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Tiene el país la peor distribución del ingreso desde 1970,
según datos de Clarín
Argentina, en "agonía", advierte la Iglesia católica
Hablar de intervenir en Colombia, muestra de que no se aprendió nada de Malvinas: Pérez Esquivel
AFP Y DPA
Buenos Aires, 31 de marzo. La Iglesia católica de Argentina dijo hoy que el país, que atraviesa la crisis económica y social más grave de su historia, está "en agonía", al tiempo que criticó duramente a su "indigna" dirigencia política.
El diagnóstico de los obispos argentinos se presenta al tiempo que la Coordinadora de Actividades Mercantiles informó este domingo que las ventas al por menor cayeron 60 por ciento en algunos rubros durante marzo, y que el diario Clarín destacó que el país registra la peor distribución de ingreso desde 1970.
Los únicos rubros favorecidos fueron la venta de vehículos, que subió gracias a la norma que permite el uso de los ahorros confiscados para la compra de algunos bienes durables, y el turismo nacional, que registró alza de 35 por ciento ante el encarecimiento de los viajes al exterior por la devaluación del peso.
"En general se comercializó menor cantidad de unidades, pero con precios unitarios mayores a los vigentes en marzo de 2001, lo que atemperó la caída en el monto total de las ventas", dijo la entidad.
Agregó que "la crisis imperante, agudizada en el tercer mes del año, potenció la actividad de los centros de canje o trueque, con visitas de 5 mil personas por día".
A su vez, Clarín reveló que Argentina tiene actualmente la peor distribución de ingreso desde al menos 1970, cuando comenzaron a realizar mediciones oficiales.
El 10% más rico recibió en octubre 37.3 por ciento del ingreso total
En la capital federal y alrededores, el principal centro urbano del país, en octubre pasado el 10 por ciento más rico de la población recibió 37.3 por ciento de los ingresos totales. En cambio, al 10 por ciento más pobre le correspondió sólo 1.3 de la riqueza.
Estas cifras -obtenidas en el último censo oficial de octubre- señalan que los más ricos obtuvieron 28.7 veces más que los más pobres, según un estudio de la consultora Equis publicado por el diario.
Pero la brecha entre pobres y ricos sería mayor a 30, ya que desde octubre la crisis se profundizó, mientras que según analistas los sectores más ricos declaran menos ingresos para evitar pagar más impuestos.
En este marco, el arzobispo de la provincia de Santa Fe, Edgardo Storni, abogó hoy por una fiesta de Pascuas "para todos los hombres y para todos los pueblos, pero especialmente para nuestro país moribundo, cuando ya no muerto, según lo testifica la corrupción que lo invade".
Marcelo Palentini y Pedro Olmedo, dos obispos de la provincia de Jujuy, calificaron, por su parte, de "indignos" a los dirigentes políticos, porque "tienen privilegios irritantes, mientras el pueblo está sin trabajo y pasando hambre".
Sostuvieron en un documento que "la clase política, los líderes empresariales y gremiales y los que administran la justicia no se dan o no se quieren dar cuenta de la gravedad, y no tienen la altura moral para dejar de lado los intereses propios o partidarios para acudir en auxilio del moribundo".
A su vez, el arzobispo de Rosario y vicepresidente de la Confederación Episcopal, Eduardo Miras, exhortó a los argentinos a "reasumir los valores humanos perdidos y abogar porque en el país se hagan las reformas necesarias para no repetir políticas injustas e inmorales".
Y el presidente de la Conferencia Episcopal, el arzobispo de la ciudad de Paraná, Estanislao Karlic, advirtió que la festividad de Pascua "entraña el compromiso por cambiar la vida moral personal y de la sociedad que tanto necesita Argentina".
Los reclamos y advertencias de los clérigos católicos se suman al pedido realizado ayer por el titular de la Comisión Episcopal, el cardenal Raúl Primatesta, al presidente Eduardo Duhalde para que no acate las instrucciones del Fondo Monetario Internacional, sino que dé paso a un proceso de generación de trabajo y producción.
Duhalde cumplirá mañana lunes tres meses de haber asumido la presidencia, designado por una Asamblea Legislativa, sin haber cumplido las promesas que hizo al juramentar, entre ellas devolver los ahorros incautados en la moneda en que fueron hechos y dejar de lado la alianza con los sectores financieros y especulativos. En cambio, los ahorros fueron pesificados y hasta hoy siguen confiscados, mientras que las grandes empresas se beneficiaron con la pesificación de sus deudas.
Asimismo, Duhalde ha intentado cumplir las exigencias del FMI, que incluso ha abogado en favor de los banqueros investigados por la millonaria fuga de capitales. Y en política exterior volvió a las estrechas relaciones con Estados Unidos, ofreciéndole incluso su apoyo para el conflicto colombiano.
En este sentido, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel opinó que los intentos del gobierno de intervenir en Colombia -entrenando pilotos- demuestra que "no se aprendió la lección de la guerra de las Malvinas".
En declaraciones a la agencia estatal Telam, con motivo de celebrarse el martes el 20 aniversario del inicio de la guerra de las Malvinas contra Gran Bretaña, Pérez Esquivel recordó que la dictadura militar imperante lanzó entonces la operación militar con objetivo de recuperar las australes islas para hacer frente al creciente descontento social.
Por su parte, una investigación de Clarín sostuvo que Estados Unidos habría considerado en 1982 la posibilidad de que Buenos Aires realizara un giro prosoviético tras la derrota en la guerra de las islas. Pese a la histórica postura de los militares argentinos en contra de la izquierda, la diplomacia estadunidense consideraba que las fuerzas armadas, que en 1976 derrocaron a un gobierno constitucional en nombre de la lucha contra el comunismo, podían terminar alinéandose con Moscú "en busca de armas", según documentos desclasificados por Washington.