Nebera

Estos días he sido testigo y parte de una serie de comentarios que me obligan a estas líneas como un ejercicio de solidaridad con algunos de esos rostros que las imágenes nos ofrecen con una generosidad obviada en otras muchas ocasiones y en otros lugares.

Es común, demasiado común añadiría, el comentario "que se jodan los americanos" y, dependiendo del interlocutor, podría modificar americanos por yankees o gringos por anotar solo los términos mas suaves que merecen o se hacen merecedores.

Estoy hablando, como habrán adivinado, del desastre que ha provocado Katrina en su paso por el sur y centro de Estados Unidos, Florida, Bahamas, Louisiana, Missisipi y Nueva Orleáns como referencia obligada.

Estoy hablando de cientos o miles de muertos y eso es lo que provoca en mí esos sentimientos encontrados que hoy me gustaría plasmar en estas líneas. Los muertos y el dolor de los vivos siempre provocan en mi sentimientos encontrados.

Tengo muy claro que este tipo de tragedias, y la muerte de decenas de personas siempre es una tragedia, se ceba mas sobre los más necesitados, los marginales, aquellos cuya existencia es más precaria. Estoy convencido que salvo excepciones que hacen de toda regla excepción aquellos que no evacuaron la ciudad, las ciudades, sabiendo lo que se les venia encima fueron, en gran medida, quienes carecían de medios, coches o aviones, para hacerlo.

Por todos ellos, por muchos de los que las imágenes nos muestran, mi sentimiento es de un llanto amargo y rabioso para sus prohombres y, para resumir, contra su George Bush en especial al que ellos mismos, los americanos, reeligieron para salvaguardar su propia seguridad nacional importándoles muy poco su política genocida a las ordenes de las multinacionales del petróleo y el armamento.

La opinión que merece este truhán de la política descalificaría, por sus insultos, cualquier opinión anterior o posterior de este articulo. No creo que sea parte de este artículo.

La opinión que merece Putin no descalifica la solidaridad con los muertos, asesinados, en los asaltos al teatro de Moscú o la escuela de Beslan en clara referencia a la genocida política moscovita contra la disidencia chechenia.

La de Aznar no desmerece la solidaridad con los muertos del 11M.

La de Brair con los del 7J.

La de Hussein no desmerece la solidaridad con el pueblo iraquí y esa guerra que solo los intereses capitalistas de estados terroristas como los Estados Unidos, Gran Bretaña y el Estado Español no dudaron en declarar de forma unilateral.

El genocida Sharon no justifica la muerte de miles de israelitas y palestinos.

Y así podríamos ir definiéndonos país por país, frente a sus mandatarios políticos y con sus habitantes que los sufren. Seguramente un tribunal de los Derechos Humanos menos influenciado que el de la Haya no dudaría en dictar condena a ninguno de ellos, Bush, Putin, Blair, Aznar, Hussein o Sharon, yo desde luego no dudo en que muchas de acciones de estado si son merecedoras de esta condena.

Cada cual tiene lo que se merece es solo en parte real y cierto ya que por eso de la democracia y el derecho o sufragio universal sufren igual las mayorías que las minorías, quienes les votan como aquellos que lo hacen a la oposición.

El pueblo de Nueva Orleáns seguramente se merece parte de la tragedia casi natural que le ha pasado por estar donde estaba y su desafió a las leyes de esta naturaleza y parte de la población afectada no merece de nuestras lagrimas por su falta de solidaridad o esa violencia desatada, entre la que no incluyo los saqueos o algunos de ellos, contra sus iguales.

Muchas de las tragedias provocadas por "medios naturales" han sido provocadas por el hombre en su empeño, muchas veces producto de oscuros intereses personales, por hacer las cosas mal o peor y de no aprender con la experiencia.

Terremotos, seísmos, huracanes, tsumanis, riadas, sequías… siempre encontraremos una excusa para decir que no podemos hacer nada contra ellos, son desastres o catástrofes naturales y como tales lejos del poder del hombre. Que injusticia.

Este artículo lo había pensado mas en las descalificaciones o no solidaridad de todos nosotros con los muertos provocados por el huracán Katrina, esta claro que es difícil mirar una imagen y centrarnos solo en ese rostro de impotencia y dolor sin ver detrás una serie de consideraciones añadidas que nos hacen mas o menos solidarios.

La organización de Médicos sin Fronteras resumía esta solidaridad en la riqueza o pobreza del país que la siente. Estados Unidos se ha ganado esta opinión pública insolidaria que no llora por sus victimas civiles sabiendo que su política genocida esta sembrando un mundo de victimas que solo sus intereses alimentan.

Un poco mas cerca de todos nosotros, en un terreno que conozco mas y mejor, se encuentra una obra ilógica e injustificada que puede sembrar de muertos poblaciones civiles que se han opuesto a ella desde un principio, muchos de sus combatientes han sido golpeados, denunciados y encarcelados por el poder político que decidió llevarla a cabo a pesar de las sentencias judiciales que la prohibían y de los muchos estudios que la denunciaban por inviable, innecesaria y peligrosa.

La presa de Itoiz reventara, su asentamiento sobre laderas arcillosas así lo presumen, e inundara todo el valle causando miles de muertos. Solo son parte de las consideraciones del informe del catedrático de geodinamica Antonio Casas.

Su obra, calificada por el Ministerio de Ambiente como de máximo riesgo, ha sido parte de un proyecto personal y político del ultra conservador partido Unión del Pueblo Navarro que ha desoído sentencias del Tribunal Supremo al igual que hace oídos sordos a los múltiples avisos, seísmos repetidos, que la presa esta mandando a las poblaciones mas cercanas. La Naturaleza siempre avisa.

Si un día este desastre se produce no me gustaría oír "que se jodan los navarros" o "que se jodan los aragoneses" porque entre los muertos se encontraran, seguro que si, amigos y familiares que no se merecen a UPN y mucho menos los intereses que estos defienden.