VICTORIA MORAL: CUBA Y LOS ASALARIADOS DEL RÉGIMEN

Por WINSTON ORRILLO

Cuba ha obtenido una victoria moral en Ginebra. Una más en su causa heroica, integérrima, de defensa de lo mejor del hombre, frente a las arremetidas del imperio unipolar y su retahíla de seguidores y turiferarios.

La "victoria", ridícula, de sus enemigos, de 23 contra 21 votos, amén de 9 abstenciones, dice mucho de un mundo que no se ha dejado aplastar por el chantaje norteamericano, por la presión polivalente, dolarizada, del régimen de Bush.

"Victoria" que es un boomerang contra el imperio y sus descastados seguidores, entre los que se halla -cómo duele decirlo- nuestro Perú de Porras que se ha encharcado al caer en manos de los García Sayán y demás "diplomáticos" y asesores, que echan por tierra una gloriosa tradición que hunde sus raíces seculares en la sangre de Leoncio Prado y demás héroes epónimos.

Cuba sigue, pues, ganando batallas. David sigue derrotando a Goliat. La pequeña Isla demuestra que no está sola, y que no se han perdido, para gran parte de la humanidad, los valores de la solidaridad y el amor, el cultivo de la rosa blanca, "en julio como en enero".

La bienamada Patria de Martí, ese pequeño recinto de dignidad en el sublevado Caribe, nos demuestra que sigue de pie, con URSS o sin URSS, pero siempre con un bloqueo criminal del que no hablan los neodefensores del Establishment americano, perdón, norteamericano. Y del que no se ha dicho ni pío en el documento de Ginebra (!)

En nuestro país, el Parlamento, producto del pueblo, vota contra la posición del Presidente que muy pronto ha olvidado su origen popular, y de sus ministros que han demostrado su condición de rábulas y que hacen escarnio no sólo de la razón sino de toda sindéresis.

¿Quién, qué pueblo, ha elegido a García Sayán o a Nicolás Lynch? ¿Qué valor o qué peso específico pueden tener sus palabras que no parecen sino defender la jugosa prebenda (en dólares) de sus puestos temporales?

Ha llamado la atención, particularmente, un artículo del segundo de los nombrados en el que se hallan todas las características más singulares del "estilo" de estos neomaccarthistas.

Lynch, sin empacho alguno, nos llama a todos los que defendemos a Cuba "inspirados en el marxismo leninismo", sin ignorar lo que ello tiene de baja soplonería o de acusetería policial, más bien digna de Rospigliosi que, por cierto, parece más digno que aquél, porque no lo hemos escuchado decir esta boca es mía, aunque, claro, forma parte del Gabinete entreguista.

El artículo de marras está ahíto de referencias al "marxismo-leninismo", al "estilo estalinista" de los "procesos de Moscú"...

De veras que creíamos más original al exizquierdista y ahora controvertido dolarizado ministro Lynch quien, de paso, con "totaliaria" (para usar una expresión que le produce orgasmos mentales) frase tiene la insolencia de pontificar cuando dice que "la vida ha llevado a concluir que el aliento progresista de la Revolución Cubana (él la pone con minúscula, yo le devuelvo la mayúscula: consulte el último Diccionario de la Academia) ha terminado".

¿Quién es él frente, sólo a un par de figuras ecuménicas: García Márquez y José Saramago?

Sí, ya recuerdo que mi abuela decía que "por plata baila el mono", y acá está en juego la enjundiosa prebenda en dólares de los ministerios, y, por cierto, la posición de un Presidente que cree (¿alguien piensa que de buena fe?) que USA es el empíreo.

Ah, y en la misma dimensión, y en el mismo querido periódico "La República", se puede leer un artículo de Hugo Neira quien, desde las Islas del Sur (¿no sé si Tahití?), no es improbable que con un refrescante trago en la mano, igualmente pontifica sobre Cuba, y defiende "el derecho a viajar" de los cubanos y el de "remover autoridades", no sé si ignorando que no hay pueblo más crítico con sus autoridades que el de Martí. Y respecto al derecho de viajar, ¿Neira habla de viajar en combi? Porque cuántos son los que pueden usar el avión, verbi gratia en nuestro atormentado país? ¡Por favor! En este caso, parece, la distancia le hace perder la perspectivas.

Claro que, pecado capital de los intelectuales de cafetín, Neira también pontifica, y dice: "Seamos claros, a Fidel le prolonga la vida política el acoso americano y la intransigencia de los de Miami."

No obstante, su artículo tiene mayor peso intelectual que el deleznable, por donde se le mire, de quien es Ministro de Educación: ¡pobre educación peruana!

¡Que insolente había sido este caballero, pero, asimismo, qué rastrero, porque su articulejo acaba dándole la razón...nada menos que a su jefe, el Presidente del que él es ministro, en una parrafada que quedará para la historia: "Ha hecho bien, por ello, el gobierno del presidente Alejandro Toledo en promover una posición...."

¡Basta de miserias humanas!

Sólo resta, para concluir, que el Presidente Toledo, formado en los Estados Unidos, ha tenido buen olfato para escoger a sus Ministros y asesores. ¡Quién puede dudarlo, ahora!