15 de septiembre del 2003
Entrevista a Taysir Alony, periodista de Al Yazira, acusado por el juez Baltasar Garzón de pertenecer a Al Qaeda:
«No tengo ninguna relación con Al Qaeda: todos mis contactos han sido con fines periodísticos»
Periodista Digital
Para llegar hasta Taysir Alony hay que atravesar muchas puertas blindadas. Y no se puede pasar la siguiente hasta que la anterior se cierre a espaldas del visitante con un característico chasquido cinematográfico que hiela la sangre. Tres controles -conocidos como molinillos-demoran veinte eternos minutos la entrada al corazón del Centro Penitenciario Madrid-V, ubicado en una bucólica pradera cercana al pueblo de Soto del Real donde pastan vacas y rebaños de ovejas 30 kilómetros al norte de Madrid. Cuando, finalmente, Taysir aparece bajo el marco de la puerta del desvencijado locutorio -el destinado a terroristas y presos en asilamiento, separado del comunitario para internos comunes--, con su barba blanca recortada, pantalones de pinzas, camisa de rayas blancas y azules y chaqueta de punto, parece como si acabara de terminar una de sus famosas apariciones en directo desde Bagdad o Kabul en la cadena de televisión Al Yazira.
Su rostro apenas refleja el calvario por el que está atravesando: el juez Baltasar Garzón le acusa de pertenecer a la organización terrorista Al Qaeda liderada por Osama Bin Laden y se enfrenta a la perspectiva de pasar los próximos 12 años entre rejas.
"Estoy tranquilo --dice tras el sucio cristal del locutorio a través del telefonillo donde ni siquiera hay una silla donde poder sentarse-- porque sé que las acusaciones contra mí son fruto de malentendidos y de ignorar las peculiaridades culturales de la comunidad siria a la que pertenezco". Y añade endureciendo el semblante: "Confío en que Garzón, como juez de reconocido prestigio que es, no se convierta en instrumento de nadie".
La mirada de Taysir refleja un estado de ánimo sereno. Su hablar pausado, casi meloso, en un perfecto español perfeccionado durante años en Granada, hace olvidar por un instante las graves acusaciones que pesan sobre él. El juez Garzón no le imputa un delito de " colaboración" con las actividades o las finalidades de una banda armada, organización o grupo terrorista castigado con penas de prisión de 5 a 10 años. El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional considera a Taysir "integrante cualificado" de la organización terrorista Al Qaeda, lo que supondrá de hecho una probable petición del Ministerio Fiscal de al menos 12 años de cárcel.
Taysir es consciente del revuelo mundial que ha suscitado su detención y encarcelamiento y sabe que la cadena de televisión qataría para la que trabaja, Al Yazira, ha advertido que "tendrá consecuencias" para España, como el boicot del turismo y de los productos españoles en el mundo árabe. E implora: "El campesino español, el trabajador español no se merece esto. El pueblo español es el más solidario del mundo con las causas justas y humanitarias. No se merece un boicot».
El curtido corresponsal de guerra minimiza la importancia de sus entrevistas a Osama Bin Laden. "No tengo ninguna vinculación o relación con Al Qaeda -afirma tajante acercando su rostro al cristal--. ¡Ninguna! Todos mis contactos han sido con fines periodísticos y como investigador para el Instituto de la Paz y Conflictos de Granada". Y, tras una breve pausa en la que su mirada continúa fija en las pupilas de su interlocutor, añade: "Las cantidades de dinero que Garzón me acusa de haber trasnsportado son ridículas. Es mi tributo como musulmán".
Sobre el conflicto en Irak, Taysir considera que "ha sido una guerra sin justificación ni respaldo de la ONU. Además se ha demostrado que Sadam no tiene armas de destrucción masiva. Los americanos fueron a liberar a los iraquíes y lo que han hecho es complicarles la vida."
Al ser preguntado por Periodista Digital sobre su opinión sobre los ataques del 11-S, Taysir no duda un instante: "Fue un atentado contra civiles que no se puede justificar de ninguna manera. Distinto hubiese sido una guerra entre ejércitos, entre Estados Unidos y Bin Laden. Pero civiles, no".