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Mesa Redonda Informativa: Mafia anticubana de Miami
En la calle y sin llavín
Mario Jorge Muñoz Lozano
La mafia terrorista anticubana, cada vez más dividida e histérica,
se ha dado de bruces en estos días con los sistemáticos viajes
de ciudadanos y personalidades norteamericanas a Cuba, muy a pesar de sus
alaridos y de su activa política a favor del bloqueo contra la Isla
y la prohibición de viajar a ella, advirtió el colega Randy
Alonso, moderador de la Mesa Redonda Informativa de este lunes, realizada
en los estudios de la Televisión Cubana.
Subrayó que la realidad es más poderosa que las presiones y
una mafia enredada en sus propios negocios turbios, derrotada cada vez más
en su pretensión de secuestrar infinitamente la política norteamericana
hacia Cuba.
Lástima de Miami —dijo Alonso—, una ciudad cuyos política, economía
y desarrollo social permanecen secuestrados por la ultraderecha anticubana,
corrupta y amoral, que poco bien le hace al sur de la Florida y al propio
Estados Unidos.
En tal sentido, Rogelio Polanco, director del diario Juventud Rebelde, demostró
que Miami no aguanta más. Violencia, drogadicción, corrupción
crecen, mientras cada día son menores los recursos destinados a resolver
los verdaderos problemas sociales de sus habitantes, entre ellos la educación.
Reinaldo Taladrid, periodista de la Televisión Cubana, llamó
la atención sobre los daños que le ha causado la ultraderecha
cubanoamericana a la Florida. Se refirió al negocio establecido en
la ciudad a partir de la nostalgia de los cubanos más viejos, el cual
ejemplificó con los jugosos dividendos recaudados por un empresario
que se ha dedicado a producir y vender la guía telefónica de
La Habana de 1958.
Taladrid habló también del último fallo de la Organización
Mundial del Comercio en contra de la empresa Bacardí sobre el derecho
de la marca Havana Club, pleito inútil al que llevaron a las autoridades
de Estados Unidos los personeros de la mafia.
En otra de las intervenciones, Polanco puntualizó que la contrarrevolución
anda furiosa por las constantes visitas de estudiantes, empresarios, académicos
y políticos a nuestro país.
Subrayó que además de las visitas, la ultraderecha está
choqueada, más que todo, por las constantes declaraciones de congresistas
e importantes hombres de negocios en contra del bloqueo a Cuba y por un aumento
de los vínculos comerciales, además de los dos encuentros de
estudiantes norteamericanos del proyecto Semestre en el Mar con el Comandante
en Jefe Fidel Castro.
Las visitas se han intensificado en los últimos meses, dijo. Y es lógico
que estén interesados en conocer a un país que le niegan. Polanco
puntualizó el hecho de que esta afluencia de norteamericanos a Cuba
se registre en momentos en que EE.UU. mantiene una cruzada contra el terrorismo
y esta gente quiera viajar a la Isla prohibida, que arbitrariamente aparece
en una lista de países terroristas dada a conocer por Washington.
Vía telefónica, Lázaro Fariñas, periodista cubanoamericano
radicado en Miami, dijo que esta situación ha generado un estado de
pánico entre las organizaciones de extrema derecha en esa ciudad, han
reconocido que la situación se les está escapando de las manos.
Algo que los tiene trastornados —comentó— es que con el actual gobierno,
su supuesta esperanza, está sucediendo lo contrario de lo que esperaban.
Después de haber estado chupando la teta norteamericana se están
quedando en la calle y sin llavín.
Indicó que la campaña en los medios de comunicación de
Miami contra Cuba se ha recrudecido, pero eso no puede tapar la realidad de
estas visitas ni los proyectos de ley que se discuten en el Congreso, uno
para prohibir la persecución de norteamericanos que viajen a Cuba y
otro que promueve el financiamiento norteamericano a compras cubanas.
Concluyó que el futuro de estas organizaciones anticubanas es negro.
Desde el secuestro del niño Elián González se desprestigiaron,
desde ese momento han estado decayendo en poder y credibilidad.