Tres mil manifestantes cortan la principal carretera de Bolivia y otros mil inician una caminata de más de 110 kilómetros hacia La Paz, una ciudad asediada por varios miles que marchan y protestan mañana, tarde y noche. El bloque neoliberal también se rearticula

Econoticiasbolivia.com

Con el corte de la principal carretera del país y más de mil sindicalistas marchando hacia La Paz, la Central Obrera Boliviana (COB) dio este jueves un nuevo paso en su lucha contra el neoliberalismo y las transnacionales petroleras. El asedio sobre el improvisado y débil gobierno de Carlos Mesa es intenso y creciente, al igual que las masivas manifestaciones de protesta que se realizan mañana, tarde y noche en la capital política de Bolivia.

La rebelión de los pobres está en marcha, aunque con grandes problemas organizativos y fuertes señales de divisionismo en los sectores laborales controlados por dirigentes oficialistas, que sin embargo van siendo paulatinamente rebasados por la radicalidad de sus bases.

Hasta ahora, los sectores que vanguardizan la lucha laboral son los maestros urbanos y rurales, los trabajadores en Salud y los camineros, que han hecho un pacto intersectorial en apoyo a las demandas de la COB y en rechazo a la pretensión gubernamental por descentralizar y privatizar esos servicios.

La participación de otros sectores como campesinos, mineros y fabriles aún es mínima, aunque se espera que en el curso de la próxima semana se incorporen masivamente a la lucha, como lo harán los afiliados de la Central Obrera Regional (COR) de El Alto, uno de los bastiones de la rebelión popular de octubre y que por decisión de sus dirigentes oficialistas se había rehusado hasta ahora a combatir al gobierno de Mesa, que se asemeja cada vez más al de su predecesor, el derrocado Gonzalo Sánchez de Lozada.

Hoy, por ejemplo, y con el aplauso de la Embajada de Estados Unidos, el gobierno de Mesa defendió el derecho del Senado de la República de dar carta blanca e inmunidad a las tropas norteamericanas y a los militares bolivianos que intervengan en los conflictos internos del país.

El Congreso también decidió suspender sin fecha la decisión de iniciar o no un juicio de responsabilidades contra Sánchez de Lozada, en una actitud que pareció confirmar la rearticulación del bloque neoliberal entre el Congreso, la Embajada de Estados Unidos, el Poder Ejecutivo y los militares. Toda una frustración para el líder cocalero y jefe del Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales, que se había jugado a fondo para boicotear la movilización popular en su propósito de defender a Mesa y las elecciones del 2007.

"¿Qué está buscando Carlos Mesa? ¿Qué quiere?", dijo descolocado Morales al denunciar que el Presidente era víctima de un chantaje de parte de las Fuerzas Armadas.

Otros que se sienten desengañados, aunque por otros motivos, son los empresarios privados que exigieron al gobierno que actué con más decisión y sin tanta debilidad para frenar la ocupación de minas y tierras. "Estas acciones están ahuyentando a los inversionistas que no encuentran seguridad jurídica", dijo el presidente de los empresarios, Roberto Mustafá, quien pidió poner a raya las manifestaciones y marchas de protesta, que parecen multiplicarse especialmente en La Paz.

LA MARCHA POR EL GAS Y LA VIDA

Y es que la movilización popular está en alza. "Esta avanzando la lucha por recuperar la dignidad de la patria y el gas para los bolivianos", dijo el líder de la COB, Jaime Solares que encabeza la caminata que harán por 110 kilómetros los trabajadores que se concentraron esta mañana en la altiplánica localidad de Patacamaya.

La mayoría de los más de mil marchistas son maestros rurales y urbanos, gremiales, desocupados, estudiantes normalistas, fabriles, salubristas y camineros, que vienen de todos los rincones del país. Están también contingentes de las Centrales Obreras de Cochabamba, Oruro y de El Alto.

Según los organizadores de la protesta, en los próximos días y a medida que la marcha se acerque a La Paz, se sumarían otros contingentes de campesinos, universitarios, rentistas, colonizadores y mineros. Se prevé que sean por lo menos cinco mil marchistas los que arriben el próximo lunes a la sede de gobierno.

Los últimos en arribar a Patacamaya fueron 160 maestros rurales que llegaron de Potosí. Otros habían sido demorados por el bloqueo de la carretera troncal que une La Paz con los distritos de Oruro y Cochabamba.

UN BLOQUEO DE TRES MIL

Según los reportes llegados desde el punto del bloqueo, en Caracollo, en pleno altiplano, eran más de tres mil maestros rurales, camineros, salubristas, campesinos y normalistas los que habían cortado la principal carretera de Bolivia.

Ellos, desde la madrugada, habían tejido una alfombra de piedras de más de un kilómetro y medio, deteniendo varias decenas de buses y camiones de alto tonelaje.

La intensidad del bloqueo obligó a las autoridades a suspender el transporte carretero interdepartamental y los viajes hacia Cochabamba y Oruro.

Otros cortes menores se habían producido en la carretera Oruro - Pisiga y en otros puntos del Altiplano, aunque en las otras rutas que unen La Paz con poblaciones fronterizas de Perú y los Yungas no se habían reportado otros bloqueos, a pesar de que los dirigentes campesinos, leales al "Mallku" Felipe Quispe, anunciaron que éstos no tardarían en producirse.

EN LA PAZ SE MARCHA MAÑANA, TARDE Y NOCHE

Los que sí no se dan tregua son los salubristas y maestros urbanos y rurales, que se han declarado en huelga general indefinida y marchan mañana, tarde y noche por el centro de la ciudad de La Paz.

Este jueves, por ejemplo, miles de maestros rurales marcharon desde El Alto hasta La Paz, con las banderas de la COB y en repudio al Congreso Nacional.

Los urbanos hicieron lo propio paralizando por varias horas el centro citadino, donde es perceptible una creciente inquietud ante el anuncio de nuevas movilizaciones. En La Paz también están la mayor parte de los casi 600 trabajadores en salud en huelga de hambre.

Para la siguiente semana están programadas la llegada de los marchistas que vienen desde Patacamaya y el inicio de las manifestaciones de miles de alteños.

OTRAS MOVILIZACIONES

Otros sectores que se movilizan son los indígenas del Bloque Oriente que marchan hacia la ciudad de Santa Cruz, el Movimiento de los Sin Tierra (MST) que ha ocupado esta semana dos haciendas y los comunarios de San Alberto que bloquean el ingreso a los pozos petroleros de Petrobras en el sur del país.

Otros que iniciarán bloqueos desde el 24 de mayo son los colonizadores y los cooperativistas mineros.