17 de febrero del 2002
Entrevista con Gladys Marín, secretaria del PC chileno

Un salto cualitativo en la respuesta contra el sistema capitalista

El Siglo

-Acaba de llegar de dos eventos de particular trascendencia política y social para América Latina, y posiblemente para el mundo. ¿Cuáles fueron y en qué consistieron básicamente?
"Sí, efectivamente. El primero fue el Encuentro de los Partidos Comunistas de América Latina y del Caribe y de Partidos Comunistas Europeos, que se realizó en Montevideo, a iniciativa de la Fundación de Investigaciones Marxistas del Partido Comunista de España y del Partido Comunista de Uruguay.
Fue un encuentro tremendamente importante, al que asistieron primeros secretarios de Perú, Bolivia, Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Ecuador. Por la situación política en sus países, no pudieron estar los secretarios generales de Colombia y Venezuela. Asistió José Ramón Balaguer, dirigente del buró político del Partido Comunista de Cuba; el Secretario General del Partido Comunista de España, Francisco Frutos, con el Encargado de Relaciones Internacionales y quien preside el Instituto de Investigaciones Marxistas; estuvo Portugal y Grecia.
Qué es lo importante de esta reunión: primero, que tenemos una mirada común frente a lo que está pasando en el mundo, y ésta muestra que esta etapa, la llamada globalización capitalista, no hace otra cosa que confirmar lo que el marxismo hace mucho nos había señalado: que la tendencia del capital es a la internacionalización, y ésa es la vocación que hace que el capitalismo se convierta -desde hace mucho tiempo- en un sistema mundial, que pasa por una etapa después superior que es la mundialización y hoy día estamos en la etapa de la globalización.
Sobre esto no hubo discusión, si era más justo hablar de globalización o mundialización; qué era más acertado desde el punto de vista de las categorías económicas, políticas. La verdad es que cada cual puede tener una forma de decirlo, porque aquí no se trata de uniformar a los partidos comunistas, ¡fuera los uniformes!, sino de la mirada común que tenemos sobre los fenómenos...".
-Pero esa mirada común, ¿es sólo de los partidos comunistas?
"Claro, la elaboración política que hacen los partidos, en este caso los partidos comunistas, como parte de los movimientos marxistas, tiene que ser en un lenguaje que pase a ser común para la gente. Y nos encontramos con que frente a esta globalización neoliberal, ha surgido un gran movimiento mundial que se llamó Movimiento contra la globalización capitalista.
No es el momento de que nos pongamos a discutir si es más precisa ésta denominación u otra.
Lo importante es entender lo que queremos decir: que la globalización es una etapa cualitativamente diferente en el desarrollo del capitalismo. Y lo es, porque es categoría económica en cuanto se asimila y es continuación de la mundialización; y es, sobre todo, un nuevo discurso o proyecto político del capitalismo, porque se da en todos los planos: uniforma, es globalizante; se da en el plano de la cultura, lo social, lo político. Es un sistema totalitario, es una dictadura capitalista, que pretende uniformar todo".
-¿Y la otra reunión, la de Puerto Alegre?
"En mi intervención en el panel de Puerto Alegre, que ya fue el segundo evento, resumí las ideas que expuse en Montevideo: "Sobre globalización y socialismo". Y otro tema importante: ¿en qué momento nos encontramos?, ¿cuál es la lectura que hacemos del desarrollo del capitalismo actual?, ¿cuánto han variado las clases hoy día en el mundo?
Pero un gran tema en Montevideo fue el de las alianzas. Necesitamos construir alianzas muy amplias para enfrentar a este capitalismo que cuenta con un gran arsenal de recursos, que tiene crisis pero también la capacidad de reponerse. Entonces, yo te diría que la alianza tiene que ser dada naturalmente en el entendimiento en muchos planos. Primero, una alianza de revolucionarios, entre los partidos comunistas, que tenemos un pensamiento común: marxista; que seguimos teniendo como referencia el pensamiento de Lenin. Y después una alianza que tiene que ser de izquierda, amplia, donde haya cabida para toda la gente que quiere cambiar el sistema. Y una tercera, con todos que hoy están contra el sistema neoliberal, aunque no se propongan el socialismo".
El socialismo: la alternativa
"Un tercer asunto, que salió también en Montevideo, es que tenemos que levantar la alternativa del socialismo. ¿Qué otra cosa hay, frente a este sistema capitalista que fracasa?
Nosotros hicimos la distinción entre fracasar y estar derrotado: el capitalismo está fracasado, los problemas en el mundo son cada vez peores: la discriminación, las diferencias sociales, el planeta a punto de estallar.
¿Qué alternativa tiene el capitalismo? Las terceras vías ya fracasaron. En nuestro continente las representaron, entre otros, el llamado "Consenso de Buenos Aires", al que asistió gente de la socialdemocracia europea, gente muy distinguida de nuestro continente, como el Presidente de La Rúa; Ricardo Lagos, que era candidato en ese tiempo, creo; Enrique Cardozo, actual Presidente de Brasil; Vicente Fox y Lula. Bueno, pero en esa tercera vía se plantean un programa "democrático", con un tinte liberal progresista. Mira en lo que están De la Rúa, Vicente Fox, Enrique Cardozo... y Lagos, aplicando las políticas más puras y absolutas del neoliberalismo, no sólo por la vía de las privatizaciones, sino con la apertura de los mercados financieros. Pretendiendo, Ricardo Lagos a la cabeza con el TLC, que nos sigamos anexando a la economía de EE.UU.
No hay terceras vías, porque la tercera vía es una versión del neoliberalismo. Por lo tanto -y que la pregunta la hagamos los pueblos, en las plazas públicas, en los sindicatos: ¿qué alternativa cabe si no el socialismo? El socialismo no es otra cosa que la expresión de la democracia, la democracia absoluta, como un movimiento permanente. Socialismo, como la libertad de todos; como base, la libertad individual, pero la libertad de todos. Y socialización de los medios de producción. Pero entendiendo la socialización no como la pertenencia al Estado, sino como la participación de los trabajadores, en todos los sectores productivos. La participación directa en la gestión, en la planificación y también en las utilidades. Porque no se trata solamente de que haya un área pública, no. Puede haber, y van a coexistir por largo tiempo, distintas áreas de la economía: pública, privada, también capital extranjero, economía de cooperativas, municipalizadas. Pero donde lo importante es la participación.
Y esto lo decimos en base a experiencias pasadas, como el fracaso del socialismo en Europa del este. ¿Qué es lo que determina ese derrumbe?: sobre todo, la no participación de la gente. Se puede alegar que ha habido factores internacionales que conspiraban contra la existencia de la Unión Soviética, pero nunca la democracia se puede detener. Nunca. Porque ésa es la diferencia del socialismo".
El factor internacional
"Todos estos temas estuvieron en la reunión de Montevideo. Y muy fuertemente, la necesidad de la coordinación. Porque si el mundo está globalizado, ya no caben las respuestas nacionales. El factor internacional es un factor estratégico en las luchas de los pueblos. Lo que ocurre en Argentina nos tiene que interesar tremendamente. En primer lugar, por solidaridad con los trabajadores argentinos; pero para estudiar cómo allí la crisis económica ha dado paso a tantos estallidos sociales, a la incorporación de otras capas de la población que van más allá de los obreros, los trabajadores, los cesantes; capas medias de la población que entran también a la batalla contra estos modelos neoliberales".
La guerra: estrategia del imperialismo
-¿Hubo en esas reuniones alguna consideración especial sobre la guerra?
"Claro, y se dio como una expresión del humanismo, democrático, socialista, de bregar por la convivencia entre los pueblos. Pero no sólo eso, porque hoy la guerra ha tomado otro carácter: es la estrategia imperialista. Es la forma de realizar la acumulación capitalista en un momento de recesión económica. La salida que se le da a la recesión en Estados Unidos:
desarrollar la industria de la guerra. Entonces, el mundo empieza el espiral: hay que armarse. Y aquí en Chile, no es tan así que se autorice la compra de aviones F-16, no es solamente algunos avioncitos más: es parte de la estrategia de los Estados Unidos.
Hay que oponerse a la guerra desde todos los puntos de vista, desde el punto de vista del desarrollo de nuestros pueblos. Exigir la reducción de los presupuestos militares".
El Foro de Porto Alegre
"Es el segundo año en que se se realiza este Foro. Yo no estuve el año pasado, y es realmente impresionante. Había más de 14.000 delegados acreditados para participar en los cientos de foros: en las universidades, en todos los recintos en Puerto Alegre, que es una ciudad abierta, democrática, y que se preocupa mucho del medio ambiente. Creo que va a a ser declarada una de las ciudades del mundo con más áreas verdes. Una ciudad plural, donde se pueden expresar los socialistas, los socialdemócratas, los liberales, los comunistas. Y además de los delegados, había 60.000 personas participando. Uno 10.000 jóvenes en el Campamento Juvenil, construido por los estudiantes en trabajo voluntario y con mucho material reciclable. Unos 6.000 en el Campamento Campesino. Era la diversidad, era la pluralidad, social, política, étnica, de edades, de temas... Había que escoger dónde participar. Miles de personas quedaron afuera cuando fue a hablar Chomsky".
-¿Cuál fue la experiencia de los chilenos?
"Hicimos una experiencia colectiva, de ir por el Comité por la Paz y Contra la Guerra de Estados Unidos. Se destacaron los chilenos. Un dirigente sindical de Los Andes intervino en la sala más grande, donde se discutía la alianza por un comercio justo, la participación de los organismos sociales y el TLC y el ALCA. La intervención de ese muchacho dirigente sindical chileno, fue extraordinaria. Y estuvo Carlos Sánchez, dirigente de la diversidad sexual; y Jaime Gajardo...
Nosotros estuvimos en un panel -aquí en Chile dirían "sobreideologizado- de un gran nivel teórico, de los institutos de investigaciones marxistas de Europa. Los temas: Capitalismo contemporáneo, Nuevas dominaciones, Producción de alternativa, Imperialismo, Globalización, Mundialización, Contraofensiva... En este nivel se está moviendo hoy la discusión en el mundo.
En las calles, los delegados -me lo contaba una joven estudiante de la UC- eran interrogados por la gente sobre temas cómo: Argentina, hay o no hay crisis revolucionaria. Los jóvenes quieren discutir..."
Discusión y tareas
"Y no sólo era la elaboración teórica: también, la coordinación para la lucha. El compromiso de salir a resistir en contra del ALCA. El ALCA no puede pasar en América Latina. Había consignas como: "hay que ponerle más fuego a la lucha"... Es decir, hay una actitud y un pensamiento, en el correcto sentido de la palabra, radicalizado. Lo que significa ir a la raíz de los problemas. No nos cuenten cuentos: si hay cesantía, las mujeres son discriminadas, los jóvenes no tienen presupuesto para la educación, los pobladores no tienen casa, todo eso tiene una raíz. La contradicción fundamental en este sistema sigue siendo entre la burguesía y el proletariado.
Y vamos a tener un tope para avanzar, nos vamos a estrellar, si seguimos con la lucha reivindicativa, reivindicativa... Es una discusión muy fuerte... ¿Cuál es la participación de la gente de izquierda en las instituciones formales? Estas democracias, como resultado de la globalización, son democracias vacías, formales. No podemos vivir en función de los procesos electorales. Tenemos que salir de las instituciones, o estar dentro de ellas y romper desde fuera también. Esa fue la gran experiencia de Génova, que escuché con gran atención cuando hablaban los jóvenes. La tendencia en todos es ir hacia un gran proceso, a crear un gran frente mundial, que en cada país tendrá su característica: un frente amplio, político y social. No lo social por su lado, no el mundo sindical por allá y lo político por acá. No: la respuesta tiene que ser radicalizada porque tenemos que ir al fondo de donde vienen los problemas. Esto significa un salto cualitativo en la respuesta contra el sistema capitalista.
Estos son los temas que tenemos que poner aquí. Todos los chilenos con quienes me encontré - de distintas tendencias, ideas-, decían lo mismo: tenemos que hacer una cosa así en Chile: elevar el nivel político, cultural, la comprensión.
¿Hay o no hay condiciones objetivas para la lucha?: hay condiciones objetivas. ¿Qué falta?: los elementos subjetivos. Que no son cualquier cosa, no están en las nubes: son la organización, la conciencia y la decisión de lucha. Porque la crisis en Argentina nos muestra que en ese país hay una crisis profunda, no sólo económica... ¿Y qué falta? ¿Cuál es la alternativa? ¿Dónde está la unidad, la obligatoria unidad las fuerzas de izquierda, revolucionarias; el papel de las centrales de trabajadores, que se convierten, muchas de ellas, en colaboradores del sistema que explota a sus compañeros de trabajo? Aquí tiene que haber una crítica y una discusión profundas dentro de los organismos sociales y sindicales".
-Entonces, su balance es positivo...
"Yo vengo aquí a decirte que tengo que ponerme a revisar el material, pero que vengo tremendamente entusiasmada. Con más confianza que nunca en que es posible la lucha: la lucha por la democracia y la lucha por el socialismo.
Sí, se derrumbó una forma de hacer socialismo, pero los pueblos siguen. Los pueblos tienen la misión histórica de seguir avanzando. Lo único absoluto es que todo está en movimiento constante. Podremos demorarnos más o menos, pero si volvemos a tomar, con todo el sentido nuevo que tiene, aquel "proletarios del mundo, uníos", hoy debemos decir: "unámonos contra la globalización", contra el sistema capitalista.
Tenemos que tener sentido de la responsabilidad ante nuestros pueblos, y aquí en Chile tenemos que tomar las iniciativas para definitivamente coordinarnos todas las fuerzas, todas. Esa es la pluralidad: todos los que tenemos un objetivo común.
Vengo muy contenta además, dicho modestamente, por el respeto hacia nuestro Partido. Aunque, nos exigen más en el plano internacional...".
El Foro de Sao Paulo
"Nosotros participamos también en el Foro de Sao Paulo, que estuvo dentro del Foro de Puerto Alegre, y que es el encuentro de los partidos de izquierda de América Latina. Hicimos allí un gran alegato, junto con otra gente, porque no puede haber una separación entre lo social y lo político. El discurso neoliberal es el que pretende fragmentar.
Ahora tenemos confianza en nosotros mismos y por eso el mundo está construyendo la alternativa de respuesta al capitalismo. Y aquí en Chile, sin ningún complejo: sencillamente, ir a organizar a la gente. Pegarnos el salto en cuanto a la sindicalización, a la organización, pero con más nivel de politización".