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En el circo de Ginebra
Nicaragua aporta vasallos y bufones
NIDIA DIAZ
Que la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas (CDH) se ha
convertido en un circo al estilo romano donde el Emperador lanza al ruedo a
aquellos que se niegan a acatar sus dictados para que sean devorados por los
leones, a nadie le cabe dudas.
Y, para demostrar la solidez de su reinado, el Emperador del mundo unipolar,
como en toda corte que se respete, se ha hecho rodear por vasallos y bufones.
Si de estos se trata, ninguno cumple con mayor eficiencia la doble condición
que el gobierno de Nicaragua que actualmente preside el señor Enrique
Bolaños.
Buena prueba de ello es la composición de la delegación de ese
país centroamericano al actual período de sesiones de la CDH que
está presidida por su embajador en Ginebra, Léster Mejía
Solís, y por dos personeros que le fueron impuestos a Bolaños
en su último viaje a Miami por el mismísimo Jorge Mas Santos.
Se trata del cubano-americano. Omar López Montenegro y de la ciudadana
norteamericana, de origen nicaragüense, Ana Navarro, por quien también
intercedió su viejo compinche, Otto Reich.
Así es de pintoresca la representación nicaragüense en Ginebra.
Y, aunque Nicaragua no forma parte este año de la CDH, para ellos, el
imperio tiene tareas muy específicas: presentar "pruebas" sobre supuestas
violaciones de los derechos humanos en Cuba, además de hacer trabajos
de cabildeo entre las delegaciones latinoamericanas para lograr un voto anticubano.
No es ocioso recordar que el corrupto y adiposo expresidente Arnoldo Alemán
fue el primero en vender el escaño de Nicaragua a la mafia miamense y
a sus patrocinadores en la Casa Blanca, utilizando para ello al connotado terrorista
de origen cubano Luis Zuñiga, quien durante cinco años formó
parte de la delegación del país centroamericano a esa instancia
de Naciones Unidas.
¿Quiénes son estos nuevos bufones de la corte?
Omar López Montenegro es el director ejecutivo de la Fundación
Nacional Cubano-Americana (FNCA) y, aunque el canciller Norman Caldera dijo
que "llevamos a López como asesor, porque tenemos derecho a asesorarnos
con quien queramos", lo cierto es que el susodicho tendrá la misión
de distribuir el informe anual de la organización mafioso-terrorista
acerca de lo que, según ellos, ha acontecido en Cuba en materia de derechos
humanos y, de paso, distribuir las dádivas del padrino, en efectivo o
en especie, todo dependerá de las necesidades de los vasallos.
A Ana Navarro, por su parte, la Cancillería nicaragüense la presentó
con celofán "made in Nicaragua" pero lo cierto es que aunque la materia
prima es local, el acabado es típicamente USA. Desde hace más
de 20 años esta dama radica en los Estados Unidos donde se licenció
en Ciencias Políticas en la universidad de Miami y de Leyes en la de
St Thomas.
Según fuentes del propio Ministerio de Relaciones Exteriores nicaragüense,
el 9 de enero del año en curso, ella llegó al país como
parte de la delegación oficial de los EE.UU., para participar en la toma
de posesión del presidente Enrique Bolaños.
Según El Nuevo Diario en la primera mitad de los 90, Ana Navarro integró
el equipo de transición para la gobernatura de Jeb Bush, el hermano del
Emperador y, posteriormente fue directora de política migratoria en la
Florida.
Es obvio que durante ese tiempo estrechara vínculos con la mafia miamense
de origen cubano y la ultraderecha norteamericana. No de otro modo se puede
hacer carrera en ese estado norteamericano.
Por esa época trabajó bajo las órdenes de Otto Reich, hoy
subsecretario de Estado para Asuntos Latinoamericanos, y en coordinación
con Jorge Mas Santos y las urracas de Ileana Ross y Lincoln Díaz Balart
integró una "fuerza de tarea" dedicada a presionar a líderes políticos
y religiosos para impedir el regreso del niño Elián González
al seno de su familia en Cuba.
¿Qué mejor carta de presentación para esta preocupada y ocupada
luchadora por los derechos humanos que su frenética y vehemente actividad
en contra de que un padre pudiera ejercer la patria potestad sobre su hijo?
Cuentan que en los primeros días de marzo de este año, el propio
Otto Reich se comunicó con el presidente Bolaños para informarle
que se "hacía imprescindible" nombrar a la Navarro como parte de la delegación
de Nicaragua.
El asalariado conspirador necesitaba probados cómplices que asumieran
por Washington el trabajo sucio en los pasillos del Palacio de las Naciones,
en Ginebra.
No se equivocó. Ana Navarro, quien aseguran sus íntimos desprecia
la idiosincrasia y hasta la tierra que la vio nacer, aceptó rápidamente
el escaño y, sin reparo alguno, organizó un convite anticubano
al invitar a las ONG asistentes al 58 período de sesiones de la CDH a
un foro de discusión en el que ella sería moderadora de un panel
que trataría el tema de la situación de los derechos humanos en
Cuba. La citación, impúdicamente la cursó bajo el membrete
de la representación oficial de Nicaragua en la CDH.
Este año, la Navarro, suplantó a la organización Fredom
House en la orquestada patraña y, como si fuera poco, al final de la
citación advirtió que ofrecerían sandwiches y bebidas.
No nos llamemos a engaño. Ayer fue Luis Zúñiga y hoy son
López Montenegro y Ana Navarro, amén de otros gusanillos de pocas
monta que le pagaron el viaje. Siempre aparecerá algún que otro
súbdito dispuesto a vender su alma al diablo.
Si el gobierno de Nicaragua tuviera un mínimo de vergüenza no se
prestaría a la farsa de singularizar a Cuba por supuestas violaciones
de los derechos humanos.
Para comprobar que no tienen autoridad moral alguna bastaría ofrecer
algunas cifras que, de existir honestidad en la CDH, sería a Nicaragua
y no a Cuba a quien habría que sentar en el banquillo de los acusados.
—El Informe de Desarrollo Humano del 2000 revela que el 12 por ciento de la
población nicaragüense no vivirá más allá de
los 40 años debido a la pobreza.
—Que, según la Organización Panamericana de la Salud, el índice
de mortalidad infantil es de 45,2 fallecidos por cada mil nacidos vivos.
—Que es el tercer país más pobre de América Latina y ocupa
el lugar 116, de 174 naciones de acuerdo con el Indice de Desarrollo Humano.
Que el 53 por ciento de los hogares está en el límite de la pobreza.
—Que según el Mapa Mundial del Hambre del PMA del 2001, el 31 por ciento
de la población padece de malnutrición por no poder satisfacer
sus necesidades alimenticias.
—Que el 51 por ciento de los niños no llegan a terminar el 5to grado
—Que según un informe de la Comisión de Derechos Humanos de Centroamérica,
durante el 2001 persistió en Nicaragua una violación sistemática
de los derechos económicos y sociales del pueblo por la aplicación
de las medidas de ajuste estructural que imponen los organismos financieros
internacionales.
—Que más de 700 000 niños viven en condiciones de riesgo, expuestos
a situaciones de violencia, desnutrición y explotación laboral
y sexual.
—Que el 53 por ciento de la población está desempleada o subempleada
y que el 65 por ciento no tiene acceso a los servicios de saneamiento y el 38
por ciento al agua potable.
—Que la mortalidad materno-infantil entre las adolescentes es de las más
elevadas de Centroamérica con un 25,3 por ciento de muertes por causas
directas o indirectas al parto.
—Que en Centroamérica, Nicaragua es el país que tiene los índices
más bajos en cuanto a cobertura, calidad y presupuesto de educación.
—Que uno de cada cuatro nicaragüenses ni siquiera lee ni sabe escribir
su nombre y alrededor de un millón de niños y jóvenes quedan
cada año fuera de los servicios escolares.
—Que en el área urbana sólo un 30 por ciento de los que ingresan
en primaria la terminan, mientras que en el área rural la cifra es solo
de 10%. La secundaria cubre apenas al 34% de la población en esas edades.
Y, por si fuera poco, el miércoles de la semana anrterior se conoció
del brutal asesinato del presidente de la Cámara de Comercio de Bluefields,
Francisco José García Valle, quien fue encontrado amordazado,
atado de pies y manos y con un disparo en el pecho.
Todos los diarios del país coinciden en señalar que el móvil
del asesinato está relacionado con la labor de su esposa, la doctora
María Luisa Acosta en defensa de los derechos de posesión de la
tierra de los pueblos indígenas y a quien varias veces han amenazado
de muerte.
Los grupos paramilitares al servicio de intereses espurios no solo políticos
sino económicos, actúan impunemente, amedrentando a la población
sobre todo a aquellos sectores que, como los sin tierra, luchan por sus derechos.
Con tales credenciales de exclusión y desigualdad social, corrupción
y fraude, Nicaragua ha asumido el triste papel de bufón de la corte y
para ganarse un puesto a la diestra del Emperador no encuentra otra opción
que repetir el gastado cuento de que en Cuba se violan los derechos humanos.