La Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información se opone al "neocolonialismo digital"
Arantxa Orusco
La Semana
La Cumbre mundial de la Sociedad de la Información se ha celebrado en Ginebra con el claro objetivo de favorecer la cooperación internacional y la solidaridad electrónica entre las naciones.
El retraso de cientos de miles de pueblos en el mundo topa con el excesivo desarrollo tecnológico con el que cuentan las grandes potencias.
Bajo los auspicios de la ONU y de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (IUT), la Cumbre de Ginebra ha reunido, además de a países de todo el mundo, a grandes empresas privadas cuyas propuestas no eran bien aceptadas por los gobiernos. El hecho de la ayuda que necesitan ciertos países en infraestructuras de comunicación choca con que empresas privadas quieren dedicarse a abastecer a países pobres de la tecnología necesaria. Diversas ONG´s han denunciado este hecho porque supondría un "neocolonialismo digital".
La declaración de los Derechos Humanaos ha sido clave para que todos coincidan en que es un derecho del individuo ser emisor y no sólo receptor de la información.
Otro de los temas que se han tratado en la Conferencia es la posible creación de una Agencia de la ONU que controle Internet a nivel mundial y no como actualmente ocurre, ya que el medio electrónico se encuentra controlado por una autoridad privada, el ICANN.
Por otra parte, las ONG´s defienden la libertad pública y de intimidad en Internet, ya que muchas redes se encuentran controladas, provocando una violación en los derechos del usuario.
Finalmente, la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información ha desembocado en una declaración final, firmada por los 191 estados miembros de la ONU, constituyendo una especie de Carta Magna de la Sociedad de la Información que será puesta en práctica en los próximos dos años para la creación de una Sociedad de la Información mundial más justa y solidaria.