Latinoamérica

José Valera Pérez

En una carta dirigida al mandatario de los Estados Unidos, George W. Bush, un notable ultraderechista representante del Partido Republicano de nombre Henry Hyde, instó al jefe de estado norteamericano a dar su apoyo a la "coalición opositora" venezolana basado en hecho de que desde hace cuatro días respalda a unos oficiales activos declarados en "desobediencia legítima".
En un intento por tapar el sol con un dedo el equipo de las excusas del diario El Nazional, cita la carta del diario The New York Times de fecha 24 de octubre. El siniestro personaje, presidente del Comité de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes pidió al presidente George W.
Bush "respaldar" a "los partidos políticos genuinamente democráticos, los sindicatos, las asociaciones empresariales e instituciones religiosas que han estado reunidos durante dos días en coalición con un grupo de militares activos de alto rango con el objetivo de exigir la renuncia de Hugo Chávez y la celebración de nuevas elecciones libres y abiertas" en Venezuela.
Nos imaginamos que con tan melodiosa retahíla, este verdugo neofascista de los amos del norte se refiera al sequito de asesinos del 11 de abril y a la corte de bufones de su majestad imperial "Pedro Carmona El Breve".
Según el preclaro facistoide:
"Esta amplia coalición prodemocrática busca rescatar a Venezuela del dominio ejercido por un Presidente que, aunque fuera electo democráticamente en diciembre de 1998, desde el momento en que asumió el poder ha afectado gravemente la democracia política en Venezuela y ha amenazado el bienestar y la seguridad de las personas en países democráticos vecinos, así como en Estados Unidos", escribió.
Nos imaginamos que al escribir este párrafo, el representante de su alteza G.
Bush, recuerde que nuestro presidente gano por siete veces consecutiva elecciones muy legitimas con altísimos porcentajes, cosa que bochornosamente es publico y notorio no hizo su destinatario epistolar. El daño hecho por Hugo Chávez a los señores imperiales se basa en rescatar el orgullo pisoteado del Venezolano y representar una esperanza para la América pisoteada, a su vez que poner los precios de nuestros recursos en su justo lugar.
Seguidamente el diputado por el estado de Illinois exhortó a Bush a declarar su apoyo inmediato a "la coalición prodemocrática civil y militar en Venezuela que busca restaurar la democracia", y afirmó que "el régimen actual del presidente Chávez es ilegítimo porque se basa en la violación sistemática de la Constitución venezolana vigente desde 1999".
Este es el tipo de cinismo a que nos tiene acostumbrado la administración Bush y sus consortes en el congreso. Que citen siquiera un caso de un desaparecido, un preso político, de un periodista o de un militar injustamente preso, que se recuerde del uno de sus militares que por solo un comentario el señor destinatario le dio de baja. Si el bochorno de Altamira se mantiene, es precisamente debido a un régimen que respeta hasta limites intolerables el derecho a disentir.
Sepa usted señor Henry Hyde, que inmensos sectores Venezolanos le piden de rodillas al gobierno que se deje de contemplaciones para con quienes no la tuvieron contra el pueblo el 11 de abril, al cual asesinaron, dicho sea de paso ante el total mutismo de usted.
Pero es que el cinismo de este señor no se para allí. Mas adelante en su misiva escribe: "Vale la pena señalar que la coalición civil y militar prodemocrática en Venezuela ha argumentado su acción en el hecho de que según el artículo 350 de la actual Constitución Chavista, las acciones militares de 'desobediencia legítima' y la asociación política y agrupaciones de partidos, sindicatos, asociaciones empresariales y grupos de la sociedad civil venezolana que exigen la renuncia inmediata de Chávez, son totalmente constitucionales y adecuados".
Es necesario invitar a este soquete Americano a que se lea bien la constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela, pues por ninguna parte en ella dice que un grupo de militares golpista tiene el derecho de irse uniformados a una plaza publica a llamar a todo el país y principalmente a la F. A. a revelarse contra su comandante en jefe.
Le preguntamos a este insensato ¿que pasaría en su suelo propio si un general a cuenta de "oreja de cochino" viene a decirle a los ciudadanos americanos que por haber sido elegido por escasamente un diferencial de votos de dudosa credibilidad el señor Bush es ilegitimo y que hay que darle un Golpe?.
Es un discurso tramposo y grotesco al que ya nos hicimos inmune por su insistencia, pues siempre mezclan de todo, como aquello que el escribe de que el jefe del Gobierno venezolano hay que tumbarlo por "forjar alianzas públicas con Estados que auspician el terrorismo, entre ellos Cuba, Irak e Irán y suministrar petróleo subsidiado a Cuba, lo que permite que el régimen de Castro obtenga más de 2 millardos de dólares que el Gobierno cubano podría utilizar para apoyar el terrorismo". Permítame decirle mi estimado representante imperial, que el petróleo que recibe Cuba bajo el acuerdo de Caracas es pagado a precios internacionales, con prontitud y sin demora y que además nuestro gobierno puede venderle sus productos a quien a bien tenga vendérselos sin tener que pedirle permiso a nadie porque para eso somos un país soberano, que no tiene porque andar pidiéndole permiso a nadie en su política internacional. No somos esclavos, el esclavismo murió hace rato en Venezuela.
Le recomendamos el ser más original en sus apreciaciones cuando usted escribe que nuestro país "brindó apoyo a organizaciones terroristas que atacan a las frágiles democracias vecinas. Entre esas organizaciones están las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y grupos radicales antidemocráticos que buscan desestabilizar Bolivia y Ecuador. Entre estos respaldos, se incluyó el apoyo clandestino al coronel (Lucio) Gutiérrez y a radicales pro castristas que derrocaron brevemente al Gobierno democrático de Ecuador en enero de 2000. El coronel Gutiérrez es, en la actualidad, el principal candidato a la presidencia de Ecuador y probablemente adoptaría el rumbo pro castrista de Chávez". Ese es un disco rayado que ya nadie lo cree por su poco fondo.
Si a su juicio existe la posibilidad real de que Castro, Chávez y Lula da Silva puedan formar un llamado "eje del mal en el continente" que pudiera tener en breve armas nucleares y mísiles balísticos, que supuestamente Brasil desarrolló a finales de 1990, no es culpa de Chávez el que su país haya apoyado dicho proyecto y por otra parte haya llevado a la gente de la América latina a tal estado de miseria, que los empuje hoy a buscar nuevas alternativas. Alternativas que por demás creemos justas, y merecedoras de todo nuestro respeto.
Su desesperación ante lo evidente no le autoriza a usted a invocar la intervención foránea en nuestro suelo, y a lanzar sus ataques contra pueblos hermanos donde la esperanza se yergue con fuerza como Brasil y Ecuador.
No es precisamente Norte América el país mas autorizado para hablar de derroche en gastos de investigación en el campo de la energía atómica o se le olvida a usted que sus miles de cabezas nucleares pululan por el mundo y sus pretensiones de Guerras de las galaxias tienen a todo el planeta en Vilo hace tiempo?