Internacional

Acusa EU a la Unión Europea de estar jugando con "cartas falsas" en el diferendo sobre la CPI
"Postura inoportuna", exigir a países aspirantes a la UE apoyo total a ese tribunal: Powell

La Jornada

Washington, 16 de agosto. En la disputa por la nueva Corte Penal Internacional (CPI) y las reglas de excepción para Estados Unidos, Washington le recriminó a la Unión Europea (UE) estar jugando con "cartas falsas".
En un primer momento, algunos miembros de la UE alentaron a Estados Unidos a negociar acuerdos bilaterales para proteger a ciudadanos estadunidenses de ser sometidos a juicios por crímenes de guerra por parte de la CPI.
Pero ahora la Comisión Europea en Bruselas exige a los candidatos que quieren in-gresar al grupo de las 15 naciones un apoyo total al nuevo tribunal internacional con se-de en La Haya, Holanda.
El Departamento de Estado estadunidense calificó esta postura de "inadecuada" e "inoportuna", y señaló que atenta contra la política exterior de los estados soberanos.
El nuevo enfrentamiento demuestra claramente divergencias básicas en este tema, y que el compromiso alcanzado el mes an-terior para subsanar este conflicto sólo fue transitorio. En aquel momento, en vez de exigir una amnistía total para sus ciudadanos en la CPI, Estados Unidos se contentó con una inmunidad limitada de un año.
El embajador estadunidense ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), John Negroponte, habló por eso de un "primer paso" y anunció que su país intentaría lograr acuerdos bilaterales con otras naciones.
Los analistas señalan que el camino de excepción de Washington se contempla co-mo una limitación, aunque el portavoz del Departamento de Estado, Philip Reeker, dijera que "Estados Unidos quiere dejar en claro que no pretende desacreditar a la CPI como institución".
El funcionario afirmó que espera que la posición estadunidense se respete y se comprenda el temor de que se puedan armar procesos políticos contra sus ciudadanos.
Hasta ahora, solamente Rumania e Israel firmaron estos acuerdos, y hubo una negativa de Suiza y Noruega, entre otros.
Estados Unidos asegura que no perseguirá su causa de manera deshonesta. "No presionamos a ningún país para que firme este acuerdo", afirmó John Bolton, subsecretario de Estado.
Más gráfico en sus aseveraciones fue el secretario de Estado, Colin Powell, quien señaló: "No azotamos ni amenazamos a ninguno de nuestros amigos".
Por otro lado, y en una muestra más de desdén y aislamiento, el presidente George W. Bush no asistirá este mes a la llamada Cumbre de la Tierra, en Johannesburgo, y enviará a Powell al frente de la delegación.
Un funcionario que no fue identificado por Reuters, indicó que Bush, quien se en-cuentra de vacaciones en su rancho en Texas, no irá en parte porque planea hacer un importante viaje a Africa a principios del año próximo.
La Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible, que se realizará del 26 de agosto al 4 de septiembre en Johannesburgo, es considerada la reunión más grande que haya realizado la ONU, con la participación de unos 50 mil delegados, entre ellos más de cien jefes de Estado o de gobierno.
Su planeada ausencia provocó fuertes críticas de ecologistas y demócratas, que la describieron como señal de falta de liderazgo que podría resultar contraproducente si Bush quiere mantener una coalición antiterrorista y buscar respaldo para derrocar al presidente iraquí Saddam Hussein.
Sin embargo, conservadores estadunidenses que se oponen a los tratados u organizaciones ecologistas internacionales han alentado a Bush a mantenerse alejado de lo que consideran una plataforma para los defensores de una agenda antioccidental.
La ausencia de Bush representa otro re-troceso en política ambiental, tras su decisión el año pasado de rechazar el tratado de Kyoto contra el calentamiento global, dijeron los ecologistas.