¿
QUE PASÓ EN EL VATICANO ?
Elaborado por la Redacción de SERPAL, Servicio de
Prensa Alternativa.
* En estos "tiempos del cólera", la diplomacia se despoja de las
escasas retóricas que suelen adornarla, y queda desnuda su urgencia por convencer,
someter o negociar con los eventuales aliados, dependiendo de la fuerza que
cada uno de ellos tenga.
La primera fase de esta imprevisible ofensiva norteamericana contra
el impreciso "enemigo terrorista", tiene dos aspectos fundamentales:
el de inteligencia y el diplomático.
En este último colaboran activamente los países europeos. Ahora están
ofreciendo a la dictadura pakistaní ventajas comerciales y dinero fresco
"para combatir la pobreza y fomentar el empleo". r> Milagros
que producen las crisis. Sería interesante hacer un seguimiento
del destino de las cuantiosas ayudas prometidas y en que medida llegarán realmente
al pueblo pakistaní. Pero esa, será otra historia...
Más allá de esta ofensiva diplomática que intenta de cualquier modo
incorporar países a esta "Alianza" en formación liderada por Estados
Unidos, se situaba el discurso del Papa Juan Pablo Segundo.
Desde los trágicos atentados en Estados Unidos, la máxima autoridad
de la Iglesia Católica se había expresado inequívocamente en contra de nuevas
acciones violentas. No es una interpretación capciosa: hace menos
de 48 horas, el Papa en su mensaje en la capital de la ex república soviética
de Kazajistán decía:
" Desde este país de Kazajistán, ejemplo de armonía entre hombres
y mujeres de diferentes orígenes y creencias, quiero hacer un vigoroso llamamiento
al mundo entero, a cristianos y a seguidores de otras religiones
para que trabajen juntos en la construcción de un mundo que ame la vida y
se desarrolle con justicia y solidaridad." Y agregaba:
" No debemos consentir que lo ocurrido nos lleve a hacer más profundas las
divisiones. "
Este mensaje es una continuidad de los que pronunció en los días anteriores,
donde no se insinuó resquicio alguno que justificara más violencia como
represalia, castigo o consecuencia de los terribles atentados.
Los editoriales de muchos diarios del mundo, con distintas palabras,
coincidieron en afirmar que el principal escollo moral al discurso de Bush
hablando de castigos y represalias , era el reiterado mensaje del
Papa, sus exhortaciones en favor de la paz y contrarias al inicio de
acciones que puedan desencadenar "una guerra de imprevisibles
alcances, con gran dolor para la Humanidad".
La enviada especial del diario español "El País" a la gira
papal, escribía ayer lunes: "La maquinaria imparable de la guerra
que el gobierno de Estados Unidos está poniendo en marcha en respuesta
a los atentados terroristas del 11 de setiembre, ha encontrado en el papa
Juan Pablo II un potente obstáculo. El Pontífice concluyó ayer su primer acto
de masas en Astana ( Kazajistán ) con una plegaria en la que pidió a cristianos
y musulmanes que "recen a Dios, del que todos somos hijos, para que el
supremo bien de la paz reine en el mundo".
Pero esa clara posición del Vaticano representada por su máxima autoridad,
tuvo hoy una imprevista matización, que en rigor, es una abierta contradicción
a la palabra de Juan Pablo Segundo.
Y no de un funcionario vaticano de modo aislado, sino al menos de dos: Joaquín
Navarro Valls, portavoz oficial del Vaticano y el Cardenal Camilo Ruini, presidente
de la Conferencia Episcopal Italiana y vicario de Roma.
No es la primera vez que Navarro Valls es señalado como la voz más "política"
del Vaticano, pero en este caso su intervención es contradictoria con el mensaje
papal en un tema tan grave y delicado para todos los seres humanos como el
de "paz o guerra."
Navarro dijo que el Vaticano prefiere una solución no violenta a la
crisis internacional generada por los atentados, "pero que al mismo tiempo,
comprendería un recurso a las armas por parte de Washington para
defender a los ciudadanos norteamericanos de amenazas futuras".
El portavoz, dijo también que el Papa no es un"pacifista".
"A veces, añadió, es mas sabio actuar antes que restar pasivos. En este
sentido, interpretó, el papa no es un pacifista, porque es necesario recordar
que en nombre de la paz pueden ser cumplidas grandes injusticias".
"La Santa Sede, añadió, considera que cualquier acción militar debe ser
dirigida contra el terrorismo y no contra el Islam", con lo cual introdujo
por primera vez desde el 11 de setiembre, una presunta aceptación de la Iglesia
al uso de la fuerza como respuesta o castigo en esta crisis.
Un agregado que suma desconcierto y justifica el título de esta nota,
es que el portavoz Navarro Valls hizo estas declaraciones en la misma ciudad
donde el Papa terminaba de exhortar al diálogo y había convocado a la paz.
Casi al mismo tiempo, Juan Pablo se despedía de Kazajistán ( viajaba a Armenia)
afirmando: "el odio, el fanatismo y el terrorismo, profanan el nombre
de Dios y desfiguran la auténtica imágen del hombre".
Y más aún, pidió un esfuerzo común "para que Dios no sea secuestrado
por las ambiciones de los hombres, nunca más".
Algunos recordaron que mientras el Papa realiza su gira, el secretario
de estado vaticano, Cardenal Angelo Sodano se quedó en Roma. Allí al
frente de un "gabinete de crisis" analiza la marcha de la crisis
internacional. Teniendo en cuenta el valor y la trascendencia que la
palabra "oficial" de la Iglesia Católica tiene en el mundo para
millones de creyentes, lo sucedido en las últimas horas es un hecho grave.
Un acontecimiento al que no se sabe si incluír en el campo de la
diplomacia o en el de los primeros combates de una guerra de imprecisos
alcances y fantasmagóricos "enemigos".
¿ Qué pasó en El Vaticano ? ¿ Que incidencia tendrá en los acontecimientos
que se están fraguando, en gran medida a espaldas de quienes lo van a sufrir,
los pueblos ?
* Redacción de SERPAL, Servicio de Prensa Alternativa