El gobierno de "transición ordenada" se revela como un gobierno
de "retirada sangrienta".
El Partido de la Izquierda Nacional repudia tajantemente el asesinato a sangre
fría de dos militantes populares (uno de ellos por la espalda, mientras
atendía a un herido) en la Estación Avellaneda.
Con este doble crimen, que se cometió a diez cuadras del punto donde un
grupo de piqueteros fue reprimido con la mayor bestialidad, el régimen
del Partido Unico de la Dependencia, presidido ahora por el Dr. Duhalde, vuelve
a ponerse en el carril que lleva a toda velocidad a un 20 de diciembre.
No fueron "agitadores" ni "operadores" -como piensan los geniales gobernantes
que tenemos- los que determinaron ese alzamiento popular masivo, sino la política
de De la Rúa, del establishment, y del Fondo Monetario Internacional.
Insistir en la misma política económico-social implica, necesariamente,
seguir matando ciudadanos argentinos.
El Dr. Duhalde ha cedido en todas y cada una de las exigencias del FMI. Ahora
también le sacrifica jóvenes argentinos (ˇtemibles militantes subversivos,
por cierto: un organizador de huertas comunitarias, un trabajador en una fábrica
de ladrillos autogestionada!). Ha llegado el momento de decir ˇbasta!
Estos crímenes no pueden quedar impunes. Y no se trata solamente de la
responsabilidad material específica, que siempre puede borronearse (los
policías asesinos de Teresa Rodríguez nunca fueron identificados).
Aquí hay gigantescas responsabilidades políticas.
1) Deben renunciar, desde el Ministro del Interior de la Nación hasta el
último oficial policial bonaerense, todos los implicados en los hechos
de ayer.
2) Los cuerpos represivos, pesada herencia de los tiempos de Onganía, deben
disolverse o (en el caso de Gendarmería y Prefectura) volver a su misión
original de cuidar al país en las fronteras. En particular, sería
excelente que protegieran a la Patria allanando esas fronteras sin garita de migraciones
que son los despachos de los bancos imperialistas y de las grandes empresas privatizadas.
3) La práctica de responder con balas al hambre lleva directamente al caos
y la guerra civil. Hay que romper con el Fondo Monetario, los banqueros y las
grandes empresas de una buena vez y para siempre. Esa es la única forma
en que se podrá garantizar la paz social. Ninguno de esos poderes está
interesado en que la Argentina se tranquilice: su interés radica en caotizar
el país, generar una hiperinflación, imponer una dolarización
y reducirnos a la condición de colonia informal del Gran Imperio Norteamericano.
4) El PIN convoca a todos sus simpatizantes y amigos de la ciudad de Buenos Aires
y alrededores a participar con los compañeros del Centro de Estudios Nacionales
Arturo Jauretche (en el Movimiento Patriótico 20 de diciembre) en la movilización
de repudio convocada para hoy jueves. Nos concentramos en Belgrano y Entre Ríos
a las 16:00 horas.