9 de septiembre del 2002
Chávez apoya que los trabajadores asuman el control de empresas en quiebra
Aporrea
El presidente Chávez, al asistir al Primer Encuentro Nacional de Trabajadores que se llevó a cabo en el Teatro Municipal, instó a los trabajadores a crear un movimiento obrero autónomo, "que no sea manipulado por nadie ni por las cúpulas ni por sectores del gobierno ni los partidos políticos". "Hay que además resaltar la verdadera democracia sindical, acá están representando a miles y miles de trabajadores, de forma legal", agregó el mandatario nacional. "Un movimiento obrero que este subordinando a un partido o un gobierno seria como un ave a la que se le corten las alas, ustedes deben formar un movimiento obrero revolucionario, popular, autónomo, luchando y coordinándose con los campesinos, los estudiantes, con todos los sectores del país", dijo Chávez a los mas de 1500 representantes laborales de toda Venezuela que asistieron al Encuentro.
En vista del cierre de empresas y la fuga de excesiva de capitales por motivaciones políticas, el Presidente denunció "la intención de sectores de oposición, elitescos y con mucho poder, de quebrar la economía venezolana y ahogar al Gobierno".
"Cualquier llamado a huelga debe encontrarse con los trabajadores protestando en la calle".
Los representantes laborales solicitaron al gobierno posiciones más duras frente a grupos empresariales y sindicatos golpistas que amenazan con una huelga general indefinida. En ese sentido, el primer mandatario agregó que "ya mandé al Ministerio de Trabajo a elaborar un proyecto de decreto para que los trabajadores asuman el control de las empresas que cierren sus puertas para ir a una huelga para sacar a Chávez del poder. Si algún industrial o empresario, atendiendo al llamado de las cúpulas gremiales, cierra las puertas de su fábrica para sumarse a una huelga, aplicaremos el decreto".
Empresas quebradas rescatadas por los trabajadores
El presidente además apoyó la propuesta hecha por los representantes laborales en cuanto a adoptar medidas que permitan a los trabajadores asumir el control de las fábricas y empresas que se declaren en quiebra, con el fin de rescatarlas y ponerlas a producir de nuevo. Esto ya ha sucedido de manera legal en Argentina, donde los trabajadores han tomado el control completo de empresas que se han declarado en bancarrota, y han continuado exitosamente con la actividad productiva. En cuanto al control de las empresas por parte de los trabajadores, Chávez mencionó que "no se trata de que el Gobierno imponga la medida, sino que sean los propios trabajadores quienes decidan tomar estas acciones".
Durante el Encuentro, los trabajadores aprobaron de manera unánime, una propuesta de creación de una nueva organización nacional de trabajadores y el nombramiento de una coordinadora democrática que analice todos los elementos con participación de la base de los trabajadores, con el fin de presentar una propuesta de organización del movimiento de trabajadores en un lapso de 60 días.
Sobre esta decisión, el presidente Chávez manifestó: "Me parece extraordinario que hayan acordado en esta declaración constituir una coordinadora, porque recogerá todas las expresiones, liderando la reunificación, pero insisto en que no nos sentemos a esperar a que se presente el proyecto de la coordinadora, porque eso hay que trabajarlo, e insisto que hay tareas del cada día que no deben esperar por esa decisión de refundación".
El primer mandatario agregó que "la única manera de salir de la pobreza es otorgándoles poder a los pobres y no dejarlo sólo en manos de quienes se creen sabios".
Posteriormente agregó que "es tiempo de una ofensiva revolucionaria porque el movimiento popular no puede permitir le tomen las calles ni una huelga insurreccional como la anunciada por cúpulas sindicales corruptas y fascistas."
Reacciones de la patronal
Carlos Fernández, sustituto del ex-dictador Pedro Carmona como presidente de la patronal FEDECAMARAS, en declaraciones a la televisora de oposición Globovisión, indicó que "Ese anuncio que hizo hoy no es más que el populismo que el Presidente ha querido implantar en Venezuela, a través de ese modelo comunista". Acusó a Chávez de querer imponer "un modelo político comunista-cubanista-marxista, que nos llevaría al empobrecimiento total de toda la sociedad".