Junio 15, 2025
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14 de marzo del 2002
Un AWACS de la OTAN vigilará la Cumbre de la UE en Barcelona
a petición de España
España propone un banco de datos de la UE para controlar
a manifestantes violentos
Anarqlat
El proyecto relaciona las protestas con el 'entorno difuso' de las organizaciones
terroristas
El Gobierno español ha lanzado una polémica iniciativa
en la Unión Europea para crear un banco de información en el que
estén incluidos los jóvenes sospechosos de participar en actos
violentos durante las cumbres europeas como la prevista en Barcelona este fin
de semana. La propuesta, que relaciona esas protestas con actividades terroristas,
aboga por el intercambio de fichas o formularios sobre esos sospechosos, entre
los que figuran 'personas con antecedentes judiciales en el ámbito del
terrorismo' y otras que no tengan tales antecedentes. Francia ya ha expresado
su resistencia al plan.
España ha planteado el mes pasado ese proyecto al denominado Grupo de
Terrorismo, compuesto por responsables policiales antiterroristas de la UE,
y concretamente pide la adopción de una decisión del Consejo de
la Unión para crear 'un formulario tipo para el intercambio de información
sobre incidentes cometidos por grupos radicales violentos con grupos terroristas'.
En el documento se asegura que, 'durante la celebración de distintos
eventos y cumbres de la Unión Europea, se ha observado un aumento progresivo
de acciones violentas y de vandalismo criminal protagonizado por grupos radicales
extremistas que han ocasionado de forma clara situaciones de terror en la sociedad'.
'Estos actos vandálicos', agrega, 'han provocado notoria repercusión
en los medios de comunicación y alarma en el ánimo de los ciudadanos
de la Unión'.
A partir de esa afirmación, el informe señala que ese tipo de
hechos los protagoniza 'un entorno difuso que se presenta bajo la cobertura
de diversas pantallas sociales'. Y añade: 'Por entorno difuso entendemos
aquellas organizaciones que, aprovechando la situación de legalidad de
que disfrutan, realizan tareas auxiliares que coadyuvan al cumplimiento de los
objetivos propios de las organizaciones terroristas, ya reconocidas como tales
dentro del seno de la UE'.
Para el Gobierno español, la creación de ese 'formulario tipo',
que en definitiva daría lugar a un banco de datos aunque el término
no se cita en ningún momento, constituiría 'un instrumento muy
útil para la prevención, y en su caso persecución, de la
radicalidad juvenil urbana de corte violento, cada vez más manipulada
como un instrumento por las organizaciones terroristas para la consecución
de sus objetivos criminales'.
Si estas frases pueden resultar polémicas, aún es más la
siguiente: 'La información que se va a intercambiar será de las
personas con antecedentes judiciales en el ámbito del terrorismo, si
bien cualquier país, con arreglo a su legislación nacional, podría
efectuar intercambios de información aunque dichas personas carezcan
de tales requisitos'.
La única prevención figura en la frase siguiente: 'No se trata
de informaciones referidas a personas que ejercitan sus derechos constitucionales
de expresión y manifestación en estos eventos (...), sino de elementos
que se integran en grupos perfectamente organizados y dirigidos por organizaciones
terroristas, con el objetivo de conseguir sus propios fines de desestabilización
y propaganda'.
Tras estos comentarios, la propuesta española incluye un proyecto de
decisión del Consejo integrado por cuatro artículos en los que
se recogen las citadas ideas.
En el artículo segundo, indica que, cuando se refiere al intercambio
de personas que no tengan antecedentes 'judiciales', se trata de individuos
de los que 'se tenga conocimiento de su relación con dichas organizaciones
terroristas'.
La propuesta, presentada el pasado 13 de febrero, está siendo ahora analizada
por los representantes policiales de los Quince y, de seguir adelante, será
examinada después por los ministros del Interior de la Unión Europea.
El Mundo 13/03/02