AP

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el viernes la convocatoria de un grupo de militares venezolanos a la insurrección en los cuarteles, y criticó también al gobierno por su apatía para investigar la veintena de muertes en una protesta de la oposición en abril.

Dijo que si bien el llamado a la desobediencia civil es parte del ejercicio de la libertad de expresión, el de una convocatoria a la insurrección militar ``pone en riesgo la estabilidad de las instituciones´´.

El pronunciamiento figura en el comunicado que la CIDH emitió al término de su 116to periodo ordinario de sesiones.

No es una resolución derivada de un proceso que empieza rutinariamente con la denuncia de una parte interesada, sino ``un parecer´´ de la CIDH que puede pronunciarse libremente sobre cualquier acontecimiento regional, explicó su secretario ejecutivo Santiago Cantón.

El pronunciamiento figura en el numeral 22 del comunicado y dice: ``Cerca del final de su periodo de sesiones, la Comisión Interamericana tuvo noticia de la convocatoria de altos oficiales de las Fuerzas Armadas venezolanas a que sus compañeros de armas se rebelen contra el poder civil. Afortunadamente, ello no ha resultado en una alteración del orden institucional en ese país. Como en anteriores ocasiones, la CIDH reitera que es legítimo el ejercicio de la libertad de expresión, incluyendo el llamado a la desobediencia civil. Sin embargo, la convocatoria a los militares a que se insubordinen contra las autoridades civiles es ilegítima y pone en riesgo la estabilidad de las instituciones´´.

El pronunciamiento es coincidente con el emitido el martes por el secretario general de la Organización de los Estados Americanos César Gaviria, quien dijo que la convocatoria hecha ese día por varios militares ``quebranta la lealtad constitucional´´ que los oficiales le debían al presidente Hugo Chávez, quien ya había sido temporalmente depuesto el 11 de abril.

``La desobediencia civil es para nosotros una forma de libertad de expresión, la desobediencia militar es otra cosa´´, dijo Juan Méndez, presidente de la CIDH en una rueda de prensa que siguió a la difusión del comunicado en la sede de la OEA, de la cual la CIDH es una institución autónoma.

``La desobediencia militar es un acto de insubordinación a las autoridades constituidas y nosotros consideramos que ese es un riesgo serio a la estabilidad de las instituciones´´, declaró Méndez.

Frente a las peticiones de investigación formuladas por los familiares de los 19 fallecidos en las protestas callejeras del 11 al 14 de abril, dijo que los casos --dos de los cuales fueron sometidos ante la CIDH durante su periodo de sesiones-- ``están en proceso´´.

Pero explicó que la petición no implica la adopción por la CIDH de una posición sino que es apenas el inicio de un prolongado proceso, en el cual participa el estado denunciado y puede terminar en la formación ``en un caso´´ para entonces iniciar una investigación.

Recordó que en mayo, luego de una visita en pleno a Venezuela, la CIDH ``solicitó y recordó al gobierno venezolano su obligación de promover una investigación exhaustiva de esos hechos y promover el castigo de quienes resulten responsables´´.

``Por lo que sabemos hasta ahora, esas investigaciones no están siendo productivas´´, dijo Méndez.

Indicó que la iniciativa de crear también una comisión de la verdad ``está paralizada´´ en el Congreso venezolano.

``En general estamos preocupados porque no creemos que se ha investigado seriamente hasta ahora esos episodios´´, dijo.
--------------------------------------------------------------------------------
COMUNICACIÓN ALTERNATIVA es un grupo de ciudadanos organizados, que en del marco del más absoluto respeto a los valores y a los principios constitucionales, se expresa libremente y discute sobre la situación del país.