Eduardo Tamayo ALAI
La propuesta de conformar la Alternativa Bolivariana para América Latina y El Caribe, ALBA, en oposición al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas, que supuestamente debe entrar en vigencia en el 2005, fue objeto de un rico debate en el Encuentro Internacional de la Resistencia y Solidaridad de los Pueblos Indígenas y Campesinos que se desarrolla con la asistencia de unos 3000 delegados (as) de América, desde el 11 al 14 de octubre.
La iniciativa del ALBA fue lanzada por el presidente venezolano Hugo Chávez Frías. Durante una sesión del Encuentro, la profesora de Economía de la Universidad Central de Venezuela, Judith Valencia, fundamentó esta propuesta, planteando que el ALBA no es una respuesta al ALCA en el sentido contrario, sino que es otra cosa: es vida, no es represión ni opresión, manifestó. "Los pueblos indígenas y campesinos, con la Constitución en la mano, proponemos a quienes resisten las posiciones pro-ALCA de sus gobiernos, un modo de abordar la vida, una manera de vivir, un ALBA para los pueblos hermanos", agregó..
El ALBA no es una posición que el gobierno de Venezuela presenta en la mesa de negociación del ALCA, es una cosa diferente: es un renacer, una esperanza, otra manera de vivir, porque el ALBA propone un renacer de los proyectos de vida que quedaron inconclusos, que fueron abortados, reprimidos por siglos, por décadas. "Es nuestro deseo que en el ALBA renazcan y se unan los sueños retenidos en el tiempo por la fuerza de las políticas invasoras y explotadoras, expansionistas y anexionistas de los capitalistas", manifestó Judith Valencia.
El ALBA, sin embargo, no es un proyecto elaborado y acabado porque es un proceso en camino, en acción, que todos los días se inventa, en el que deben participar todos los que "resisten a la humillación e insurgen dignamente".
"El ALBA es una visión del mundo desde nuestra América, que no comulga con la lógica imperial del ALCA, el ALBA se propone coagular el ALCA a nivel de gobiernos, que se queden los gobiernos con su ALCA, que los pueblos asuman su ALBA. Porque el ALBA es integrar las capacidades de los pueblos y sus territorios, para satisfacer las necesidades de los pobladores de estas tierras, necesidades de abrigo, de ocio, del cuerpo y de los espíritus de los deseos por venir, para hacer realidad la felicidad que es una construcción cultural".
El ALBA debe expresarse de diferentes maneras en los indígenas, en los campesinos, en los ciudadanos (as). "Desde finales del siglo XX, el globo se ha enmallado y fue enmallando a la Tierra, pero así mismo las multitudes se fueron poniendo de pie para defender su territorio, porque la primera A de ALBA es Área, y es muy importante que no se confunda con la primera A de Área del ALCA. La lucha es por el territorio: o se apropia el inversionista o lo ocupamos los pobladores, en eso radica la pelea", según la argumentación de la profesora que habló a nombre de la Coordinadora Agraria Nacional Ezequiel Zamora de Venezuela.
Por su lado, Rafael Alegría, dirigente del movimiento campesino mundial Vía Campesina, uno de los organizadores del Encuentro, apoyó la propuesta del ALBA, señalando que ésta tiene sustentación política, económica, ideológica, integracionista y solidaria.
"Yo creo que esa es la alternativa, por supuesto que hay que interiorizarla más en los debates a todos los niveles, pero yo creo que el ALBA abre la puerta para la sustitución del ALCA, porque el ALCA es un proyecto de las multinacionales norteamericanas, un proyecto anexionista , y el ALBA es un proyecto de liberación de los pueblos", agregó Alegría, quien añadió que, tras el fracaso global de la Organización Mundial de Comercio en Cancún, el imperio está buscando alternativas como los tratados regionales como el ALCA, pero si fracasa con el ALCA, contemplará las alternativas bilaterales de gobierno a gobierno.
Agregó que el ALCA es un proyecto que está fracasando, está empantanado, y todo lo están dejando para la próxima reunión ministerial del ALCA en Miami que se desarrollará del 17 al 22 de noviembre, "pero las fuerzas sociales nos estamos movilizando y dudamos que saquen resultados definitivos".
Por último, Nicia Maldonado, representante del Consejo Nacional Indio de Venezuela, CONIVE, dijo que le proyecto del ALBA hay que discutirlo, consensuarlo, para que sea fruto del pensamiento de la mayoría, y que en este debate deben participar los pueblos y los movimientos sociales que son los que deben definir el contenido del proyecto.