Latinoamérica
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17 de mayo del 2004
Entrevista a Osvaldo Chato Peredo, líder del Movimiento Al Socialismo de Bolivia
"El gobierno de Bush necesita impedir la integración de los pueblos latinoamericanos"
Sabatino Annecchiarico
Resumen Latinoamericano
El embajador de los EEUU en Bolivia, Mr. Greenlee, conocido por su
actuación en la época de los "Cuerpos de Paz" hacia fines de los años '60 cuando
se castraban por la fuerza a mujeres indígenas en el país o se las esterilizaban
sin que ellas lo supieran, es el nuevo procónsul de la Casa Blanca en La Paz. Es
un personaje que cínicamente se permite citar a los jefes de los partidos
políticos bolivianos (amigos) con claras intenciones de crear las condiciones
para una desestabilización en el país. ¿Cuál es la necesidad de crear este caos
en Bolivia hoy?
El gobierno de Bush necesita impedir la integración de los pueblos de
América y para eso no vacilará en fabricar golpes de estado, situaciones de
emergencias y todos los acosos que pueda hacer a gobiernos como el de Venezuela,
de Brasil, de Argentina e incluso al gobierno de Carlos Mesa en Bolivia. En este
afán, la derecha y sus partidos e instituciones quieren romper la continuidad de
una democracia que, aunque sea insuficiente y formal, sirve de transición hacia
la consolidación del poder ciudadano y sus instituciones. Por eso ellos no
quieren preservar el hilo democrático y por eso el pueblo se manifiesta para
impedir las aventuras golpistas y desestabilizadoras.
Es posible que la Fuerzas Armadas de Bolivia realicen un golpe de estado
en las actuales condiciones?
Esta semana pasada, entre el martes 4 de mayo y el miércoles 5, se presentaron
unos generales con traje de campaña ante el Presidente Carlos Mesa para
reclamarle por la decisión del Tribunal Constitucional, que resolvió hacer
intervenir la justicia ordinaria en el caso de los militares responsables por la
masacre de febrero del 2003, donde hubo 30 muertos y más de 100 heridos. Al día
siguiente, el Alto Mando, lanzó un comunicado por la prensa en el que llama a
revisar la decisión del Tribunal Constitucional. Esta actitud es una directa
amenaza de golpe de estado por parte de la cúpula del Ejército. Otros cuerpos de
las Fuerzas Armadas y mandos en todos los niveles de las mismas, no estan
dispuestas ya a soportar el manoseo y la humillación del Pentágono ni de la Casa
Blanca.
Y si de todas maneras esto sucediera, cómo cree que responderá el pueblo
boliviano?
Los sucesos de febrero y de octubre del año pasado son una clara demostración de
la decisión del pueblo para defender sus recursos naturales, sus derechos y su
dignidad. Pero además son experiencias que enriquecen los métodos de resistencia
y de ofensiva. La respuesta será más contundente.
El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana, COB, Jaime
Solares, ha declarado recientemente que Evo Morales es "neoliberal" y "oficialista",
qué opinión tiene usted de esta declaración?
La COB, ha repuntado como institución popular gracias a las movilizaciones de
los sectores agrarios, indígenas y marginados de las ciudades, lo que nos llena
de satisfacción. Pero no es al revés. Quizás el dirigente Solares se haya
entusiasmado con este repunte, lo que le impide ver el plan neoliberal del
imperialismo que, entre otras cosas, necesita de la división del campo popular.
Esperamos que Solares, Felipe Quispe, máximo dirigente del Movimiento
Indigenista Pachacutic, De la Cruz, Dirigente de la Central Obrera de El Alto,
cierren filas con los movimientos sociales para impedir el intento de
desestabilización de la democracia no solo en Bolivia sino en el Continente.
El Movimiento Al Socialismo, MAS, se oponía a la venta del gas en
condiciones netamente favorables a la transnacionales, dueñas del gas. ¿Cuál es
la posición del MAS con respecto a la venta del Gas a la Argentina?
El gobierno de Kirchner ha puesto un freno sustancial a las recetas del Fondo
Monetario Internacional, FMI, con respecto al pago de la deuda externa. Está en
el interés del imperialismo norteamericano hacer fracasar al gobierno argentino.
La escasez de gas en la Argentina, afectaría directamente a sectores populares
que dieron lecciones extraordinarias en la lucha contra el neoliberalismo y el
rechazo a los gobiernos genuflexos. Esta consideración y nuestro espíritu de
integración con los pueblos de América Latina y el Caribe, ha sido fundamental
para considerar una excepción con tiempo limitado para la venta del gas y
tambien para presionar al gobierno de Carlos Mesa y a los partidos del sistema a
aprobar en el Parlamento la nueva ley de hidrocarburos que devolvería la
propiedad de estos recursos a los bolivianos.