Argentina: la izquierda reclama la caducidad de los mandatos
Rodríguez Saá gana espacio y ya está
a la par de Elisa Carrió
El progresismo y la izquierda se aprestan a unir esfuerzos con organizaciones
sociales para modificar radicalmente las reglas impuestas por el gobierno para
las elecciones del 30 de marzo próximo.
ISIDORO GILBERT /La Republica
Por lo pronto el dirigente de Autodeterminación y Libertad y la referente
máxima de Alternativa Para una República de Iguales (ARI), Elisa
Carrió, insistirán en reclamar juntos que caduquen los mandatos
de todos los legisladores y la convocatoria de una Asamblea Constituyente para
ese cometido así como modificar radicalmente la actual composición
de la Suprema Corte de Justicia.
Son estos reclamos que se han escuchado desde diciembre en adelante, durante
las jornadas que obligaron a Fernando de la Rúa a dimitir, pero que poco
a poco se han ido apagando ante la indiferencia de los dos grandes partidos,
el Justicialista y el Radical, que controlan el Parlamento.
Zamora, Carrió, la Central de Trabajadores (CTA), organizaciones de piqueteros,
partidos de izquierda, asambleas barriales, y otros a su modo coinciden en que
en una renovación en la que no se modifique totalmente la composición
del Parlamento y de la Justicia dejaría escaso margen de maniobra al
futuro gobierno y mucho más si éste es encabezado por uno de estos
dos referentes con excelente posición en las encuestas.
Organizar el "que se vayan todos"
Por ahora ni Carrió ni Zamora han avanzado en postulaciones de candidatos,
lo que da un margen de acción más amplio.
La líder del ARI ya integra con el gobernador de Santa Cruz, el peronista
Néstor Kirchner, y con el jefe del gobierno porteño, el frentista
Aníbal Ibarra, un espacio para bregar por lo que popularmente se dice:
"que se vayan todos".
Zamora no participó de ese acuerdo, que de todos modos retoma para ampliarlo
a partidos de izquierda y organizaciones populares y sindicales.
El gobierno fijó el 30 de marzo como fecha para elegir únicamente
al binomio presidencial, cuyas candidaturas se dirimen (en aquellos partidos
con propuestas varias) en internas abiertas para el 24 de noviembre.
Pero las otras renovaciones, la mitad de la Cámara baja y un tercio del
Senado nacional, se resolverán según lo disponga cada provincia.
De hecho, sostienen los que impugna este criterio, solamente se elegirá
al Presidente y su acompañante y lo demás queda como está.
Debe tenerse en cuenta que lo que se renueva recién llegará al
Parlamento el 10 de diciembre del año próximo, siete meses clave.
Las nuevas autoridades asumirán el 25 de mayo del 2003.
"La convocatoria de Duhalde es que se queden todos", resume Zamora su reclamo
de unidad de acción, una novedad. ¿Lleva esta iniciativa a abrir paso
a una convergencia electoral?
Nadie se anima a darle una respuesta. ¿Abre el camino para la abstención
si "todo sigue igual"? No parece. Aunque hay algunos sectores que creen que
no quedaría otra alternativa.
¿Carrió o Rodríguez Saá?
¿Qué dicen los números por ahora? Según las encuestas la
opción no se da entre Carlos Menem con Carrió sino entre la diputada
nacional con el precandidato presidencial justicialista Adolfo Rodríguez
Saá que experimentó un sensible ascenso en intención de
voto y quedó cabeza a cabeza con ella.
Pero, según la encuestadora Research International-Analogías,
Carrió triunfaría en los restantes escenarios ante otros candidatos
del justicialismo, como Carlos Menem y José Manuel de la Sota.
Medidos todos los candidatos, Carrió saca una mínima ventaja sobre
el fugaz ex presidente de 15,3 a 15,2%.
Los siguen Menem, con 13 puntos; el gobernador peronista de Santa Cruz, Néstor
Kirchner, con 9,3, y el socialista libertario Luis Zamora, con 9,2.
Ahora bien si Rodríguez Saá fuese el candidato del PJ triunfaría
sobre Carrió por 24,5 contra 19,9%.
Si fuera Menem, Carrió vencería por 21,2 a 14,9%; si fuera De
la Sota, la postulante de ARI obtendría 22%, Zamora 12,3 y el gobernador
de Córdoba, 10,5 %.
En cambio, si Rodríguez Saá se postulara por fuera del PJ, como
se especula, la diferencia con Carrió disminuye: él obtendría
18,5% y ella 17,9; Menem, 13,6 y Zamora 10,5%.
Si el puntano llega a la misma conclusión intentará ir por fuera
del PJ, con el argumento de que Menem no renuncia a la jefatura (nominal) de
ese partido o que un congreso no define previamente el programa que deberá
defender el candidato.
Por caso: Menem le dijo al chileno "El Mercurio" que sigue convencido en llevar
adelante la dolarización mediante un acuerdo con los EEUU, postura que
rechaza el resto de los pretendientes del peronismo.
¿Y el centro-derecha o derecha a secas? Para Analogías, el ex radical
Ricardo López Murphy aparece como el mejor candidato, con un 4,5% en
la medición general, que crece por encima del 6% según el escenario.
Uno de los posibles candidatos de la Unión Cívica Radical, Rodolfo
Terragno, cosecha apenas el 2% de la intención del voto.
Pero todavía hay un largo camino a recorrer, como se ha visto