EL 85 POR CIENTO DE LA GENTE
DEL NORESTE ARGENTINO SE ALIMENTA MAL.
El estudio fue realizado en Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones
a un total de 1.164 personas. El 85 por ciento de la población que reside
en las provincias de Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones, en el noreste argentino,
se alimenta mal, de acuerdo a un estudio realizado por la carrera de nutrición
de la Facultad de Medicina de la Universidad del Nordeste. El informe tomó
al azar un total de 1.164 personas de las cuatro provincias mencionadas y concluyó
que el 85 por ciento no consume alimentos con los nutrientes básicos
indispensables, pero lo más notable es que los encuestados provienen
tanto de niveles de bajo poder adquisitivo como de medio y alto. El estudio
fue realizado por estudiantes de la carrera de nutrición, una especialidad
de postgrado de la Universidad del Nordeste y a la que asisten profesionales
de la salud de las provincias de Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones. Según
la investigación de los especialistas, la grave deficiencia alimentaria
detectada se debería a dos grandes factores: el económico-social
y el educativo.
El trabajo, denominado "Consumo de Alimentos por Tipo en el Nordeste Argentino"
fue presentado en el XIV Congreso Argentino de Nutrición, que concluyó
el miércoles pasado en Buenos Aires.
"Es comprensible que mucha gente, por no disponer de dinero, no pueda consumir
carnes, hortalizas, frutas y leches, lo que conduce a que el cuerpo no reciba
y no tenga adecuadas cantidades de calcio, hierro, vitaminas y otros minerales",
destaca el estudio. "Pero la gente de buen nivel económico tampoco come
bien", destaca el estudio, pese a que existe un preconcepto de que las personas
mal alimentadas provienen de los sectores de más bajo poder adquisitivo
de la población. En los sectores de mayor poder adquisitivo existe un
notable incremento de las personas mal alimentadas que están acostumbradas
a "incorporar muchas grasas y alimentos dulces". "Estas personas también
presentan deficientes consumos de los alimentos más necesarios como lácteos
y hortalizas", sostienen los especialistas. El equipo de trabajo que encabezó
el profesor Claudio Szymula, concluyó que "esta grave problemática
nutricional se puede intentar prevenir con una masiva educación alimentaria,
pleno empleo y una autoproducción de alimentos". El informe advierte
que estas deficiencias nutricionales "pueden llevar en el futuro a enfermedades
como el raquitismo, la osteoporosis, las anemias y las alteraciones visuales",
entre otras lesiones. Sugiere como una alternativa válida "educar a la
gente para cambiar sus hábitos alimenticios y centralizar el consumo
en aquellos que contengan nutrientes básicos como leche, carnes, hortalizas
verdes y de color, frutas y aceite".-
XXX Néstor Miguel Gorojovsky
nestorgoro@fibertel.com.ar