12 de agosto del 2002
Grupos de víctimas del genocidio de Ruanda se niegan a cooperar con el Tribunal de la ONU
Umoya
AMDPress
Grupos de víctimas del genocidio de Ruanda se han negado a cooperar con el Tribunal de la ONU que juzga los hechos en Arusha (Tanzania) porque consideran que la Corte les "ridiculiza" y trata su sufrimiento "como una banalidad". Según los asociaciones IBUKA y AVEGA, también ha "ignorado" las necesidades de las víctimas y testigos de tener protección permanente.
El caso que ha propiciado la ruptura por parte de las víctimas tras numerosas quejas presentadas ha sido el de una mujer, identificada por razones de seguridad como "TA". Mientras era interrogada por el fiscal sobre cómo había sido violada por un ex comandante durante la limpieza étnica que costó en 1994 la vida a unos 800.000 ruandeses, se vio a tres de los jueces que presidían la sala riendo.
El presidente de IBUKA, Antoine Mugesera, aseguró que han presentado al Tribunal una serie de condiciones para reanudar la cooperación de las víctimas, entre ellas que se despida inmediatamente al personal de la Corte que esté implicado en actos de genocidio o tenga lazos familiares con sospechosos, como se informó hace unos meses que ocurría. Además quieren que se aumente la protección a los testigos.
Esta semana sí testificó en Arusha el ex primer ministro ruandés Faustin Twagiramungu, el más alto cargo del gobierno que lo ha hecho hasta la fecha. El ex mandatario afirmó que "no existía un plan" de limpieza étnica y que la matanza fue protagonizada por "gente sedienta de poder". El abogado de la defensa David Jacobs dijo que su intención es "presentar pruebas que presentarán una versión comprensible, diferente, y más humana de los que ocurrió en Ruanda".