DESLINDE, José Ríos R.

La tradición de lucha es decisiva, el Sindicato Único de Trabajadores en la Educación del Perú (SUTEP), lo está demostrando, hoy como ayer, en esta jornada de lucha por elevar el nivel de vida del maestro peruano y en defensa del derecho del pueblo a la educación.
Alejandro Toledo nos enteró anteanoche de la decisión de su gobierno, respaldada por el íntegro de los partidos del ‘orden establecido’, de declarar el Estado de Emergencia, suspendiendo la vigencia de las garantías personales, y disponiendo la salida de las tropas en todo el territorio nacional (en 12 de los 25 departamentos-regiones, ha entregado el mando a los militares), por 30 días a partir de las 00 horas de ayer.
La reacción del magisterio nacional ha sido una sola: continuar con la huelga magisterial, toda vez que la burla gubernamental no puede ser más evidente. 200 soles (menos de 60 dólares), pagaderos en 2 meses. Los tanques salieron ayer, y las tropas (70% de los efectivos militares) no dudaron en hacer uso de las armas, disparándolas directo al cuerpo de los huelguistas, producto de lo cual hay numerosos heridos con perdigones. La policía ha usado gases a porfía, causando estragos en la población.
Los trabajadores del poder judicial, igualmente siguen adelante, a diferencia de otros gremios, que ha suspendido la medida para cuando termine el Estado de Emergencia decretado por el gobierno de Toledo. Los frentes regionales: Loreto, Ucayali, Madre de Dios, Huaraz, llevan a cabo sendas paralizaciones de 24 y 48 horas por sus propias reivindicaciones y contra el Estado de Emergencia (Madre de Dios).
Los estudiantes de la Universidad Nacional del Altiplano (Puno) se enfrentan con la policía y el ejército, con un saldo de 40 heridos de bala y 1 estudiante asesinado por las fuerzas represivas.
¿Entonces, señores del gobierno? Es mentira que este Estado de Emergencia es diferente a los anteriores, las balas de la ‘democracia toledista’ matan igual que las de las peores dictaduras que han asolado el Perú, ‘domingo, lunes y martes’. Y los perdigones también matan señores toledistas, esos perdigones que han sido disparados a mansalva en los combates por el control de la panamericana en el ‘Norte Chico’, en el departamento de Lima.
Ahora toca al estudiantado nacional salir en apoyo militante de los maestros, desafiando la prepotencia de los tanques, y exigiendo a la burocracia ‘cegetepista’ de la ‘izquierda’ domesticada romper con el toledismo y convocar a un paro nacional de solidaridad con el magisterio y con todos los gremios en conflicto.
Los estudiantes de Puno, criminalmente atacados por la policía y el ejército son un valeroso ejemplo a seguir, y deben ser apoyados en su propia lucha, exijamos la destitución del ministro del Interior, responsable político de la muerte de EDDY QUILCA CRUZ, estudiante puneño asesinado por los elementos represivos del toledismo.
Las calles del Perú deben convertirse en un escenario de la protesta estudiantil, por la solución a la huelga magisterial y la salida del ministro del Interior. Libertad para los detenidos.
El magisterio no debe ser derrotado, los maestros merecen vencer, y su sacrificio no debe ser en vano.