Sección Especial Bolivia

El neoliberal Gonzalo Sánchez de Lozada fue proclamado hoy presidente boliviano para el período 2002-2007, al alcanzar la mayoría en el Congreso Nacional, después de una maratónica sesión de más de 24 horas.

 Sánchez de Lozada y su vicepresidente, Carlos Mesa, gobernarán Bolivia por cinco años a partir del martes 6 de agosto.
El presidente electo, del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), y el indígena Evo Morales, del Movimiento al Socialismo (MAS) definieron en balotaje en el Congreso al no haber conseguido ninguno el 50 por ciento de los votos en las elecciones generales de junio pasado.
El jefe del MNR se aseguró la presidencia con la firma de una alianza con el Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR), del ex presidente boliviano Jaime Paz Zamora, un antiguo rival ahora convertido en su aliado.
El acuerdo alcanzó también a la oficialista Acción Democrática Nacionalista (ADN) y la populista Unión Cívica Solidaridad (UCS).
Sánchez de Lozada ganó con 84 votos, dos menos que lo estimado ya que el senador y jefe del Frente de Izquierda Revolucionario (FRI, aliado del MIR), Oscar Zamora, y un correligionario, votaron en blanco, en desacuerdo con la alianza que selló Paz Zamora.
Al culminar la votación, los militantes del MNR gritaron "sí se pudo", consigna que Sánchez de Lozada mantuvo durante toda su campaña electoral.
En senadores, 16 votaron por el MNR, ocho por el MAS, uno en blanco y dos nulos.
En diputados 68 votaron a favor del MNR, 35 para el MAS, un voto en blanco y 24 nulos.
En total, 84 legisladores votaron por el MNR, 43 por el MAS, dos en blanco y 26 nulos, en tanto que otros dos no emitieron su voto.
Para ganar la votación en el Congreso después de no haber conseguido el 50 por ciento de los votos en las elecciones generales del 30 de junio pasado, cada candidato necesitaba al menos 79 de los 157 sufragios parlamentarios que componen el Parlamento (27 senadores y 130 diputados).
El analista político Jorge Lazarte estimó que el líder cocalero Evo Morales, convertido ahora en el principal dirigente de oposición en Bolivia, tendrá en el Parlamento un "trabajo de fiscalización fuerte y radical".
Para Lazarte, el MAS "se va a jugar su propia existencia con miras a alcanzar más escaños para llegar al poder en las elecciones de 2007".
El panorama para Sánchez de Lozada se insinúa muy complicado, ya que su primera tarea será elegir el puerto por el cual Bolivia exportará su gas a Estados Unidos --para lo que tiene unmes de plazo--, pero se topará en esa decisión con la férrea oposición de Morales a escoger a Chile como salida. El nuevo presidente necesita al menos dos tercios de los votos, es decir 105 de los 157 legisladores, una cantidad que tras la cosecha de sólo 84 voluntades para erigirlo mandatario parece imposible de obtener. Durante las 24 horas que duró la sesión parlamentaria en que Sánchez de Lozada fue ungido presidente, la periferia del recinto de sesiones vivió escenas tensas entre las barras del MNR y el MAS.
La mujeres indígenas incluso se alzaron sus faldas plizadas como signo de protesta.*