Argentina: La lucha continúa
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Carta sobre el fallo antipiquetero
A la Excelentísima Cámara de Casación Penal; Dres. Guillermo Tragant y
Eduardo Riggi. Sres. Excelentísimos Jueces de la Nación Argentina.
Sres. Excelentísimos Jueces de la Nación Argentina:
Quien suscribe, ciudadano argentino, mayor de edad, en uso de la facultad
constitucional de peticionar ante las autoridades, se presenta con todo el
respeto que su magna investidura merece y dice:
Que, atento el reciente fallo por Uds. dictado en cuanto al carácter delictivo
de la "interrupción" del tránsito por parte de trabajadores ferroviarios, y
Considerando que dicho fallo sienta un precedente histórico en nuestro país,
solicito humildemente se evalúe la posibilidad de contar con sentencias
similares en algunos otros casos, a saber:
Que sea considerado delito la "interrupción" de la frecuencia de los servicios
ferroviarios en aquellas líneas cuya gestión fuera privatizada, en las que
la gente viaja como ganado, que continúan recibiendo subsidios que pagamos
todos, y sus responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" del servicio eléctrico cuando las
empresas privatizadas no garantizan el suministro por no haber invertido lo que
por contrato les correspondía (ni siquiera eso!!), y sus responsables castigados
con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" del orden constitucional, y sus
responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" del vínculo humano y familiar
entre las madres y padres detenidos-desaparecidos, secuestrados y asesinados con
sus hijos secuestrados y apropiados ilegalmente, y sus responsables castigados
con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" de la alimentación de los niños
Cuando sus padres no tienen un peso para llevar a sus familias, y sus
responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" del trabajo por parte de los
empresarios que despiden a sus empleados en busca de una mayor rentabilidad,
y sus responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" en la percepción de un salario
Digno por parte de los trabajadores que vieron recortados sus ingresos a través
de sucesivos planes de ajuste, y sus responsables castigados con todo el rigor
de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" de los tratamientos de los viejitos
que se mueren por no tener cómo acceder a un servicio médico y alimentario
adecuado, y sus responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" de la vida de aquellas mujeres que
mueren mientras son sometidas a abortos clandestinos por no contar con
información ni medios suficientes para decidir sobre su cuerpo y su salud, y sus
responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" de la historia y la cultura de
aquellas familias que son arrojadas de sus tierras por parte de grandes
terratenientes y sus cómplices que expanden sus fronteras agropecuarias a costa
de la destrucción del suelo y de la miseria de quienes viven de trabajar su
tierra, y sus responsables castigados con todo el rigor de la ley.
Que sea considerado delito la "interrupción" de las garantías constitucionales
acontecidas durante el 19 y 20 de 2001 derivadas de la aplicación del "Estado de
sitio" que costaron la vida a 40 personas, y sus responsables castigados con
todo el rigor de la ley.
En definitiva, sus excelentísimos magistrados, que sea considerado delito la
"interrupción" de la vida y la felicidad de millones de ciudadanos que ven
"interrumpido" su acceso a la salud, a la educación, a la seguridad alimentaria,
al trabajo digno, a la seguridad, a la justicia, a la cultura, por el sólo hecho
de vivir en un país en donde unos pocos deciden el destino de millones, donde
las ganancias del capital importan mucho más que la vida de las personas.
Que todas estas injusticias sean consideradas delito y sus responsables
castigados con todo el rigor de la Ley.
Proveer de conformidad
Será justicia
Sin otro particular, hago propicia la oportunidad para saludarlos con mi
Mayor consideración.
Sergio Adrián Perdoni
D.N.I. 17.082.130