Latinoamérica
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Sigue tensa situación en el país
Adital
El alza de los precios de los combustibles, la incapacidad del gobierno nacional de proponer una estrategia para resistir a la crisis y lograr la supervivencia de los más pobres han generando una peligrosa ola de violencia, que amenaza con crecer. En un relato a Adital, el educador nicaragüense Ricardo Zúñiga afirma que el alza de los costos del combustible ha provocado una crisis de la economía en Centroamérica en general, pero en países como Panamá, el gobierno tomó la decisión de reducir el impuesto al combustible. En otros países se toman medidas para racionalizar el uso de energía eléctrica y carburantes. Ya en Nicaragua el gobierno de Bolaños (presidente Enrique Bolaños) no ha tomado medidas para debelar la crisis.
"Un semanario humorístico decía: llevamos 50 años de atraso en el desarrollo y la medida que toma el gobierno es adelantarnos una hora, refiriéndose al hecho de
que la única medida tomada por el gobierno fue adelantar en una hora la hora oficial", cuenta Zúñiga. Según el educador, desde el año 90, cuando el gobierno Chamorro (presidenta Violeta Chamorro) canceló la siembra de diferentes plantas como la higuera, con capacidad de producir biodiesel, que habría iniciado el gobierno sandinista, todos los gobiernos que se han sucedido, ya en tiempos de paz, no han hecho inversiones en el campo de la generación de energía eléctrica, ni para producción de combustibles alternativos a los derivados del petróleo.
Las protestas en Nicaragua empezaron el 19 de abril. La cuidad de Managua vive un clima de tensión y violencia callejera. Centenares de autobuses del servicio urbano, que hoy están en paro en protesta porque los estudiantes quemaran tres unidades también protagonizaron una ola de violencia. "Las cadenas televisivas transmitiendo los hechos de violencia, en los que fueron heridos varios estudiantes sólo fueron interrumpidas para dar la noticia de la elección del nuevo Papa", afirma Zúñiga.
Divididos en caravanas, los transportistas se dirigieron a varios recintos universitarios de la capital a agredir a los estudiantes. Los autobuses iban transportando centenares de pandilleros y algunos empleados de las empresas de autobuses del transporte urbano. Una vez en los recintos universitarios se dedicaron a provocar a los estudiantes, a gritar portando amenazantes tubos de metal y machetes, a tirar piedras contra las instalaciones universitarias, incluso a disparar morteros artesanales de alto poder. La universidad más agredida ha sido la UPOLI (Universidad Politécnica de Nicaragua).
El sacerdote jesuita de los Cristianos Nicaragüenses de los Pobres (CNP) Arnaldo Centeno informa a Adital que las personas llevan varios días sin buses. "La gente va a pié a sus trabajos o va amontonada en camiones de carga, o va en taxis ahora supercaros, o no va", cuenta. Para él, el nuevo alcalde autorizó alza de pasajes y su mismo Concejo Municipal no lo reconoció, los diputados se aumentan el salario a 3,445 dólares mensuales y no les preocupa el alza de pasajes. "El gobierno no quiere bajar el impuesto al combustible (el más caro de Centroamérica) y con el combustible todo sube y sube, menos los salarios, y sobre todo sube el hambre y la violencia".
Hechos