Europa
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"El Fenómeno Moldavo" o las virtudes de Voronin frente a Putin
Alexey Proskurin
Moldova es un pequeño país localizado entre Rumania y Ucrania con una
población de cerca de 5 millones de personas. Hasta hace no mucho tiempo su
industria básica se centraba en la manufactura de vinos y la agricultura. De
hecho, de entre los países post-soviéticos creados tras la disolución de la
URSS, Moldova es considerada uno de los más pobres.
El problema para esta pequeña nación se agrava dado el hecho de que no pocas
personas en la vecina Rumania consideran a Moldova como parte de su país y a los
moldavos como parte del pueblo rumano. Sin duda estos dos pueblos están
estrechamente relacionados, y pese a que sus lenguas son muy similares, la
historia de ambas naciones difiere fuertemente. Esta situación ha derivado en
una muy fuerte presión sobre Moldova. A principios de los años noventa, los
líderes moldavos de entonces encabezaron una "conexión" (anexión de hecho) a
Rumania que condujo a una guerra civil de 3 años de duración y que terminó con
la división del territorio. Moldova perdió como resultado una importante
provincia –Pridnestrovye- que era sin duda la más avanzada en términos
industriales y que fue ocupada por adelantado por rusos y ucranianos. Al día de
hoy, la disputa territorial no ha sido resuelta satisfactoriamente.
Más allá de estas crisis y a pesar de su modesto tamaño, Moldova tiene una
importancia que difícilmente podría ser subestimada desde el punto de vista
histórico-mundial.
El 24 de Febrero del 2001, bajo el liderazgo de V. Voronin en Kishinev (la
capital moldava) el Partido Comunista de la República de Moldova (PCRM) llegó al
poder. Recibió 71 de 101 lugares en el parlamento nacional (en Moldova el
presidente es electo por el parlamento). Este éxito comunista enterró y veló a
los reaccionarios de todos los colores. Los comunistas habían vuelto al poder
tras una larga estancia en la oposición.
La victoria del PRCM significa una fractura en muchos de los mitos creados por
los teóricos de la burguesía. El primero de ellos era de carácter
ideológico-político. Con un rugido imparable, y tras enterrar la reputación
científica del 99% de los sociólogos, politólogos y economistas salidos de las
cloacas académicas en nombre del capital, el mito seudo científico de que el
socialismo nunca tuvo –ni tiene- futuro político ha muerto. Este hecho provocó
un impacto terrible entre aquellos que hicieron gestos ostentosos de hipócrita
indefensión del tipo "no resta nada por hacer, el socialismo se deshizo de sí
mismo".
El éxito no es menor. Voronin en la pequeña Moldova tuvo éxito en el mismo
periodo de transición en el que Gorbachov fracasó en la inmensa y todo poderosa
URSS diez años antes. Tras lo ocurrido ahora eventualmente es posible bosquejar
algunas conclusiones teóricas importantes, por ejemplo que "la sacudida" a la
URSS era tal vez objetivamente necesaria e inevitable puede ser cierto, pero
también es cierto que el quebranto y el desorden que ha ocasionado tienen su
origen en diversos factores extremadamente subjetivos.
Tras la victoria del PCRM la burguesía rusa permaneció en estado de shock por
algún tiempo ("¿cómo fue que ocurrió?"). ¿Cómo es que pudieron –y se atrevieron-
a ganar los comunistas en un país tan pequeño y pobre? Y más aún: ¿cómo pudieron
–y se atrevieron- a ganar en un país con tal historia étnica y política? (Como
se mencionó líneas arriba, Moldova fue anexionada por Rusia en el siglo XVII,
fue parte de Rumania entre 1918-1940 y tras los famosos arreglos entre Hitler y
Stalin, fue anexionada a la URSS a mediados del siglo XX). La victoria del PCRM
derrumbó otra "canción favorita" de los Luchadores Occidentales de la
Información, aquella que rezaba que "cualquier éxito socialista en el globo
podía ocurrir sólo como consecuencia de los esfuerzos imperiales rusos".
Así pues, la mega-máquina de información burguesa ha tomado la decisión secreta
de acelerarse a máximo. De aquí que hoy sea casi imposible encontrar información
sobre la restauración de la izquierda moldova en la prensa rusa. Es posible
decir lo mismo acerca del resto de la prensa occidental –sencillamente no existe
ningún "fenómeno moldavo" en ella.
En aras de la justicia es importante hacer notar que "la venganza moldova" ha
provocado confusión conceptual en el flanco izquierdo, porque el anacronismo de
muchos estereotipos se hizo mucho más evidente. La victoria de Voronin provocó
no pocos inconvenientes sicológicos en muchos líderes de los partidos comunistas
rusos y ucranianos en tanto puso en evidencia sus propias debilidades, perezas e
incompetencias personales amén de su ineficiencia demostrada.
El fenómeno moldavo exigía -y exige- todavía una respuesta. ¿Existe la
efectividad comunista en el campo económico? ¿Serán capaces de resolver los
problemas sociales? ¿Seguirán las normas democráticas? Estas son las pequeñas
minucias que rodean la situación y que Moldova buscará resolver, demostrar y
validar a la primera oportunidad.
¿Cuáles son los resultados conseguidos hasta el momento por el PCRM? En nuestra
opinión los éxitos del PCRM son indudables, el Partido Comunista Moldavo es
bastante competitivo en el mercado de ratings políticos, y su experiencia podría
servir como buen material de propaganda para la oposición rusa de izquierda.
He aquí algunas figuras que reportó el Secretario General del Partido Comunista
de la República de Moldova -el presidente de Moldova, Voronin- en el pleno del V
Congreso del PCRM: "Comparación: para 2001 el país tuvo un presupuesto de 4.3
mil millones de leys (1 dólar = 12 leys). Tras cuatro años, el Estado consiguió
consolidar un presupuesto para el 2005 de alrededor de 9.3 mil millones de leys…"
…El factor de este incremento generalizado demuestra ser correcto en
prácticamente todos los parámetros de nuestra administración. Desde 2001 el PIB
del país se ha incrementado al doble. La industria de la república ha revivido
con dinamismo. Si en 2000 tuvimos 1,750 empresas industriales, ahora tenemos
cerca de 2,500. Este crecimiento cuantitativo nos ha posibilitado la creación de
100,000 nuevos puestos de trabajo…
…Desde 2000 el número de pobres de entre la población ha disminuido de 55.3% a
35.3%...
…El factor indudable del fortalecimiento de la estabilidad social ha sido el
incremento sostenido de los salarios. Debo recordar, que por los resultados del
2000 el sueldo promedio en la economía de Moldova era de tan solo 408 leys (33
dólares). Hoy en día este parámetro alcanza cerca de los 1,300 leys (cerca de
100 dólares)…
…Hemos emprendido una reforma en los servicios de salud pública. Fuimos los
primeros en introducir en todo el espacio postsoviético un modelo efectivo de
desarrollo de los servicios de salud pública –seguros médicos, que cubren todos
las capas sociales vulnerables de la población (pensionados, niños, inválidos y
desempleados entre otros). Así mismo se han restaurado hospitales regionales y
cerca de 50 centros médicos especializados.
…También están disponibles los primeros resultados de la reanimación de una rama
vital de la población. Se registra un decremento sensible en las enfermedades en
una gran variedad de las afecciones más peligrosas. Debido a esto por primera
vez en los últimos 15 años se ha detenido el crecimiento constante del
porcentaje de muertes anuales. Y esperamos tener una tasa de crecimiento
poblacional positiva en el año 2004. [Por cierto –en prácticamente todos los
países de la esfera ex soviética la tasa de mortandad ha superado a la de
natalidad convirtiéndose de este modo en un verdadero problema para nuestros
países].
…Nos las hemos arreglado para detener la degradación en el sistema educativo,
para comenzar su recuperación y desarrollo sobre la base de estándares y
requerimientos modernos. Las asignaciones presupuestales anuales para la
educación han crecido desde el 2000 en casi el doble. Los profesores han dejado
de abandonar los centros escolares ya que su salario se ha incrementado en los
últimos cuatro años a casi el doble. El número de concesiones presupuestales en
las preparatorias ha crecido de forma consistente…
…Resueltamente hemos rehusado un principio residual en el financiamiento de la
ciencia que habían venido practicando las autoridades pasadas y que había
destruido la rama y privado a nuestros científicos de todo futuro. En el
presente año se han gastado 71 millones de leys en propósitos científicos contra
27 millones en el año 2000. El próximo año se ha estipulado un gasto de 97
millones. Sin embargo, el financiamiento, aunque importante, no lo es todo.
Colocar a la ciencia en un lugar preponderante en un proceso profundo y a gran
escala de modernización del país es también fundamental. Aspiramos a convertir a
la ciencia en el riel de la modernidad y la competitividad.
…El primer paso en este sentido fue la aceptación por parte del parlamento del
Código sobre ciencia e innovación. La consecución de estas posiciones constituyó
una verdadera revolución en la administración científica, y abrió y colocará al
servicio del país, un poderoso -aunque escasamente reconocido- recurso
intelectual, el cual, gracias a dios, nuestros predecesores no consiguieron
destruir (Diciembre, 2004)".
Como podemos ver, 2003-2004 ofreció respuestas a muchas preguntas. Comparemos
por mera curiosidad los parámetros económicos de la rica, inmensa y muy
capitalista Rusia, frente al pequeño pero socialista vecino, carente de recursos
naturales y que vive a su lado en peligro permanente de anexión.
En 2004 el PNB de Rusia creció al 6.8%, en Moldova lo hizo al 7.0%. La
producción industrial en Rusia –que es un país rico en petróleo- en 2003 se
incrementó en un 7%, mientras que en la Moldova –que es un país "rico en nada"-
lo hizo en un 13%.
En los últimos 3 años Moldova ha ganado avasalladoramente el primer lugar en
cuanto a tasas de crecimiento al interior de la Comunidad de Estados
Independientes (CEI). En ningún otro país las autoridades no-comunistas habrían
podido alcanzar un resultado de esta naturaleza en tan solo 4 años. Durante 10
años las administraciones precapitalistas sirvieron solo para callar y
celebrar... Pero, pero, pero.
Los comunistas en Moldova tras el triunfo de Voronin tampoco han violentado los
derechos humanos en lo más mínimo. Decenas de partidos políticos y movimientos
operan en el país, la crítica al partido comunista en el poder se ejerce de
forma libre. Una parte significativa de los medios masivos de comunicación en
Moldova tiene una línea de franca oposición, y operan sin obstáculos. Incluso S.
Urekian, un convencido anticomunista fue elegido como Alcalde de Kishinev en las
últimas elecciones municipales.
Y esto significa, que uno más –probablemente el más importante- de los mitos de
la propaganda burguesa ha fracasado. Aquél que decía que: "un retorno comunista
inevitablemente significaría, primero, revancha, y segundo, ausencia de
democracia". El PCRM, al final, terminó por desarticular también este mito en su
totalidad.
Sí, el PCRM se ha visto obligado a ordenar los bloqueos formados tras 10 años de
gobierno "frontista" (el partido que gobernó Moldova entre 1991 y 2001) y de sus
pseudo demócratas de todos colores. Es verdad. Sí, también es verdad que el PCRM
ha fallado en la tarea de implementar en la sociedad un modelo administrativo
realmente socialista. Y aún más. Existes algunas pistas que, en nuestra opinión,
comienzan a preocupar en tanto parecen encaminar a la profundización de la
economía de mercado. Sí, esto último es verdad también.
Pero una vez más, lo principal es indiscutible. El PCRM como el primer partido
comunista en el espacio postsocialista ha desarrollado una transición evolutiva.
Y debido a ella, ahora es claro que el PCUS pudo haber hecho lo mismo entre 1987
y 1991. El éxito de Voronin estriba en que consiguió crear un partido que
concilió las ideas de justicia social y libertad política como se entienden en
términos occidentales. Ahora vemos que tal variante del progreso social es
posible ahora que los partidos burgueses y comunistas se desplazan y sustituyen
entre sí en la competencia parlamentaria. En este sentido Moldova supera
políticamente a China, donde el Partido Comunista Chino todavía tiene el lugar
preponderante, mientras que en el plano económico ambos países han seleccionado
caminos prácticamente idénticos de desarrollo utilizando algún grado de economía
de mercado.
Sin duda sería muy deseable que el PCRM consiga una victoria convincente en las
elecciones que tendrán lugar en 2005 para que de esta forma continúe la reforma
de Moldova en el camino de la asociación de ideas entre socialismo y libertad.