ESPAÑA
LA VOZ DE GALICIA: 13/02/02
TRES DECADAS BUSCANDO NUEVE VIDAS LA HIJA DE GALLEGOS ELSA SANCHEZ CONTARA A GARZON LA PERDIDA DE SU FAMILIA DURANTE LA DICTADURA ARGENTINA

Benito Ordoñez
«De pronto nevo sobre Buenos Aires. Pero no una nevada turistica como la de los años 30. Estos eran copos raros, como fluorescentes». Este fragmento de El Eternauta, obra del escritor argentino de ascendencia alemana Hector German Oesterheld parecia anticipar las «fuertes heladas» que asolarian el pais sudamericano durante la segunda mitad del siglo veinte. Una de ellas fue la lluvia fria de secuestros que sumio al pais en el miedo durante la dictadura militar entre 1973 y 1986. Ahora el miedo en Argentina es otro, pero aquel todavia no ha desaparecido, aunque algunos intenten esconderlo bajo la alfombra.
Elsa Sanchez de Oesterheld, hija de un gallego de la aldea de Loño, cerca de Vila de Cruces, ha vuelto a España dispuesta a recordar. La esposa de Hector German Oesterheld prestara su testimonio al juez Baltasar Garzon en el proceso por los desaparecidos de la dictadura argentina. Probablemente, segun explico ella misma, testificara a finales de semana, un cuarto de siglo despues de haber perdido a su marido, a sus cuatro hijas -dos de ellas embarazadas- y a sus dos yernos. «Estela, Diana, Beatriz y Marina, mis hijas, al igual que mi esposo lucharon en pro de gobiernos populares para Argentina, pero en los años setenta a todos los que tenian ideas contrarias al regimen los mataban», cuenta.

LOS AÑOS TERRIBLES

Diana tenia 22 años cuando desaparecio en Tucuman en 1976 con un niño en el vientre. La vieron por ultima vez en la jefatura de policia de Tucuman. De Estela no se volvio a saber nada mas desde 1977. Tenia 25 años. Su hermana Marina, de veinte, fue secuestrada ese mismo año, igual que Beatriz y que su padre Hector. A los dos yernos de Elsa tambien los ocultaron a la fuerza. La historia de Elsa y la de sus nueve desaparecidos -ella esta convencida de que sus dos nietos nacieron en cautiverio- es una mas dentro de la larga lista de personas -30.000, segun la Asociacion Argentina Pro Derechos Humanos, y 9.000, segun las cifras oficiales- que se encargo de tapar la dictadura argentina. La memoria de Elsa no quiso revolver el pasado hasta hace un año, cuando en un viaje a Alemania tuvo un primer encuentro con el abogado Carlos Slepoi, presidente de la Asociacion Argentina pro Derechos Humanos, quien la convencio para declarar.
A Elsa, que pertenece a las Abuelas de la Plaza de Mayo, solo le queda su familia gallega. «En Argentina ya no tengo a nadie», explica. Ella hubiera querido viajar antes a España para intentar hacer justicia, pero la situacion que atraviesa el pais fue su mayor obstaculo. Aprovechando la invitacion de una organizacion cultural italiana para hablar de la obra de su marido, hizo una escapada a Madrid para testificar y seguir esperando. Maria Cedron (A Coruña)

Envia: Beatriz Roux