Por: Víctor M. Carriba

Luego de una jornada histórica en su lucha contra los crímenes de la dictadura militar (1976-1983), los argentinos recuerdan hoy a una de las víctimas emblemáticas de aquel régimen: el escritor y periodista Rodolfo Walsh.

Ese intelectual fue uno de los miles de nombres mencionados ayer en los diversos actos realizados aquí con motivo del 28 aniversario del golpe de Estado que instauró a los uniformados en el poder y que en esta ocasión estuvieron marcados por fuertes acciones impulsadas, por primera vez, desde el gobierno nacional.

Exactamente un año y un día después de aquella asonada del 24 de marzo de 1976 Walsh fue secuestrado y desaparecido por efectivos de la dictadura y, según algunos investigadores, asesinado en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).

Esa misma instalación, uno de los centros de detención, tortura y muerte creado por los militares, fue transformado ayer en Museo de la Memoria por decisión del presidente, Néstor Kirchner, quien pidió perdón en nombre del Estado argentino por 'la vergüenza de haber callado durante 20 años de democracia tantas atrocidades'.

Walsh fue fundador junto con su compatriota Jorge Ricardo Masetti y el colombiano Gabriel García Márquez de la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina, creada en Cuba en junio de 1959 por iniciativa del también argentino Ernesto Che Guevara.

Horas antes de su captura en una esquina de Buenos Aires -donde ayer se sembró un árbol en su memoria-, el periodista logró colocar en un buzón de correo el texto de su 'Carta abierta de un escritor a la junta militar', una aplastante denuncia contra los crímenes del régimen castrense.

Ese texto es considerado aquí como uno de los testimonios periodísticos más valiosos acerca del exterminio realizado en este país por los militares en la segunda mitad de la década de 1950.

Otros títulos de su autoría fueron Cuentos para tahúres (1951- 1961), Variaciones en rojo (1953), Operación masacre (1957), Los oficios terrestres (1965), Un kilo de oro (1967), Quién mató a Rosendo (1969) y Caso Satanowsky (1973).

Para el prestigioso intelectual Osvaldo Bayer, Walsh escribió de sobrevivientes, viudas, huérfanos, conspiradores, asilados, prófugos, delatores presuntos y héroes anónimos y 'ha quedado siempre joven, impetuoso'.

Tal vez como los jóvenes que ayer, tras la ceremonia que inició el proceso de transformación de la ESMA en un Museo de la Memoria, subieron al techo de la instalación y colocaron por encima del escudo nacional y del letrero 'Escuela de Mecánica de la Armada', una bandera con la imagen del Che Guevara.