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1 de mayo del 2002
Por otro 1º de Mayo
Ultimo discurso de Vanzetti en la corte
SERPAJ Uruguay
"He estado hablando mucho de mi mismo y ni siquiera había mencionado
a Sacco. Sacco también es un trabajador, un competente trabajador desde
su niñez, amante del trabajo (...).
Sacco es todo corazón, todo fe, todo carácter, todo un hombre;
un hombre amante de la Naturaleza y de la Humanidad; un hombre que lo dio todo,
sacrificó todo por la causa de la libertad y su amor a los hombres: su
esposa, sus hijos, su persona y su vida.
El y yo jamás nos hemos llevado un bocado de pan a la boca, desde que
somos niños hasta ahora, que no hayamos ganado con el sudor de la frente.
Jamás...
Ah, sí, yo puedo ser más listo, como alguien a dicho; yo tengo
más labia que él, pero muchas, muchas veces, oyendo su voz sincera
en la que resuena una fe sublime, considerando su sacrificio supremo, recordando
su heroísmo, yo me sentido pequeño en presencia de su grandeza
y me he visto obligado a repeler las lágrimas de mis ojos, y apretarme
el corazón, (...) para no llorar delante de él: este hombre al
que han llamado ladrón y asesino y condenado a muerte. Pero el nombre
de Sacco vivirá en los corazones del pueblo y en su gratitud cuando los
huesos (...)de todos nosotros hayan sido dispersados por el tiempo; cuando vuestro
nombre, el suyo, vuestras leyes, instituciones , y vuestro falso dios no sean
sino un borroso recuerdo de un pasado maldito en el que el hombre era un lobo
para el hombre (...).
Si no hubiera sido por esto yo hubiera podido vivir mi vida charlando en las
esquinas y burlándome de la gente. Hubiera muerto olvidado, desconocido,
fracasado.
Esta ha sido nuestra carrera, nuestro triunfo. Jamás en toda nuestra
vida hubiéramos podido hacer tanto por la tolerancia , por la justicia,
porque el hombre entienda al hombre, como ahora lo estamos haciendo por accidente.
Nuestras palabras, nuestras vidas, nuestros dolores -¡nada!-.
La pérdida de nuestras vidas -la vida de una zapatero y un pobre vendedor
de pescado- ¡todo!.
Ese momento final es de nosotros, esa agonía es nuestro triunfo."