La Fogata con las Madres
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JUEVES EN LA PLAZA, CON LAS MADRES
Jueves 4 de marzo de 2004. Hebe de Bonafini
Compañeros, compañeras: ayer habló Godoy, el jefe de la Armada, dicen que hizo un mea culpa, que el presidente vio el discurso, que estuvieron de acuerdo. Y muchos están muy contentos, y lo grave de esto es que acostumbran al pueblo a que se conforme con la mínima, que un buen hijo de puta diga que fue terrible lo que pasó en la Escuela de Mecánica de la Armada.
Nosotros decimos que la Escuela de Mecánica de la Armada fue un lugar siniestro, donde mataron más de cinco mil jóvenes. Este hombre que habló ayer, que en esa época tendría 27 o 28 años, no estaba jugando en el jardín de infantes, que los operativos para secuestrar, torturar y violar eran preparados con tiempo, diagramados con tiempo, a ver a quién secuestraban, a qué casa iban, a quién se llevaban. Mientras ellos comían en el casino de suboficiales, abajo estaba el lugar más terrible de la tortura. No puede decir que él no participó, él fue cómplice directo.
Y a las Madres nos repugna y nos parece hipócrita esta posición, porque tenemos que tener claro que fuimos el único organismo que fue infiltrado por la Marina. Fue infiltrado y mandaron al capitán Astiz a que nos investigue. Desde el mes de agosto, primeros días de agosto, hasta diciembre, cuando se provocaron los secuestros, él estuvo infiltrado en las Madres con otro grupo. Y nos espiaron bien, porque las Madres que fueron secuestradas eran las mejores Madres, las que más sabían: Azucena Villaflor, que era una mujer que nos dijo "Madres, vamos a la Plaza", la creadora del movimiento; Esther Balestrino de Careaga, que venía huyendo de la dictadura paraguaya, una revolucionaria, una bioquímica, una mujer súper inteligente, que me enseñó que cuando alguien tiene el micrófono en una reunión, ése es el que manda, "y si no te escuchan, Hebe, tenés que pararte arriba de una silla pero hacete escuchar", sabía cómo había que manejarse, sabían hacer una carta; y Mary Ponce, que estaba en la iglesia del Tercer Mundo. No se llevaron a cualquier Madre, fueron secuestradas, torturadas, violadas y asesinadas en la Escuela de Mecánica de la Armada y casi nadie quiere poner esto. Lo ponen como al pasar porque es demasiado pesado que la sociedad se calló, silenció, y que la Armada y el Ejército y todo el proyecto tengan sobre su cabeza y sobre sus espaldas el secuestro de las Madres que fueron secuestradas por reclamar por sus hijos.
No aceptamos la autocrítica, es repugnante. No la queremos. No queremos olvidar, ni perdonar, ni reconciliarnos.
Si la Escuela de Mecánica de la Armada es expropiada toda, las Madres pondremos lo que le pedimos al Presidente, que es una escuela de arte popular donde todos tengan un espacio. Pero si sólo es expropiar una parte y tenemos que compartir aunque sea el césped con los asesinos, no vamos a aceptar, no nos vamos a mezclar y el 24 de marzo no estaremos para firmar la expropiación, porque no es cierto. La ESMA es toda, no un pedacito. Porque si expropian sólo una parte también tiene que ver con la reconciliación, porque si expropian una parte hace que unos y otros tengamos que pasar por el lugar, saludarnos, decirnos "Hola, qué tal", nos vemos todos los días. No. Eso no lo vamos a aceptar las Madres. Si se expropia toda estaremos, y si no rechazaremos y repudiaremos a todos aquellos que acepten la reconciliación de una manera, así, por arriba, pero que es concreta.
Gracias, compañeros. Hasta el jueves que viene.