Uruguay y EEUU inician negociación comercial con futuro incierto
Con dudas sobre si se alcanzará un acuerdo de libre comercio, con reclamos por la falta de una legislación adecuada en materia de protección de la propiedad intelectual y reconociendo la seguridad jurídica que ofrece Uruguay a los inversionistas, el 12 de abril se firma el acuerdo que establecerá las bases para una negociación comercial con Estados Unidos.
 
Estados Unidos cuestiona las leyes sobre la propiedad intelectual del software y la música.
Con una mayor expectativa de parte de Uruguay y una serie de reclamos de Estados Unidos, el viernes 12 de abril se dará el puntapié inicial en Montevideo a las negociaciones comerciales que, en principio, según voceros autorizados del país del norte, no apuntarían a un acuerdo de libre comercio como lo impulsa la administración del presidente Jorge Batlle.
El embajador de Uruguay ante Estados Unidos, Hugo Fernández Faingold, dijo a LA REPUBLICA que a ese encuentro de significación política y donde se establecerá la agenda de trabajo, seguirá una reunión, ya de carácter negociador, en Estados Unidos el 28 de abril, encabezada por técnicos de ambos países.
El viceministro de Agricultura de Estados Unidos, JB Penn, dijo el miércoles 27 de marzo a LA REPUBLICA que el capítulo referido al ingreso al mercado norteamericano de productos agrícolas no estará en la agenda bilateral.
Sin embargo, el embajador Fernández Faingold entiende que eso aún "no está definido", por lo que los negociadores de Uruguay buscarán que ese ítem ingrese en las conversaciones más allá de lo que se resuelva a nivel de la Organización Mundial de Comercio. El sector agropecuario de Estados Unidos trabaja con un subsidio estatal de U$S 94.000 millones planificado para los próximos 10 anos, al tiempo que el Congreso de este país analiza aprobar otro "apoyo económico" a ese sector por U$S 70.000 millones más, también para los próximos 10 años.
A la voluntad política de ambos gobiernos de entablar conversaciones comerciales, se suma a favor de Uruguay su seguridad jurídica a la hora de mantener las reglas de juego, punto considerado importante desde Estados Unidos para los inversionistas privados. El punto flojo de nuestro país, desde la óptica norteamericana, es su falta de una ley actualizada de defensa de los derechos de protección intelectual.
Proyección
La economista Ana Eiras, de la fundación Heritage de Washington, dijo a LA REPUBLICA que la estrategia de Uruguay en esta negociación debería ser insistir en demostrar la vigencia de su sistema jurídico, que en todo momento dio senales de estabilidad, dando confianza a los inversores.
Consideró asimismo que nuestro país tiene potencial para lograr un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos y advirtió que mucho dependerá de cómo se mueva el gobierno de Uruguay. Por otro lado integrantes del equipo de negociadores de Estados Unidos dejaron planteadas sus dudas con respecto a la concreción de un acuerdo de libre comercio entre ambos países.
Se senaló que existe interés de parte de la administración Bush de iniciar un diálogo pero se especificó que no tiene por qué ser un acuerdo como el alcanzado con Chile luego de 10 anos de conversaciones.
La Fundación Heritage se dedica desde hace 25 años a analizar la política norteamericana, formula recomendaciones al gobierno sobre la postura que debería adoptar en negociaciones económicas internacionales y logra incidir fuertemente en la opinión pública de este país.
En su último "Indice de libertad económica 2002" la Fundación Heritage señala que el avance de Uruguay hacia la liberalización del mercado y la disciplina fiscal podría detenerse debido a la recesión ocasionada en parte por el deterioro de las economías de Argentina y Brasil.
También se formulan algunas consideraciones tales como que el gobierno consume el 14% del Producto Bruto Interno, que el proceso de apertura de una empresa puede prolongarse debido a la cantidad de regulaciones aplicables, aunque sobre este punto se destaca el esfuerzo de la administración Batlle por agilizar la burocracia y, por otro lado, se especifica que la corrupción no constituye un serio impedimento para la actividad comercial.
Como único considerando político se establece que el Frente Amplio, con un 40% del electorado a su favor, impulsa un plan distinto al del Poder Ejecutivo al proponer que, "en lugar de aliviar la pesada carga regulatoria y reformar las leyes laborales, el gobierno debería agotar los recursos de la nación para obtener prosperidad".
La economista Eiras dijo que, para Heritage, Uruguay califica como país para iniciar negociaciones hacia un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos.
El mercado de EEUU adquiere el 7.8% de las exportaciones de Uruguay, que tiene una balanza comercial desfavorable al importar de ese país el 9.2% del total de sus compras en el exterior.
Protección intelectual
Voceros de la oficina de comercio de Estados Unidos reconocieron a LA REPUBLICA que la falta de una ley moderna y actualizada sobre la protección de propiedad intelectual es un aspecto a resolver pero no se considera un obstáculo insalvable para el inicio de las conversaciones comerciales.
La ley de Uruguay sobre propiedad intelectual data de 1937 y actualmente el Parlamento tiene a su consideración dos proyectos, uno sobre software y otro referido a los derecho de autor en general. Ambas iniciativas ya fueron aprobadas por la Cámara de Representantes.
Voceros de la "Alianza Internacional para la Protección Intelectual", organización privada que representa a la industria del libro, CD, Software y música entre otros sectores, entienden que Uruguay desde hace dos años está incumpliendo con sus obligaciones internacionales en esta materia.
Se estima que durante 2001 las empresas norteamericanas perdieron en nuestro país U$S 21 millones debido a la piratería. Se calcula que en Uruguay la piratería en software alcanza al 74% de ese mercado mientras que en cuanto a la música uno de cada dos CD serían copias truchas.
En Estados Unidos la piratería llega a los U$S 5.000 millones anuales de los cuales unos U$S 3.000 millones son en software.
Desde esta organización privada se entiende que Uruguay y Chile están siendo utilizados como países de trasbordo de material pirateado proveniente de Tailandia y Taiwan.
Por otro lado, se destacó el esfuerzo de la Policía uruguaya en su lucha contra la piratería.