno, por sus políticas cerraba las posibilidades de un camino de paz. Cometió dos graves errores que 5 gobiernos anteriores los sortearon de otra manera: Acabar con el estatus Político de la insurgencia y abrir la puerta para el perdón de los paramilitares y viabilizar su legalización.
P. El Gobierno insiste en que la política de seguridad democrática no va en contravía de avanzar en los acercamientos, llegar al cese de hostilidades y darle vía libre a la convención nacional?
R. Cuando la seguridad se coloca por delante de la democracia es inevitable la violación de los Derechos Humanos. Es un problema de esencia y no de semántica, la democracia debe ir primero cuando se habla del proyecto de humanidad. Estamos ante un modelo económico neoliberal que golpea sin piedad a los humildes. La seguridad de la que se habla es para imponer la lógica de un monetarismo mercantilista, mas no para garantizar la vida de las mayorías del país. Y que en las crisis de los países de América Latina el neoliberalismo ha mostrado su profunda incompatibilidad con el desarrollo humano.
P. El gobierno mantiene abiertos los canales de comunicación de los voceros en Itagüi, ¿qué interpretación le da usted a esta circunstancia?
R. Entiendo que la paz es el objetivo último que toda sociedad debe buscar, de lo contrario labraría su propio fin. Esa es la intención que trata de recoger en su espíritu la Constitución Nacional, por eso es lícito que cualquier colombiano tenga el derecho y la obligación de trabajar por la paz. Por eso nuestros dos Comandantes, Francisco Galán y Felipe Torres, recluidos ya casi una década, sean una expresión de tantos que trabajan y quieren la paz de Colombia, esta es una razón que se fundamenta en convicciones, en compromisos que se sostienen por años. A diferencia el gobierno de Uribe que sólo pretende crear un ambiente que haga viable su negociación con los paramilitares. Colombia sabe que en la cárcel de Itagüí es donde han germinado las semillas de la paz.
P. ¿Por qué la resistencia con el proceso de exploración del gobierno y las Autodefensas?
R. Podríamos preguntarnos nuevamente ¿Por qué y para qué luchan los paramilitares? ¿ Contra quien combaten ellos? Todos hemos escuchado que ellos no plantean modificar el sistema actual, tampoco quieren una manera diferente de gobernar, se sienten identificados con él y son defensores de él. Esta connotación política es lo que les da la esencia de ser un fenómeno paraestatal, pues ha sido un instrumento para la defensa del establecimiento. Para cumplir esta misión han acudido a la realización de masacres contra población desarmada, para infundir terror y producir el éxodo en áreas rurales y urbanas. En todas las regiones se ha demostrado la cooperación, la coordinación, la convivencia y connivencia entre paramilitares y miembros de la fuerza pública del Estado, así mismo con entidades gubernamentales como la fiscalía. Esto lo sabe todo el mundo, porque la gente tiene ojos y ve, así se quiera informar otra cosa.
Dentro de esta circunstancia el Estado no podía darle Estatus Político al paramilitarismo, pues este jamás ha sido ni podrá ser un proyecto político a parte del Estado existente. No son casuales los esguinces y trabas para acogerse a la Corte Penal Internacional y darle tiempo a la legalización de los jefes paramilitares y lograr el perdón y el olvido de sus crímenes de lesa humanidad. De otro lado los paramilitares son una serie de grupos dedicados por completo al narcotráfico y al no tener una estructura de mando unificado, todo se reduce a un proceso de desautorizaciones entre ellos, y sus jefes están más interesados en negociar con la CIA para evitar la extradición y pasar a disfrutar sus grandes narco-riquezas.
P. ¿Qué tan lejos se sienten ustedes de volver a iniciar contactos con el Gobierno?
R. El Gobierno fue quien colocó las distancias. Por eso lo mejor es dejarlo que siga su negociación con los paramilitares, esa ha sido su prioridad. Por otro lado el ELN jamás ha renunciado a la búsqueda de la paz, y sigue creando opciones con todos aquellos que quieren la paz. Recordemos que el camino que se abrió con la propuesta de Convención Nacional se hizo sin los gobiernos, ha sido una dinámica muy rica en la participación de la sociedad, de las fuerzas sociales, políticas, culturales e intelectuales del país. Un Gobierno sólo, jamás logrará nada bueno, la fuerza de toda la sociedad es la definitiva, nosotros nos la jugamos por ahí. Estos procesos de paz están en la sociedad, quien se ha alejado es el gobierno.
P. Por los resultados de las operaciones, es claro que el ELN y las FARC actúan unidos. Es una unión solo regional o va mas allá..?
R. En algunas regiones existen buenas relaciones con FARC y en ellas se trabaja coordinadamente en varios aspectos, no sólo en lo militar. Es muy satisfactorio el accionar conjunto pues hemos obtenido muy buenos resultados para ambas organizaciones. A nivel nacional existe interés por avanzar en la unidad, por construir referentes políticos para superar la crisis política del país. Nos cruzamos comunicaciones a nivel de las comandancias y confiamos que podremos avanzar en propuestas para una Nueva Colombia.
P. Pero el ELN esta quedando 'en manos de las FARC'?
R. En el país se sabe que las dos organizaciones tenemos orígenes diferentes, troncos ideológicos no iguales, pero ambas han navegado siempre con la visión universal revolucionaria. Podemos decir que FARC tiene sus propias estructuras combatientes y de mando, que se ha dado su propio sistema de funcionamiento y toma de decisiones. También en el ELN existe su lógica y sus estructuras políticas y militares, su línea de mando, por tanto ambas organizaciones son soberanas y autónomas; esto se viene cumpliendo en todas y cada una de las más de 80 estructuras del ELN, que se conducen con una sola política construida colectivamente y ese ejercicio de mando lo realiza nuestra Dirección Nacional.
El hecho que existan diferencias entre los proyectos políticos no es malo, la diversidad no es mala, por el contrario eso es importante en el camino de construir tolerancia, respeto al pensamiento del otro, a la existencia del otro. Creemos que el ser humano tiene la capacidad de crear consensos políticos y así superar la imposición, que solo conduce a la negación de la democracia.
P. Se habla incluso de un supuesto encuentro de Nicolás Rodríguez y Manuel Marulanda. ¿Es eso cierto?
R. Este es un viejo y renovado propósito de la insurgencia Colombiana, y creo que muchos colombianos también esperan ver juntos a estos dos legendarios líderes de los cambios en Colombia, estamos seguros que de ellos esperan mucho los colombianos. Son vidas enteras dedicadas a buscar un mejor destino al país, todo lo que apunte a despejar este destino tiene que ser cierto, o tenemos que hacerlo cierto, y eso tiene demasiado significado.
P. En un reciente comunicado, el ELN toma distancia de actos terroristas como el del Club El Nogal. ¿Cual es su posición frente a estos actos en contra de civiles?
R. El ELN es claro en este tema y se aparta de este tipo de actos. Lo cual no significa que le demos la misma interpretación que le da el Estado. Pues entendemos que el Estado acabó con la 'sociedad civil' en Colombia. Todo aquel que piense diferente al establecimiento, sea individual o colectivamente es perseguido, aniquilado. Existe una clara acción del Estado por impedir que la sociedad se organice y ella le exija cumplimiento de sus obligaciones. La 'sociedad civil' solamente puede existir como expresión organizada independiente y fiscalizadora del Estado. Jamás un Estado puede existir por encima de la sociedad, lógicamente si quiere encarnar un Estado social de derecho y de hecho. Dentro del 'actual derecho universal' el 'Estado Burgués' que nació con la idea de encarnar la 'cosa pública' ha devenido en una cosa privada, ajena al control social.
En la 'sociedad civil' no son tenidos en cuenta los campesinos pobres que protestan, o los pobladores de las barriadas populares, o los sindicalistas, para ellos no existe esta connotación, sino la acusación de ser 'guerrilleros de civil'. Pero cuando los afectados son los estratos 6 y 7 si buscan amparase con el ropaje de la 'sociedad civil'. Y cuando un poblador siente que le llueve violencia sin razón desde un Estado o para- estado, es comprensible que se generen estructuras de violencia que responden con igual agresividad.
P. ¿Cómo define usted el Terrorismo?
R. En este campo poco valen las definiciones individuales, sino lo que es consenso universal. Se entiende por terrorismo la acción violenta e indiscriminada que se hace con el objetivo de infundir terror. Como se podrá ver son acciones que no buscan como meta el triunfo en la guerra, en el combate o en la batalla, sino que quiere atemorizar y moldear una conducta de sumisión u obediencia. Existe la costumbre de tergiversar las cosas, entonces ahora cualquier acto de guerra se quiere hacer ver como terrorista. He ahí el problema.
P. ¿El ELN es un grupo terrorista? O ¿efectúa acciones terroristas?
R. En absoluto, sería un exabrupto pretender construir consensos a punta de violencia irracional. Es más, el ELN no es un interlocutor ni para el terrorismo de estado, ni para las falsas propuestas de paz.
El ELN sí es una Organización radical. La razón de su existencia es luchar por la libertad del hombre, en todo el sentido de la palabra, por buscar y construir un proyecto de sociedad humana, donde los milenarios problemas de la humanidad como: peste, guerra, muerte y hambre, que hoy se han incrementado, desaparezcan.
Nuestra radicalidad tiene que ver con una crítica profunda al sistema, ir a las raíces del problema, tiene que ver con atacar los terrorismos que se desencadenan contra los pueblos y que la globalización neoliberal acrecienta. Nuestra radicalidad está comprometida con la paz del mundo y la vida digna del ser humano.
P. Y ¿qué hay de Cúcuta? Ahí murieron civiles.
R. Hubo un pronunciamiento oficial, el ELN aclaró que esa no es su política. Allí hacemos un llamado a recordar que el terrorismo no sólo se está haciendo con bombas, sino que se hace con aviones y helicópteros de las Fuerzas Armadas del Estado.
P. ¿Usted cree en que el conflicto entró en una nueva etapa?
R. Desde hace años ha existido la dualidad en cuanto al futuro de la guerra en Colombia, se venía gestando una cultura política favorable a buscar una salida política a la guerra. Uribe desde su candidatura ofreció una salida guerrerista sin importarle lo que la sociedad había construido, y se comprometió en una guerra que le favorece en el concierto internacional al Gobierno de los Estados Unidos. Eso es lo novedoso, quizá esa sea la nueva etapa: la guerra general planteada por Uribe, con la misma lógica gringa.
Las ciudades colombianas no son más que la condensación de la violencia que produce el capitalismo; ausente de políticas de 'desarrollo' urbano, una apología al caos, a la improvisación y a la depredación humana. Con esta política neoliberal ¿de qué van a vivir los millones de desempleados urbanos? Eso produce injusticias, desarraigo, ausencias de futuro, ese es el caldo de cultivo para el conflicto.
P. ¿Qué opinión le merece la incorporación de los soldados campesinos al ejército para fortalecer el pie de fuerza?
R. Hasta donde yo recuerdo los soldados del Estado siempre han sido los hijos de los campesinos pobres de este país, que se reclutan a la fuerza, aún lo siguen siendo en gran número. Cuando el país se urbanizó se acudió a los jóvenes de las barriadas populares. Lo novedoso sería que los hijos de los ricos engrosaran las filas del ejército que defiende sus intereses. Sin duda que la nueva figura de los 'soldados campesinos' es un buen instrumento para legalizar a los paramilitares de las zonas donde predomina la barbarie paramilitar, esa puede ser la vía de conseguir el monopolio de las armas, así que cuando se desmovilicen ya tienen quien les pague.
P. Arauca, que es lo que pasa allá?
R. Arauca se ha convertido en la prioridad para la guerra de Uribe por los yacimientos petroleros y por ser frontera con Venezuela. Así la maquinaria militar gringa instalada en Saravena, a más de cuidar el oleoducto, será centro de espionaje y conspiración contra Venezuela.
Se ha vendido la imagen que la guerrilla se ha enriquecido con el robo de los dineros provenientes de las regalías, cuando todo el mundo conoce como ha funcionado la maquinaria de corrupción de políticos nacionales y regionales que han dilapidado estos recursos sin dejar nada favorable para la región. Con este argumento desde noviembre del 2.001 se cancela totalmente la inversión social, y se destituye al gobernador elegido por voto popular. Se nombra desde Bogotá gobernador militar, posteriormente, con la Zona de Rehabilitación, se nombra como jefe supremo de Arauca al comandante de la Brigada XVIII.
Al definirse a Sucre, Bolívar y Arauca como ZONAS DE REHABILITACION Y CONSOLIDACION, en septiembre de 2.002, queda claro que Uribe aceptó sin ningún escrúpulo proteger los intereses de la empresa petrolera gringa OXY, lo que es lo mismo que G. W. Bush, pues por estos tres departamentos pasa el oleoducto Caño Limón-Coveñas. Ahora Arauca es un campo de concentración. Desde que se creo la Zona de Rehabilitación allí las fuerzas estatales han cometido 89 asesinatos, 11 desapariciones y centenares de allanamientos y detenciones arbitrarias.
De otro lado se ha inflado la información sobre los cultivos de coca en el departamento, para justificar las fumigaciones masivas que destruirán la despensa agropecuaria que alimenta a Bogotá. Cúcuta, Bucaramanga y Venezuela; afectarán de manera grave el ecosistema, la vida humana y de los animales, harán desaparecer las milenarias culturas indígenas. La coca que existe en Arauca no llega al 10% de los suelos para usos agropecuarios, sin contar las reservas forestales.
P. El clima mundial contra el terrorismo no permite que los Gobiernos o por lo menos así lo ve el de Colombia, tengan ningún contacto, simpatía o colaboración con los grupos incluidos dentro de esta categoría, el ELN lo está. ¿Qué van a hacer en el campo internacional, que siempre ha sido importante para ustedes?
R. A parte del gobierno colombiano, ningún otro gobierno del mundo nos ha calificado como tales. Como tampoco ningún gobierno nos ha extendido comunicación oficial donde suspenda las relaciones que hemos mantenido. Es indudable que el ELN valora muchísimo el esfuerzo que se hace desde la comunidad internacional por contribuir en la paz de Colombia. También existe un gran esfuerzo por la paz mundial expresada en las multitudinarias manifestaciones en las grandes ciudades del mundo contra el guerrerismo y el terrorismo de Bush, así como también la oposición que éste ha encontrado en los gobiernos de Francia, Alemania, China y Rusia entre otros.
P. Los países que tradicionalmente los recibían ¿les han cerrado las puertas? El Gobierno dice que el ELN se refugia en Venezuela.
R. Seguramente que existirán presiones del gobierno colombiano, pero la comunidad internacional tiene muy buena información de lo que acontece en Colombia. El problema del refugio es algo más amplio, pues existen millones de colombianos refugiados en Venezuela por ausencia de opciones económicas, por persecución política, el responsable de que esto suceda es el gobierno de Colombia, esto acontece desde hace décadas, ahora se quiere inventar que la guerrilla se refugia en Venezuela para incomodar al gobierno del vecino país. La lucha del ELN está en Colombia. Además en la frontera con Venezuela sólo tenemos fuerza guerrillera en 4 departamentos, y el grueso de nuestra fuerza esta ubicada en los Departamentos que no están lindantes con Venezuela. Lo más responsable en este tema es que el gobierno colombiano cree condiciones de vida digna, para que los casi tres millones de refugiados que mitigan su vida en ese territorio, retornen a la patria.
P. ¿Cómo ven la llegada al país de fuerzas especiales de los EEUU para una operación de rescate?
R. El problema es que los Norteamericanos están metidos aquí agenciando una guerra, vendiendo armas y químicos para fumigar, afectando a todo mundo y no quieren que les pase nada. Tampoco el problema es que las tropas gringas lleguen a Colombia, pues ellos ocupan militarmente lo que les da la gana, el lío sí es para Uribe, pues es un gobierno que no tiene dignidad para resolver el conflicto interno con el concurso de todos los colombianos acudiendo al mayor promotor de guerras en el mundo. No mira las consecuencias internacionales ni lo que ocurrirá en América del Sur; la historia lo dirá. El peso, sin duda, le quedará a Uribe.
P. ¿Cree que hay un cansancio de la guerra o al contrario hay engolosinamiento con la guerra?
R. Los únicos que se benefician con la guerra son los imperios que viven de vender armas y del saqueo de los pueblos. Y en ese sentido el mundo mira atónito ese engolosinamiento que tiene el Gobierno de Bush con las guerras. Quizá tiene endosado el crecimiento económico de sus trasnacionales al mortífero 'juego de dados' que es la guerra. En nombre de dios se están realizando las guerras actuales, es necesario volver a la razón. La humanidad no aspira a construir 'sociedades en guerra', sino a construir sociedades de vida, sociedades de razón.
P.¿Cuanto tiempo más perderemos, antes de iniciar a construir verdaderamente la paz?
R. El tiempo de una nación se pierde cuando sus gobiernos frenan su desarrollo humano, cuando niegan las búsquedas de una sociedad. El ELN continúa trabajando por la paz con todos aquellos que la quieren. Sabremos crear los escenarios indispensables para conseguir un consenso por la paz, y en el mejor de los casos podremos construir o formar un gobierno que haga de la paz su programa esencial. Las pesadillas, por lo general crean terror, pero pasan, en cambio los sueños perduran y crean futuros.