Persiste rechazo a incluir ALCA y Cuba en la cumbre de Monterrey

Los gobiernos acuerdan más cooperación en seguridad y mayor apertura comercial
La declaración final quedó prácticamente concluida en las primeras horas de este domingo
Se acepta la necesidad de erogar más recursos para impulsar el desarrollo y combatir la miseria

David Carrizales, Roberto González Amador y Rosa Elvira Vargas
11/01/04

Monterrey, NL, 10 de enero. Los gobiernos de 33 países del continente acordaron impulsar acciones para combatir la pobreza, reforzar la cooperación en seguridad e imprimir mayor impulso a la liberalización comercial, pero dejaron para la última fase de la negociación -que seguía en las primeras horas del domingo- cualquier alusión política a Cuba y al tema del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).

La declaración final de la Cumbre Extraordinaria de las Américas, que se realizará el lunes y martes próximos con la asistencia de 33 de los 34 países integrantes de la Organización de Estados Americanos (OEA) -Cuba está fuera de este mecanismo- quedó prácticamente concluida en las primeras horas de ayer.

En ella se plantea el compromiso de los países del continente de profundizar en la lucha contra la corrupción, aunque los negociadores no habían resuelto a puntos específicos, como los relacionados con las entidades encargadas de monitorear el combate a esta práctica o las sanciones para las naciones que no logren avances. Lo que sí se confirmó fue que del texto final se retiró el amago de que los países pudieran ser expulsados de la OEA si se juzgaba que no avanzaban en la lucha contra la corrupción.

A esta cumbre extraordinaria fueron convocados los 34 países integrantes de la OEA, es decir, todos los del continente excepto Cuba. Hasta anoche estaba confirmada la presencia de 33, puesto que el gobierno de Dominica notificó que no enviará representantes. En las semanas previas a la reunión surgieron tensiones entre varios de los países de la zona. Brasil se opuso terminantemente a incluir en la declaración final cualquier alusión a la negociación del ALCA, como buscaba Estados Unidos. Por su parte, Washington lanzó críticas a los gobiernos de Argentina y Venezuela por sus acercamientos políticos con el gobierno cubano. Y, como cereza, la Casa Blanca entró en conflicto con Brasilia por la decisión del gobierno del presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva de someter a revisión a los viajeros estadunidenses que llegan a los aeropuertos brasileños.

Irene Klinger, secretaria ejecutiva de la Secretaría de Cumbres, entidad que organiza este tipo de reuniones, confirmó este sábado que el tema de Cuba había quedado finalmente fuera de la negociación. La discusión había generado expectativa, luego de que el año pasado Washington citó a La Habana en su discurso relacionado con lo que la Casa Blanca ha llamado "guerra contra el terrorismo".

Lucha contra la corrupción

"El tema de Cuba no está en este proceso (de la cumbre); no ha habido mención ni tampoco lo han llevado a la mesa los representantes de Argentina o Venezuela", dijo Klinger a la prensa.

La funcionaria confirmó que la posibilidad de incluir una alusión directa a la negociación del ALCA, tema que mantiene enfrentados a Brasil y a Estados Unidos, se había dejado para la ultima etapa de la negociación, aunque otras fuentes que participan en el proceso descontaron que fuera incluido de forma explícita.

Klinger informó que la declaración final contendrá unos 60 párrafos. Confirmó que habrá énfasis en la lucha contra la corrupción, pero también con alusiones concretas al combate de la pobreza, la ampliación en el uso de medicamentos antirretrovirales -para combatir la epidemia del sida- a bajo costo.

Otros temas en los que el acuerdo está dado son los relacionados con identificar fuentes seguras de financiamiento para el desarrollo de los países menos avanzados del continente.

También hace una alusión directa al combate de la pobreza y plantea la necesidad de articular esfuerzos internacionales para movilizar recursos que permitan impulsar un mayor desarrollo y combatir la miseria y el hambre en todos los países del continente