|
14 de julio del 2002
Dios, el Capitalista
John Stanton y Wayne Madsen
Traducido para Rebelión por Tatiana de la O
Dios existe, y es una empresa.
La evidencia es irrefutable. Sin importar a través de cuál subsidiaria
– Islam, Catolicismo, Evangelismo Cristiano –, está claro que Dios cree
en un mundo regido por el capitalismo, y demanda a sus acólitos una saludable
cartera de inversiones en acciones y fondos mutuales, y una incuestionable fe
en los proveedores de la avaricia y la corrupción. Dios es extravagante
en cuanto a gusto, paternal en su visión del mundo y valora la publicidad
que logra a través de la moneda de EE.UU. y en los recitados diarios
de la Promesa de Lealtad a EE.UU. Está encantado con la construcción
de casas de culto palaciegas alrededor de todo el mundo, a expensas de los cientos
de millones de personas empobrecidas que luchan por obtener comida, vestimenta
y abrigo. ¿Hay alguna duda de que Dios favorece a los impíos ricos y
poderosos: los Bush, los Bin Laden, los Murdoch y Alsaud, los Rumsfeld y Cheney?
Dios no tiene problemas con la desigualdad de ingresos y la competencia brutal
que representa el capitalismo. Es más, la estimula y la aplaude. Su amado
imbécil, el presidente de EE.UU. George Bush II, habló recientemente
como si fuera Dios, cuando dijo que todos los asuntos políticos vienen
de Él y deberíamos preguntarle su opinión en la elección
de jueces para las cortes de EE.UU. Pero hay más. El presidente se debe
a Dios porque él lo ayudó a convertirse en un verdadero capitalista,
haciéndolo millonario.
¿Con tantos pobres, tantos hogares con ingresos medios luchando para llegar
a fin de mes, puede haber alguna duda de cuáles son las prioridades de
Dios? ¿Es acaso raro que esté trabajando a través de sus corporaciones,
presionando al Congreso de EE.UU. para obtener más rebajas de impuestos,
manipulando los mercados financieros del mundo, cambiando las leyes de impuestos
en todos lados para favorecer a sus ricos acólitos, y asegurándose
de que los ejecutivos de las empresas gocen de inmunidad ante la persecución?
Santas Inversiones
En los Ministerios Financieros de Crown, se enseñan a los practicantes
los "Principios Financieros de Dios". Según Crown, Dios sugiere que la
administración financiera disciplinada se logra invirtiendo de acuerdo
al asesoramiento financiero de la Biblia. En esto no hay modelos econométricos.
"Es la bendición del Señor la que nos hace ricos, y Él
no añade pesar a ello" (Proverbios, 10:22). Con este consejo, Crown da
a los líderes religiosos y a sus rebaños las herramientas necesarias
para invertir y administrar el dinero para vivir alegremente, y, por supuesto,
convertir los ingresos en donaciones que vuelvan a la burocracia de Dios.
Dios invierte a través de sus numerosas subsidiarias, ganando dinero
con todo, incluyendo prótesis de cadera, videojuegos, refrescos, ingeniería
genética y contrataciones de defensa. Además, en los Fondos Cristianos
de Responsabilidad los administradores de inversiones de Dios son bastante exigentes
en cuanto a que los "hacedores del mal" puedan meter mano al dinero divino.
Los cristianos controlan sus fondos, y evitan invertir en acciones o bonos de
compañías envueltas en aborto, alcohol, juego, pornografía
e industrias del tabaco. Alegan ser el único fondo mutual con esos filtros.
¡Pero hay más!
El Plan Timothy va un paso más allá del ofrecimiento financiero
cristiano y asegura que es "una familia de fondos mutuales que ofrece a los
individuos, como usted mismo, una elección bíblica a la hora de
invertir. Si está preocupado por los temas morales (aborto, pornografía,
entretenimiento que perjudique a la familia, estilos de vida fuera del matrimonio
o entre personas del mismo sexo, alcohol, tabaco y apuestas) que están
destruyendo a los niños y las familias, usted ha venido al lugar indicado.
Curiosamente, uno de los portfolios de Timothy incluye inversiones en BioGen,
una compañía que desarrolla drogas a través de ingeniería
genética, y Electronic Artas, proveedores de violentos viodeojuegos.
También está KPMG Consulting en la mezcla, la firma con muchos
contratos de defensa y responsable de la auditoría falsa de Xerox.
BussinessWeek informa que KPMG se encuentra bajo investigación
en el SEC (Securities and Exchange Commission, Comisión de cambio y seguridad
de las acciones de EE.UU.) El 24 de abril, la filial alemana de KPMG tuvo que
rechazar los informes financieros de su antiguo cliente Comroad, una pequeña
compañía de software cercana a Munich. La vergonzosa razón:
El 23 de abril un nuevo auditor encontró que el 97% de las ventas del
año 2000 venían de una compañía inexistente. El
anterior director de Comroad, Bodo A. Schnabel, está en la cárcel
esperando un juicio por fraude. En un intento por reducir el daño, KPMG
ha informado que reauditará a los 35 clientes que operan en el mercado
de alta tecnología Neuer Market de Frankfurt. Nada como un viejo
fraude cristiano. Pero es el regreso lo que importa, sin importar que reacomode
el código genético (por supuesto que a Dios ya no le molesta)
o las relaciones con la ilegalidad que puedan tener las inversiones de Timothy.
¡Muéstrenme el dinero!
"En el Nombre de Alá, el Más Lleno de Gracia, el Más
Piadoso" se lee en el cartel del Banco de Desarrollo Islámico en Jeddah,
Arabia Saudita. Fundado en 1975, su propósito es promover el "desarrollo
económico y el progreso social de los países miembros y de las
comunidades musulmanas individualmente así como conjuntamente de acuerdo
a los principios de la Sharia, la Ley Islámica". El banco ayudó
a lograr la atención de Wall Street y en consecuencia, en 1999 se creó
el Índice Dow Jones del Mercado Islámico que contiene acciones
de 1862 empresas que obedecen la Sharia, de 34 países con una capitalización
de mercado de 11 billones de dólares estadounidenses. El Índice
Islámico de Mercado FTSE contiene 660 compañías que cumplen
con la Sharia que incluye notables como Coca-Cola y Microsoft.
El asesoramiento financiero islámico, como su contraparte cristiana de
Crown, está adornado con citas de trabajos "sagrados" que recuerdan al
inversor o prestatario de la gravedad de invertir con Dios o recibir préstamos
de él. "Teme el día en que serás retornado a Alá,
cuando a todos se pagará, completamente lo que han ganado. Y no serán
perjudicados." Esta admonición aparece en un portal de actividades bancarias
islámicas después de una discusión sobre financiamiento
y préstamos. Según el Corán y la Biblia, jugar con el dinero
de Dios sin lograr un buen resultado puede acarrearnos muchas preocupaciones,
y ocasionar problemas el día del juicio final.
Por supuesto que ninguna visión sobre las finanzas divinas estaría
completa si no mencionamos a la Iglesia Católica. El Catholic Values
Investment Trust (Trust de Inversiones Valores Católicos) coloca
el dinero de Dios en aproximadamente 100 paquetes de acciones de primer orden
pero el dinero sólo puede invertirse después de que el Magisterio
de la Iglesia y la Junta de Asesores del Trust revisa los paquetes de acciones
para asegurarse de que las compañías representadas por ellos adhieren
a las enseñanzas del Señor. La Junta tiene como miembros a Margaret
Heckler, una ex- congresista, Embajadora y burócrata del gobierno de
EE.UU., y dos ex-embajadores ante la Santa Sede de Roma. Las inversiones incluyen
a las contratistas de defensa General Electric e ITT Industries, Alcoa Aluminum,
American Express, Coca-Cola, Pepsi y conglomerados de empresas de crudo y energía.
Con 1000 dólares estadounidenses puedes entrar en los fondos de alto
rendimiento del Catholic Trust.
En las inmortales palabras del Pastor Simon de Cheltenham, Inglaterra, "Vemos
que Dios, lejos de oponerse al dinero, da poder para lograr la riqueza. El poder
de lograr la riqueza se consigue con Dios. Así que ¿qué debemos
hacer? Debemos recordar a Dios y reconocer Su plan para la riqueza en las manos
de los hombres y mujeres piadosos".
Así que sal y consigue al mejor tirano capitalista que encuentres. Y
recuerda, cuando pongas tu alma en subastas en E-bay, regatear mucho con Dios.
Después de todo, él también es capitalista.
9 de julio de 2002
John Stanton es un escritor instalado en Virginia que escribe sobre asuntos
de seguridad nacional, y Wayne Madsen es un periodista de investigación
de Washington que escribe y comenta frecuentemente sobre libertades civiles
y temas de derechos humanos. Pueden ser contactados en: WMadsen777@aol.com