Latinoamérica
|
Bolivia: la COB alista la gran marcha sobre la Paz
Econoticiasbolivia.com
En un nuevo hito de la rebelión de los pobres, la Central Obrera Boliviana (COB)
instó hoy a sus afiliados a marchar sobre la ciudad de La Paz, la sede de
gobierno, para reconquistar la propiedad sobre el gas y el petróleo y lograr el
derecho al pan, al trabajo y la dignidad. Vienen de todas partes.
"Es la marcha por la vida, es la marcha por Bolivia", dijo el líder de la COB,
Jaime Solares al convocar a "la Marcha por la recuperación de los Hidrocarburos,
la Dignidad y Soberanía Nacional", que partirá este jueves desde la localidad
altiplánica de Patacamaya, a casi 100 kilómetros de la ciudad de La Paz.
La caminata será protagonizada por todos los sectores laborales y sociales que
luchan por acabar con el neoliberalismo y por la nacionalización del gas y el
petróleo. "Serán miles de trabajadores, hombres y mujeres, jóvenes y viejos, los
que vendrán a La Paz", aseguró Solares.
Diversos reportes ya dan cuenta que los sindicatos y organizaciones populares
han comenzado a enviar a Patacamaya, el lugar de concentración, a sus
destacamentos de obreros, maestros, campesinos, estudiantes, jubilados y
desempleados, entre otros.
VIENEN DE TODAS PARTES
Los marchistas vienen de todas partes. Desde el extremo norte del país, en
Trinidad, la capital del departamento oriental del Beni, en la frontera con
Brasil, se informó que una delegación de maestros urbanos, de profesores
rurales, de camineros y salubristas ya se puso en camino. Lo mismo que otro
destacamento de maestros y campesinos que vienen desde Tarija, en el extremo sur
del país, en la frontera con la Argentina.
Otros marchistas vienen de las minas. Los informes dicen que en el distrito
minero de Siglo XX, asambleas de maestros rurales, de campesinos y mineros han
instruido la caminata hacia La Paz. En asamblea, los maestros rurales del norte
de Potosí han elegido a 70 comisionados que irán a la sede de gobierno para
exigir la inmediata atención a las demandas de la COB y del sector.
De Cochabamba, en el centro del país, otra delegación de la Central Obrera
Departamental (COD) ya trepa hacia el Altiplano con la misma consigna que anima
a los trabajadores de Santa Cruz, a los maestros y campesinos de Chuquisaca.
Incluso los trabajadores y maestros de El Alto, ciudad ubicada a 12 kilómetros
de La Paz, se alistan a partir hacia Patacamaya, para de ahí volver marchando
hacia La Paz.
MÁS PRESIÓN SOBRE MESA
Con el empuje de los marchistas, la COB confía en redoblar la creciente presión
que ejerce sobre el endeble e improvisado gobierno del neoliberal Carlos Mesa,
que afronta una oleada de manifestaciones callejeras, la paralización de labores
en los sectores de Educación, Salud y Caminos, además de huelgas de hambre en
las ciudades y amagos de bloqueos en algunas de las carreteras del altiplano y
los valles.
Con la movilización de masas, la COB pretende también arrinconar a los grupos
militares que pretenderían consumar un golpe de Estado, para evitar su
juzgamiento en los tribunales civiles por los crímenes cometidos durante las
masacres de febrero y octubre del 2003.
"Con la movilización, con la huelga general y el bloqueo de caminos podremos
derrotar al neoliberalismo, a las transnacionales y al golpismo", aseguró
Solares, que nuevamente enfrenta una arremetida de los sindicalistas del
gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) del diputado cocalero Evo Morales,
convertido ya en el mejor aliado del Presidente Mesa.
EL MEJOR ALIADO DE MESA
En la víspera, una reunión de emergencia de la Federación de Mineros, que había
sido convocada para analizar la situación de las tres minas ocupadas la semana
pasada por los cooperativistas, fue aprovechada por los dirigentes del MAS para
exigir la salida de Solares de la COB, al que creen culpable del enfrentamiento
con el gobierno.
Los dirigentes del MAS acusaron a Solares de haber promovido la consigna de
ocupar las minas de propiedad del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada,
planteamiento que ha comenzado a ser ejecutado por los cooperativistas mineros,
que son ex trabajadores de la extinta Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL),
pero no así por los propios trabajadores asalariados y sindicalizados, que han
sido despojados de su fuente de trabajo.
Sin embargo, la exigencia de los sindicalistas del MAS fue rechazada por otros
dirigentes de la Federación de Mineros, aunque la última palabra sobre este tema
está en manos de un próximo ampliado de la COB, donde posiblemente aflorarán
otra vez la disputa entre los que se oponen al gobierno neoliberal de Mesa y
quienes lo respaldan.
Hasta ahora, los "masistas", que controlan varios sindicatos, federaciones y
centrales obreras departamentales, como la de El Alto, han boicoteado la lucha
de la COB y han impedido que las bases organizadas participen de las
movilizaciones y la huelga. Los partidarios de Morales quieren que los
sindicatos y movimientos sociales suspendan las protestas y canalicen su
malestar a través de la vía electoral para llevar al cocalero a la silla
presidencial el 2007.
Esta conducta, sin embargo, es cada vez más cuestionada por los sindicalistas
revolucionarios y sectores radicalizados, los que han comenzado a rebasar a las
direcciones conciliadoras.
LA LUCHA INDÍGENA
En la lucha por la nacionalización del gas también cobran importancia las
acciones que emprenden los indígenas y campesinos del oriente del país. Este
domingo, un ampliado celebrado en la localidad de Santa Rosa del Sara que contó
con la participación de más de 70 organizaciones campesinas, determinó dar plazo
hasta el miércoles para que el gobierno atienda las demandas del Bloque Oriente.
De no ser así, el ampliado determinó ocupar físicamente los pozos petroleros del
norte de Santa Cruz, hacia donde se dirigen marchando a pie casi medio millar de
indígenas.
Los marchistas no han logrado que el gobierno atienda favorablemente sus
peticiones.