Marginados en los medios de comunicación tejen redes digitales
utilizando los móviles
Xosé Ramil Canal Solidario
Con un móvil, taxistas de México, gitanos y, ahora, personas que ejercen la
prostitución en Madrid envían mensajes sobre sus vidas. El resultado es Canal
Invisible, un proyecto de Antoni Abad frente al estereotipo y el rechazo social. En estos momentos, 15 personas que ejercen la prostitución en Madrid van
provistas de teléfonos móviles con cámara y grabadora de sonido integrados. Cada
cierto tiempo, transmiten fotos de los espacios que frecuentan, monólogos o
conversaciones con compañeras y compañeros sobre su vida diaria, o pequeños
textos con sus impresiones, sensaciones y desesperanzas.
En tiempo real, sin previa edición y ningún tipo de censura, todo ese cúmulo de
mensajes de texto, imagen y audio se publica automáticamente en
Canal Invisible,
sitio web diseñado por Antoni Abad, uno de los vídeo-artistas españoles más
reconocidos internacionalmente.
Canal Invisible es uno de los espacios virtuales de
zexe.net donde ya
han dejado una huella profunda los taxistas de México y varios grupos de gitanos
de Lleida y León. Pero, ¿qué tienen en común estos taxistas, gitanos y, ahora,
personas que ejercen la prostitución en las calles de Madrid?
"Son personas que habitualmente no tienen presencia en los medios de
comunicación o, cuando la tienen, es casi siempre negativa. Además, muchos de
ellos también sufren estereotipos e imágenes muy polémicas", señala Abad en La
Casa Encendida de Madrid, donde muestra este proyecto dentro de
la exposición Cuartos Mundos.
Antoni Abad es uno de los artistas de referencia en el net.art, con proyectos
presentados en el MOMA de Nueva York, la Biennale de Venecia, el Reina Sofía de
Madrid o el Centro de Arte Contemporáneo de Barcelona, entre otros. Hace dos
años, Abad descubrió el enorme potencial que podía tener un teléfono móvil
provisto de cámara y grabadora en ciertos grupos de personas. Desde entonces,
sólo se dedica a dar voz a quienes pocas veces se les escucha.
"No sé si esto es arte, y tampoco me importa. Pero los resultados que provoca
dar herramientas de comunicación a esta gente son increíbles", señala Abad con
una pasión que no pierde en ningún momento mientras explica los orígenes de
Canal Invisible.
Todo empezó en Ciudad de México. Decir que los taxistas de la capital mexicana
tienen una imagen polémica o negativa es quedarse corto. Hasta el Departamento
de Estado de Estados Unidos advertía recientemente sobre los frecuentes asaltos
a turistas en los taxis.
Con la ayuda de amigos y universitarios, Abad proporcionó a 17 taxistas un
teléfono móvil con cámara incorporada para que se convirtiesen en cronistas de
sus vidas, mediante el envío de fotos, textos, archivos de audio y de vídeo. Así
se construyó la web Sitio Taxi,
donde automáticamente aparecían los mensajes de estos taxistas.
La experiencia tuvo tal repercusión que el periódico
Universal –de gran
tirada en la capital- publicó un pequeño suplemento sobre Sitio Taxi, donde
recogía gran parte de los mensajes de los taxistas, lo que contribuyó sin duda a
mejorar su imagen.
El siguiente objetivo fueron los gitanos de
Lleida y
León, concretamente
los grupos más jóvenes y conocedores de Internet por el largo tiempo que pasan
chateando. Canal Gitano era la plataforma que recogía sus mensajes y donde los
propios participantes intercambiaban opiniones y visiones sobre lo que les
rodeaba.
Y ahora el proyecto se traslada a Madrid. 17 personas que ejercen la
prostitución ya han comenzado a enviar sus mensajes, fotos y archivos de sonidos
a Canal Invisible,
que comentan en grupo y con Antoni Abad cada cierto tiempo. La imagen predomina
esta vez sobre el texto porque, en realidad, esas imágenes hablan por sí solas.