La carne es débil, dice la arquidiócesis de Guadalajara
No descarta el clero vínculos entre sacerdotes y el narco
ALMA E. MUÑOZ / LA JORNADA
La arquidiócesis de Guadalajara no descarta vínculos entre sacerdotes
y narcotraficantes, porque "la carne es débil, y a veces la tentación
del dinero es muy fuerte; más aún cuando se disfraza como intención
de una buena obra''.
Por medio de su semanario hace referencia a imputaciones a líderes eclesiásticos
sobre el particular, y rechaza que a la jerarquía católica le
interese "en lo más mínimo tener alguna relación con dinero
malhabido", aunque ello implique retrasar obras como el Santuario de los Mártires,
en Tlaquepaque, Jalisco.
Sostiene que desde tiempo atrás "se han urdido las diversas historias
en la materia", pero nada se ha podido comprobar. "¿Por qué razón?
Porque simplemente no existen tales vínculos".
No obstante, en su edición 289, correspondiente a esta semana, menciona
los casos más sonados al respecto: la hipótesis de que el cardenal
Juan Jesús Posadas Ocampo fue asesinado el 23 de mayo de 1993 por "su
supuesta relación con el narcotráfico, fuera porque tenía
amistad con gente presuntamente dedicada al comercio de estupefacientes, fuera
porque sabía mucho de esas actividades ilícitas, o porque recibía
dinero de ellos, entre otras".
Recuerda que hubo filtraciones sobre el "ofrecimiento de mucho dinero" por "personas
presumiblemente dedicadas al comercio de las drogas", para la construcción
del Santuario de los Mártires, en Tlaquepaque, Jalisco, aunque "el rector
del templo (Oscar Sánchez Barba) lo rechazó", pese a que "se necesita
dinero para terminar esa obra a tiempo, pero no al precio de colaborar con el
narcotráfico".