Las playas de Barcelona se convertirán este viernes en pistas improvisadas para los 466 vehículos que, hasta el 16 de enero, participarán en una nueva edición del rally Dakar. El evento parte este año desde la capital catalana, ciudad que con la acogida del Dakar contradice algunos de los valores defendidos durante meses en el Fórum de las Culturas.

Esta afirmación la hace la Federación Catalana de ONG para el Desarrollo, que señala que el hecho de que el rally salga desde Barcelona "supone una contradicción respecto a los principios del Fórum y a los que inspiran la cooperación internacional con África de los gobiernos autonómico y municipales". El seguimiento informativo de la carrera, dice la entidad, será muy superior al espacio que los medios de comunicación dedican habitualmente a temas relacionados con el continente africano y sólo servirá para "reforzar todos los estereotipos y mantener en el imaginario colectivo el punto de vista del colonizador".

En esta edición, el rally pasará por Marruecos, Mauritania, Mali y Senegal, unos de los países (a excepción de Marruecos) más pobres del planeta, según Naciones Unidas. Como explican desde entidades como la FCONGD y Ecologistas en Acción, el paso de centenares de vehículos por esta región, muy afectada por la desertización, supone también una importante contaminación atmosférica y acústica, así como un impacto negativo sobre su fauna.

En este contexto de críticas, la empresa organizadora del rally (ASO) puso en marcha hace poco más de dos años un programa de cooperación con varias comunidades de Senegal, a través de la organización británica SOS Sahel. Junto a esta entidad, los organizadores del Dakar han financiado en los últimos tres años proyectos relacionados con la formación, la rehabilitación de infraestructuras y el medio ambiente valorados en 300.000 euros, el 75% de los cuales financiado por ASO.

Sin embargo, el presupuesto invertido en desarrollo por esta empresa es "ridículo", afirma la Federación Catalana de ONGD, ya que cada año, y sólo en cuotas de inscripción, el rally Dakar "mueve unos 8 millones de euros" (unos 1.300 millones de las antiguas pesetas).

A las críticas de la FCONGD, que pide al Ayuntamiento de Barcelona que la ciudad no sea "nunca más" anfitriona del rally Dakar, se unen también, de manera indirecta, las de organizaciones no gubernamentales como Médicos Solidarios. Esta entidad organiza desde hace ocho años una caravana solidaria que, con una ruta alternativa pero coincidiendo en el tiempo con el rally, pasa por Marruecos, Mauritania, Mali y Senegal para hacer llegar ayuda humanitaria.