Por: Apolinar Díaz-Callejas
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En mis libros Del Agua y el Hombre, editado por el Senado de la República en 1976, Sobre la Mojana, que edité en 1978 y Naturaleza de la Obra de Recuperación del río Magdalena, publicado por la Cámara Junior de Colombia en 1983, está la descripción, tiempo, lugar, instituciones y personas que participamos en los planes para cerrar la Boca el Cura y acabar con las inundaciones y los sabotajes de terratenientes y politiqueros.
Me reuní en Plato, Magdalena, con el presidente Carlos Lleras Restrepo, quien nos apoyó y envió una comisión que elaborara el programa de obras.

La C.V.M. había comenzado desde 1965 un plan para suministro de agua potable, cierre de la Boca del Cura, construcción de los diques Mojana - Guaranda y Mojana - Achí desde la Boca del Cura, y construcción de la carretera Achí-Majagual, como informó de Mario D´Amato Bassi, Jefe de Departamento de Ingeniería en enero 16 de 1968.
El 8 de febrero de 1968 se instaló en mi Despacho en Sincelejo la Comisión Especial integrada por el presidente Lleras Restrepo, compuesta por Apolinar Diaz Callejas, Gobernador; Fernando Ruan Ruan, Ministerio de Agricultura; Jean Bottagisio, Técnico asesor del Ministerio de Obras Públicas; Carlos Alberto López, del INCORA; Augusto Ramírez Moreno, del Instituto de Fomento Municipal; Luis Hernán Cortes, del Departamento Administrativo de Planeación y Mario D´Amato. El 9 y 10 de febrero viajamos a la Mojana y vistamos la Boca del Cura, Achí, Majagual, Guaranda y Sucre e inspeccionamos los trabajos para los acueductos de Majagual y Sucre construidos, por mi gestión, por el Instituto de Fomento Municipal, dirigido por el ingeniero Julio Burbano Diago. Volvimos a Sincelejo y nos reunimos para definir las recomendaciones, que resumo así: construir paso de agua del Río Cauca al caño de la Mojana diferente al de la Boca del Cura; construir diques paralelos en la margen izquierda del Cauca; tapar del todo la Boca del Cura; promover cooperativas agrícolas y pesqueras; acelerar la carretera Majagual- San Marcos; estudiar la carretera Sucre- Sincé; estudiar la tenencia de las tierras beneficiarias, etc.. La obras debían ejecutarse antes de junio de 1968. Viajé a Majagual en helicóptero, con 25 policías, a informar de las decisiones. Cientos de campesinos me esperaban. En el Concejo Municipal notifiqué el cierre definitivo de la Boca y la realización de las obras complementarias. Fue lo que se hizo bajo mi gobierno. De esas obras vivió la Mojana hasta hoy cuando, 35 años después, por abandono y corrupción política no se hizo cosa distinta de un despilfarro impresionante de dineros nacionales e internacionales. Dicen que la sola cuenta de viáticos es escalofriante. El pueblo sucreño debería exigir que se rindan esas cuentas. La Misión Colombo-Holandesa que elaboró el Plan de Regulación Fluvial y Defensa contra las Inundaciones en la Cuenca Magdalena-Cauca comenzó sus trabajos en 1972 y los entregó en marzo de 1976. Son 18 volúmenes. No se referían a lo que se había hecho antes en la Mojana. Sus planes eran hacia el futuro: controlar las inundaciones, regular las aguas, establecer sistemas de riego. El primer programa de control de inundaciones y de riego debía ejecutarse en la Mojana. Es por lo que he luchado durante tantos años. El porvenir y la competitividad agrícola de Colombia dependen de esas obras y de una radical reforma agraria que democratice la propiedad de la tierra.

* Apolinar Díaz-Callejas es ex Senador de la República de Colombia, ex Ministro del Gabinete del Presidente Carlos Lleras Restrepo y Miembro actual de la Comisión Andina de Juristas.