Jaime Zalazar F.
Rebelión

La política prevalece en lo sucesivo sobre la historia
Walter Benjamin

Con el anuncio presidencial de convocar para el año próximo la Asamblea Constituyente, se ha abierto en el país un escenario favorable a la. estrategia del miedo ¿Cuál es esta estrategia? Es esa que propala la imagen de Bolivia "sumida en la demencia colectiva bajo liderazgos tenebrosos, apenas disimulados por la apariencia de un débil y casi inexistente gobierno." Quienes monopolizaron el poder político y económico para sus propósitos captan perfectamente el poder del temor ante lo desconocido y lo usan, para ello se ha recurrido a grupos mediáticos norteamericanos y a sus "tanques pensantes".[i] Esta estrategia también se despliega a nivel nacional, basta reparar en los diversos medios de comunicación empeñados en mostrar al pueblo peligrosos fantasmas que asoman por el horizonte, uno de ellos, el fantasma de la "Asamblea Popular", si se persiste en exigir al gobierno el cumplimiento de sus compromisos.

Una muestra cabal de lo anterior es el artículo de Ricardo Paz Ballivian titulado "Las tentaciones y peligros del Poder Dual"[ii], que llamó nuestra atención por una razón adicional. Paz es el Coordinador para la Asamblea Constituyente, designado por el presidente de la República, quien recientemente en declaraciones a la prensa propone que la Asamblea que se desarrollará en Bolivia debe provocar una profunda reforma constitucional, a la vez, debe renovar el pacto social. Una forma sutil de expresar su profunda convicción reformista, en el peor sentido que esta palabra tiene actualmente, que es la de proponer cambios para que nada cambie.

En el mencionado artículo encuentra que la situación actual que vivimos tiene "similitudes escalofriantes de contenido" con lo que se vivió en el 70 bajo el gobierno de J.J. Torres. La principal, que Torres tenía al pueblo de su parte, pero no supo o no pudo administrar esa relación y cayó en la tentación del poder dual, esto habría llevado la nación "inexorablemente" al autoritarismo. Situación parecida, vive hoy Meza -nos dice Paz-, un presidente que intenta administrar las tensiones entre infinidad de demandas, movimientos sociales impacientes y radicales, renacimiento de "autonomistas", etc.

La inexorabilidad del autoritarismo si se cede a la tentación del poder dua , ayer en la Asamblea Popular, hoy en la Asamblea Constituyente, es una interpretación lineal , evolutiva de la historia. Si se hace esto... sucede esto. Eso pensaba por ejemplo John Stuart Mill, padre del positivismo científico en las ciencias sociales, que era posible descubrir las leyes del progreso a través de un estudio y un análisis de los hechos generales de la historia. Un autor contemporaneo, Daniel Bensaid[iii], piensa que estas leyes , enunciadas por Stuart Mill, Comte y otros, parecen una "colección de metáforas aplicadas inoportunamente". Esa es la impresión que nos deja el artículo mencionado, la de una metáfora inoportuna. Ricardo Paz es consciente del peligro de estas comparaciones, pero ello no le impide seguir adelante y decir lo que dice.

Lo que sigue en su razonamiento es una suerte de moraleja, antes que una derivación de un análisis político: "Podemos aprender de la historia... Pero para ello la condición primordial es que el Gobierno gobierne."

Lo que quiere advertir, por decirlo amablemente, queda claro, y su destinatario también: o el pueblo deja gobernar, que en buenas es decirle que deje de lado sus demandas, aquellas que nos llevaron a la sublevación de Octubre, o inexorablemente vendrá el escarmiento.

En casi lo único que estamos de acuerdo con Paz, es que efectivamente, Zabaleta describió y analizó magistralmente el poder dual y a la Asamblea Popular bajo el gobierno de J.J. Torres, pero Zabaleta describe los hechos y los interpreta de manera radicalmente diferente a las de nuestro articulista y no se necesitan grandes esfuerzos exegéticos o hermeneúticos. Para demostrar esta afirmación, basta leer atentamente un pequeño fragmento del prólogo a la primera edición por su propio autor: "Algunos arrepentidos bruscos se dieron a deducir de la atrocidad de la derrota que la Asamblea Popular no debió haber existido jamás, que el proletariado debió haberse concentrado en la defensa de Torres y no en la organización de su propio poder. Esto empero, como diría Cervantes, es una prevaricación del buen razonamiento." (Zabaleta Rene, El poder Dual, Pag. 26 , l977 Ed. Amigos del Libro).

Nos exime de mayores comentarios.

Si algo debe aprender el pueblo boliviano de su historia, como lo señala Zabaleta, es que la defensa de la Democracia no debe hacerle perder de vista la organización de su propio poder, un poder popular que en términos contemporáneos puede traducirse como mayores espacios de autonomía, pero también la defensa de esos espacios, si no queremos ser cómplices de los prevaricadores del buen razonamiento.

No se puede y no se debe ceder a la estrategia del miedo. Cada presente ofrece una pluralidad de desarrollos posibles, no existe en la historia la inexorabilidad, existe la política.

16 de Enero del 2004

Notas

[i] Roger Cortez, Semanario Pulso (Nov. 7 del 2003)

[ii] El Juguete Rabioso (Nov. 9 del 2003)

[iii] Bensaid Daniel, Marx Intempestivo, Ed. Herramienta -2003