Hacia dónde van las Asambleas Populares.
Esto es un análisis de las perspectivas a futuro de las
Asambleas Populares. Llego a estas conclusiones a través de la experiencia
vivida en la Asamblea de Martínez, en la Interbarrial de Parque Centenario
y las muchas discusiones y charlas con otras personas que también intentan
encontrar un camino para las Asambleas. Estas 8 páginas pretenden ser
el inicio para el debate y no deben ser tomadas de ninguna manera como verdades
absolutas.
A partir de las primeras críticas a este documento, debo aclarar dos cosas fundamentales: Primero: de ninguna manera se pretende forzar o direccionar al Movimiento Asambleario, para que tome uno u otro camino. El desarrollo futuro de este Movimiento de Asambleas es una incógnita y depende de demasiados factores objetivos y subjetivos como para preverse por adelantado, pero creo que es importante fomentar este tipo de documentos y comenzar el debate sobre el futuro, para empezar a tener un poco más claro hacia dónde queremos ir. Por otro lado el hecho que yo proponga algunos caminos posibles no significa absolutamente que sean los únicos, de hecho estoy seguro que hay infinitos caminos posibles, que seguramente irán apareciendo en la imaginación de cada uno y en el debate.
Segundo: Debo aclarar, para evitar malos entendidos, que este es un documento con una mirada subjetiva, donde doy mi punto de vista. Si bien todo esto nace de un análisis de los hechos ocurridos y de conversaciones con otra gente, no dejo de dar mi opinión sobre lo que planteo, dando por sentado que no es la única que vale e intentando fomentar con esto el debate de ideas.
PREMISAS BASICAS.
Las Asambleas son una organización política, no partidaria pero política. Son una organización desorganizada y anárquica, sin líderes, sin objetivos concretos, sin conducción y sin un camino determinado a seguir. Las Asambleas se diferencian de otras organizaciones justamente por el hecho que son totalmente amplias y cualquiera puede participar, no tienen una forma definida.
Por consiguiente las Asambleas, tendrán hoy una forma, mañana otra, dependiendo de su única estructura molecular: Los ciudadanos-vecinos-personas que participamos en ella. Las Asambleas tomarán los caminos que la mayoría de las personas que participen en ellas decidan, siendo fundamental la participación para poder opinar y debatir y hacer que las Asambleas tomen el camino que a cada ciudadano le parezca más justo.
En las Asambleas es la participación lo que garantiza que las ideas de los "militantes asambleístas" construyan un camino para que la Asamblea transite por él, creando poder de abajo hacia arriba y no al revés.
Las Asambleas tienen y deben resguardar como eje fundamental de su funcionamiento la Democracia Directa, esto significa fomentar la rotación de los representantes, la misma posibilidad para todos de expresar su opinión sin ningún tipo de discriminación, la libertad de expresar su aprobación o reprobación de las propuestas o incluso poder abstenerse si no se está del todo seguro o por convicción propia.
Las Asambleas pueden realizar muchos proyectos exitosos a nivel barrial, pero si estos no están integrados en una lucha y debate más amplios, sobre la realidad Provincial y principalmente Nacional, estos proyectos no servirán de nada.
Rescato como premisas básicas, antes de ponernos a discutir sobre el futuro, que las Asambleas deben ser libres, amplias, democráticas, no asistencialistas, participativas, soberanas con respecto a sus decisiones, a nivel municipal, provincial y nacional. Y sobre todo que el camino que transitarán en el futuro lo construiremos entre todos, pues no existe estructura superior que nos marque el rumbo, solo las Asambleas, o sea los que participamos en ellas, decidiremos entre todos el sendero que se ha de seguir.
LAS ASAMBLEAS Y EL PODER.
Hay una pregunta que debemos empezar a preguntarnos todos y es si las Asambleas Populares tienen realmente Poder. Poder entendido como la posibilidad de cambiar la realidad. Yo sinceramente creo que no, creo que las Asambleas Populares, que la Interbarrial, no tienen poder suficiente para cambiar el orden establecido de las cosas.
Pero sí creo que lo puede conseguir, que este movimiento puede ir generando un Poder Popular que le permita en el futuro dar vuelta esta situación.
Pero antes que nada las Asambleas deben preguntarse si quieren construir Poder, si quieren cambiar el orden establecido de las cosas, qué camino quieren transitar.
LA PARTICIPACION Y LA CONCIENCIA.
Uno de los objetivos básicos de las Asambleas debería ser el fomentar la mayor participación de la gente, que la gente se vaya acercando y tome conciencia de que no puede esperar más que sus "representantes" gobiernen para el pueblo, sino que cada persona debe participar activamente para dejar de ser espectador y ser finalmente protagonista de su propio destino. Esto haría que cada persona que se suma a las Asambleas, por un lado participe activamente en la toma de decisiones de la Asamblea aportando su esfuerzo y su voluntad activa y por otro vaya tomando conciencia interna que la única salida que queda, y la mejor, es la de la Democracia Directa, participativa y activa en la vida política de una nación. Por lo tanto nos encontramos con una participación activa y con una toma de conciencia, dos cosas fundamentales que van de la mano, una externa, hacia los demás y otra interna, hacia uno mismo.
EL FUTURO DE LAS ASAMBLEAS POPULARES.
Después de lo que acabo de escribir voy a tratar de delinear algunos esbozos sobre cómo veo el futuro de las Asambleas Populares, basándome en lo que me rebota en la cabeza desde hace mucho tiempo y lo que pude conversar con muchos compañeros de "militancia asamblearia".
Una de las cosas que por lo visto preocupa a varios es el tema del futuro Político de las Asambleas. Hay en el ambiente, se respira pero en cualquier momento se hará explícito, de darle respuesta al interrogante del futuro, cuál es el camino que debemos inventar para la construcción de un verdadero Poder... o mejor aún Contra-poder.
TRES MODELOS TRES.
Creo que hay tres modelos que pueden servir como base para explicar en palabras lo que tengo en la cabeza. Los voy a denominar de la siguiente manera: "Asamblea en estado puro", "Estado paralelo" y "Movimiento Político de Asambleas Populares". Les pido por favor que tomen estos nombres sólo como ejemplo, ya que lo verdaderamente importante es el contenido de cada uno de ellos.
Asamblea en estado puro
Desde que se formaron, las Asambleas funcionan de una manera totalmente democrática y anárquica, cada una de ellas tiene un funcionamiento que se amolda a cada realidad social de cada barrio. El hecho concreto es que cada Asamblea funciona en forma autónoma y con sus propios proyectos, a veces se realizan proyectos en común con otras Asambleas. El rol de Parque Centenario, desde el inicio, es el de funcionar como un punto de encuentro entre todas las Asambleas y donde se comentan proyectos y se deciden planes de acción concretos en conjunto. En fin, la Interbarrial es el punto de comunión entre todas las Asambleas y donde desde hace un tiempo se está tratando de hacer el funcionamiento mucho más organizado.
Pero, las Asambleas funcionando de la manera como lo hacen hasta ahora, con sus múltiples proyectos, sus múltiples planes de acción, sus múltiples comisiones, no lograrán nunca, a mi entender, construir un Poder concreto, carecerán de las herramientas que les permitan cambiar el orden establecido de las cosas, los que gobiernan no tendrán nunca en cuenta la fuerza de las Asambleas pues no le contenderán el Poder que ellos detentan.
Se podrán realizar con éxito miles de proyectos, pero no serán más que paliativos que solucionan, tal vez, lo inmediato, pero no darán una solución global a los problemas graves y de fondo de la Argentina.
El Poder lo seguirán teniendo los mismos de siempre y seguirán condenando al pueblo a la terrible realidad social en la que está viviendo, haciéndola cada día más desgarradora.
Con respecto a esta forma organizativa en Estado Puro de las Asambleas existe un punto a favor y es justamente que no es importante, fijar o armar o plasmar un Programa de las Asambleas, ya que dicho programa sirve solo si se pretende tomar el Poder, de otra manera solo sirve para desunir ideológicamente.
Este es un tema de discusión, o sea si es necesario un programa más allá del camino que tomen las Asambleas. Yo por supuesto doy mi punto de vista, que puede no ser compartido por la mayoría. Para hacer un resumen de lo que para mí es uno de los modelos que pueden tomar las Asambleas, el modelo de Asamblea en estado puro significa que las Asambleas sigan funcionando como hasta ahora, con todos los proyectos que salen de ellas, pero hay que ser conscientes de las ventajas y desventajas que esto tiene:
No hay lucha por el Poder, o por lo menos por el Poder real.
Hay más posibilidades de concretar los proyectos concretos, como huertas comunitarias, plan de tarifas sociales en los servicios, escraches a bancos y supermercados, cacerolazos, etc, boletines, prensa, actividades culturales, y todas las actividades de diverso género que salga de las Asambleas y se realicen en forma aislada o en conjunto con otras Asambleas.
Las Asambleas se convertirán en un organismo fuerte de control y de presión, pero sus controles y sus presiones solo serán tomadas en cuenta si son suficientemente potentes y si les es funcional a los políticos de turno.
Será más amplia la participación de la gente, teniendo en cuenta que se sumarán a un "movimiento" que no tiene una identidad política clara y asumida y está abierta a gente de cualquier ideología.
Al no tener una identidad política clara, las Asambleas irán hacia donde vayan los asambleístas, lo que no quiere decir que irán siempre hacia la izquierda, muy posiblemente se estanquen en proyectos muy productivos y muy auspiciosos para la comunidad, pero que no cambiarán la realidad social, solo la harán un poco menos mala (por las dudas aclaro que no veo nada de malo en esto, pero es parte de la elección).
En fin, las Asambleas pueden decidir tomar el camino de quedarse en el estado puro en el que están, teniendo claro qué es lo que ganan y qué es lo que pierden.
Yo doy por supuesto mi propio punto de vista y realmente siento, por la experiencia vivida en estos meses, que si las Asambleas toman este camino, tenderán poco a poco a desaparecer. Muchas Asambleas se disolverán y quedarán las que puedan haber tenido entre sus filas mucha gente comprometida a concretar proyectos que por un lado sean útiles a la sociedad y por el otro funcionen para ampliar la participación popular en la Asamblea.
Estado paralelo
Esto es sencillamente lo siguiente: Crear un ámbito de discusión y de intercambio donde simbólicamente se designe un Congreso y un Presidente "paralelos", elegidos entre la gente de las distintas Asambleas, que propongan y lleven a cabo políticas de Estado que contribuyan a formar Contra-Poder (con una nueva concepción de la política, de la economía, de la cultura, de la educación, de la salud, etc.). En síntesis, otro modelo de Estado, más transparente y popular.
Esta denominación de Estado Paralelo sirve solo para dar una idea de lo que podría pasar si efectivamente las Asambleas decidieran dar un salto cualitativo en sentido funcional y organizativo, pero no con fines de luchar por el Poder, sino con fines de dar "el ejemplo" a la sociedad de que otro modo de hacer política es posible, de servir como "símbolo" de la nueva forma de hacer política y de hacer ver un nuevo camino y que hay posibilidades de organizar el Estado y la política de otra manera.
Un Estado Paralelo que dé el ejemplo a la sociedad civil que es posible gobernar desde, a través y para el pueblo y que también es posible hacerle frente, oponer resistencia a las decisiones que no representen a la mayoría del pueblo y se quieran imponer desde arriba.
Recordemos que hablo de un Estado que funcione en forma paralela, en forma incluso simbólica en muchos casos.
Crear un Estado Paralelo es un camino bastante difícil, dado que es sacarse la idea de este Estado que tenemos en la cabeza y pensar desde el inicio una nueva forma de Estado, que no funcione como factor de dominación, sino de concreción de la voluntad popular y por lo tanto de felicidad para la mayoría de la gente.
Por supuesto que este camino del Estado Paralelo para las Asambleas, tiene también sus ventajas y desventajas:
No existe lucha por el Poder real, justamente porque se trata de crear algo paralelo que tratará de escapar de las garras del Estado Nacional.
Habrá más posibilidades de concretar proyectos, pues se tendrá una meta en común y por lo tanto se unirán las fuerzas.
Este Estado Paralelo podría convertirse con el tiempo en un organismo bastante fuerte de control y de presión con respecto al Estado Nacional, pero sus controles y sus presiones solo serán tomados en cuenta si son suficientemente potentes.
Hará falta un Programa de las Asambleas, un lineamiento general de acuerdo con algunos puntos básicos, ya que es imposible partir del concepto que cada Asamblea tenga sus propios "principios". Deben ser por lo menos 10 puntos concretos en los que todas las Asambleas estén de acuerdo.
El Estado Paralelo y por ende las Asambleas que lo conformen, tendrán a partir del Programa una identidad ideológica clara y determinada, por lo que la sociedad podrá ver en ellas un mensaje claro y un rumbo determinado.
El Estado Paralelo, al no querer ocupar el Poder del Estado Nacional, no estará sujeto a sus reglas y habrá muchísimas menos posibilidades de corrupción, pues si un representante no hace lo que le mandó su Asamblea, será removido sin problemas. Y al ser rotativo el mandato, es mucho menos la posibilidad de acumulación de poder.
Será imposible para el Estado Paralelo cortar totalmente relaciones con el Estado Nacional, pues la mayoría de sus ramas productivas y sus canales de "ingreso" están sujetos a éste último. El desafío sería entonces justamente ese, buscar los medios para estar lo más aislados posible del Poder imperante, en todos los sentidos. Esto último representa el espíritu del Estado Paralelo.
Es evidente que políticamente lo planteado arriba es utópico. En este sentido se puede decir que se han hecho avances en la Interbarrial, donde, si la miramos desde esta concepción, podemos ver que está tratando de organizarse para poder llegar a ser un órgano mucho mayor que la suma de las partes que la componen.
Para concluir con la explicación de este modelo de Estado Paralelo que pueden tomar las Asambleas, voy a dar mi opinión personal, que por supuesto, como todo lo escrito, tiene como fin la discusión y el debate, no pretende ser para nada verdad-absoluta.
Creo que el Estado Paralelo es un modelo utópico, muy difícil de concretar. Pero creo que es posible que teniendo como meta esta alternativa, las Asambleas se empiecen a organizar y a encontrar finalmente sus puntos de acuerdo, siendo esto un camino hacia la lucha por el Poder real. Creo posible que las Asambleas se organicen de tal modo y aceiten sus engranajes y concentren toda la energía en hacer lo que para mí es el salto cualitativo más importante, hacia el que deberían ir todas las Asambleas, o sea hacia la conformación de un compacto y masivo Movimiento Político.
MOVIMIENTO POLÍTICO DE ASAMBLEAS POPULARES.
(o pónganle el nombre que quieran)
Premisa básica de mi postura.
Todo lo escrito y lo que pasaré a plasmar sobre el papel ahora, tiene un origen determinado, una concepción de lo ocurrido el 19 y 20 de diciembre de 2001, una opinión personal de esos acontecimientos y un análisis de lo que a lo mejor, digo "a lo mejor" porque no soy mago, quiere la mayoría del pueblo Argentino. Voy a exponer lo que creo que es la premisa básica que me hace pensar que un Movimiento Político de Asambleas es posible y les diría casi importantísimo para el futuro de esta nueva forma de organización.
Creo que a partir del 19 y 20 de diciembre el pueblo argentino tuvo una crisis en la consciencia (crisis entendida como cambio), se dio cuenta que nos habían hundido, se dio cuenta que los políticos usaron el poder para enriquecerse y jamás gobernaron para nosotros, se dio cuenta que hacerle caso a las medidas económicas sugeridas por el FMI nos llevaron a la ruina, se dio cuenta que eso no podía soportarlo más y por lo tanto empezó a luchar, se dio cuenta que la única posibilidad de sacar el país adelante, o sea procurarse un futuro digno, era hacerse cargo de su propio destino y no quedarse pasivamente en su casa como había hecho hasta ese momento. Al pueblo le cambió la consciencia, nació su verdadera consciencia de hombre-digno.
Más allá de su participación activa o no en las Asambleas, ya no podrá ser engañado por nadie.
El pueblo argentino en su mayoría es el que está pidiendo un cambio total en la forma de hacer política, en la forma de representatividad de los políticos, la mayoría del pueblo quiere que se empiece a gobernar de abajo hacia arriba.
Ahora bien, para cambiar esta forma de hacer política, para que se gobierne de otra manera, para que el pueblo gobierne de una vez, hay dos caminos: otro "Argentinazo" o comenzar a crear una fuerza tal que sea capaz de disputarle el Poder a los que lo tienen, pero dentro de las mismas reglas del juego de la democracia.
Yo sinceramente creo que el pueblo quiere la vía electoral como forma de cambiar las cosas, no veo a la mayoría del pueblo queriendo una revolución, lamentablemente.
Creo que las Asambleas Populares están en condiciones de mostrarle a la gente que es posible otra forma de hacer política, están en condiciones, si esa es la elección que toman, de canalizar a través de un Movimiento Político la gran bronca de la gente y por otra parte proponerse como una fuerza válida para disputar el Poder en las próximas elecciones. Las Asambleas Populares pueden ser la herramienta para lograr el cambio que todos queremos.
Qué es el Movimiento Político de Asambleas Populares.
Hasta ahora las Asambleas están en una especie de estado puro, no hay una lucha por el Poder, más bien proyectos concretos que en mayor o menor medida se van realizando, en la Interbarrial hay una voluntad de organización, pero si bien se realizan marchas y escraches conjuntos y ese tipo de cosas, no pasa de parecerse más a lo que escribía más arriba sobre un Estado Paralelo.
Quiero aclarar que para mí formar un Movimiento Político no significa para nada dejar de realizar todos los proyectos que se realizan hasta ahora, sino que se agrega a los proyectos en común, el de llegar al gobierno, o por lo menos de luchar en cada municipio, en cada provincia y en el país, para ir ocupando espacios de poder concretos. Esta decisión sería dar un salto cualitativo importante en la forma en que se desarrollan las Asambleas hasta ahora, es luchar por ocupar espacios de poder en los puestos representativos del país, paralelamente a la concreción de los proyectos que ya se están realizando.
Imagínense una cooperativa de trabajo, una huerta comunitaria llevada adelante por una Asamblea y esas mismas cosas pero llevadas adelante desde la Intendencia de un partido o desde la Gobernación de una provincia. Imagínense la popularidad de las Asambleas cuando los vecinos sepan que son partícipes de las decisiones que se toman, cuando cada vecino se dé cuenta que controla efectivamente a sus representantes. Esto ayudaría mucho a la difusión de la Democracia Directa y de la participación del pueblo en las Asambleas y en la vida política del país y por consiguiente de su propio destino.
El Movimiento Político de las Asambleas no es otra cosa que el marco de fondo de las Asambleas, la matriz que engloba todos los proyectos, grandes y pequeños, que realizan las Asambleas y la Interbarrial, incluido, claro está, el de propiciar un programa de gobierno concreto y alternativo al imperante y presentarse a elecciones como alternativa política, para ir ocupando espacios de Poder concreto.
Por qué un Movimiento y no un Partido.
Un Movimiento político, como lo sería el de las Asambleas, tomaría el tema de la alternativa política electoral solo como un camino más para solucionar las cosas, pero no dejaría por eso de seguir realizando huertas comunitarias, cooperativas de trabajo y consumo, comedores escolares y muchos proyectos más. El tema partidario, pues en algún momento se deberá crear un partido, es una cosa más entre las demás.
Me gustaría que se entendiera bien esto, pues no estoy proponiendo formar un Partido Político para presentarse a elecciones, y si no se llega al gobierno, no hacer nada. Estoy proponiendo crear un Movimiento Político que sirve, también, para presentarse a elecciones, pero que forme parte de un proyecto mucho más grande, un proyecto de país distinto, más digno para todos, un proyecto donde ocupar espacios políticos sea solo una de las formas posibles para llevarlo a cabo.
En fin, creo que se entiende sobremanera lo que quiero decir.
Estructura del Movimiento Político de Asambleas Populares.
La unidad molecular más pequeña en este Movimiento, es el individuo-persona-ciudadano-vecino-asambleísta, que va a la Asamblea de su barrio a escuchar y proponer, a debatir y aprender, a intercambiar opiniones, a votar según su consciencia las propuestas y a decidir desde su lugar las grandes decisiones de todo el Movimiento.
Muchos individuos hacen una Asamblea, esto se cae de maduro, es obvio.
Luego está la Interbarrial, donde lo ideal sería poder lograr que haya una Interbarrial por provincia y por municipio.
Luego habría seguramente una Asamblea Nacional de Interbarriales.
Por supuesto que habría comisiones, a lo mejor no en todas las Asambleas – porque cada Asamblea tiene derecho a funcionar como mejor le parezca – pero sí en todas las Interbarriales (cuando digo Interbarrial me refiero también a las llamadas "Interzonales", que son lo mismo). Las Comisiones Interbarriales se formarían según los temas y las diversas problemáticas (de hecho ya hay algunas trabajando). La participación en toda esta ramificación debería ser revocable y rotativa, lo mismo que la coordinación de la Interbarrial y principalmente los delegados de la Asamblea Nacional de Interbarriales.
Funcionamiento.
Todas las Asambleas que estén dentro del Movimiento Político de Asambleas, deberían dedicarle un tiempo de la Asamblea a debatir los temas de la Interbarrial, pues es la única forma que se puedan tomar decisiones conjuntas. Digamos que es una pequeña obligación que se debería cumplir: debatir las propuestas de la Interbarrial y votarlas, para volverlas a llevar aprobadas, rechazadas o con abstención; o elegir delegados con mandato para votar por cuenta propia. En conclusión, cada Asamblea debería responder al Movimiento de Asambleas, más allá de que realice proyectos en forma independiente (cosa que por supuesto nadie le puede negar).
Esta forma de organización es solo una sugerencia y seguramente presenta mil errores, pero lo primero sería crear una Comisión de Política Interbarrial para empezar a aceitar estos mecanismos.
Me gustaría subrayar el rol de la Comisión de Enlace de la Interbarrial, ya que sería la encargada de empezar a buscar puntos de acuerdo con otras organizaciones en lucha, como Piqueteros, Sindicatos combativos, Partidos de Izquierda, etc. Para que entre todos podamos ver nacer un Movimiento único de masas para disputar el Poder, desde el frente social, el frente económico y también desde el frente electoral.
Programa.
El Movimiento Político de Asambleas Populares debería tener un programa de por lo menos 10 puntos, en los que todas las Asambleas estén de acuerdo y apunten sus proyectos y sus acciones hacia ellos. El Movimiento debería también realizar propuestas de gobierno en las diferentes áreas y hacer propuestas de gobierno concretas para el momento de presentarse a elecciones. Propuestas para que la gente acepte esta nueva forma de hacer política.
Presentación a elecciones.
Algunos se preguntarán por qué este Movimiento debería presentarse a elecciones. Yo creo que es la forma de canalizar el dicho "¡Que se vayan todos!" y hacerlo una realidad. Se puede hacer presión, se pueden hacer marchas y cacerolazos, pero la única forma de cambiar este estado aberrante de cosas es con una Revolución o con un Movimiento Político que se presente a elecciones y empiece a ocupar espacios de Poder.
Es importante pelear por cambiar la realidad a través de todas las armas disponibles, una de ellas es el Congreso y todos los cargos electivos del país. Es importante que entendamos que si no proponemos nada, no podemos quejarnos de lo que tenemos. Si no proponemos una alternativa política, van a volver a ganar los partidos de siempre porque la gente no va a tener alternativas para votar.
También es importante aclarar que hay que ser conscientes que formar un Movimiento Político para presentarse a elecciones significa correr el riesgo de ser absorbidos por el Sistema y por lo tanto de serle útil, pero a ese riesgo se le oponen todas las voluntades de la gente que compone el Movimiento y que trataría que eso no sucediera.
Ventajas y desventajas.
Repasemos a modo de ayuda memoria, las ventajas y desventajas de crear un Movimiento Político de Asambleas:
Se lucha por el Poder real.
La gente verá en las Asambleas una alternativa de cambio concreto.
Se realizarán proyectos coordinados y por lo tanto hay mayor fuerza y energía de todas las Asambleas hacia esos proyectos.
Se da el ejemplo de democracia directa del pueblo.
El Movimiento tendrá una identidad política clara a partir del Programa.
Las Asambleas estarán obligadas (si quieren participar de las decisiones) a invertir parte del tiempo de sus asambleas en debatir los puntos de la Interbarrial (que de hecho serán sus propuestas más las de las otras asambleas).
Va a costar mucho organizar esto para que funcione bien, pero es posible.
Se corre el riesgo que el Movimiento al presentarse a elecciones se encierre dentro del Sistema.
Se lucha por obtener espacios de poder concretos.
Primero se ingresa al sistema actual y desde adentro, se lo destruye y se crea algo nuevo.
LA QUE QUEDA.
Seguramente con esto la discusión recién empieza y por lo tanto aparecerán nuevas variantes a lo que escribí. Es posible también crear un Movimiento Político con gente vinculada a las Asambleas, pero que no nazca de las Asambleas mismas, sino de un grupo de gente con ideas en común. Lo que sucede con esto es que se convertiría simplemente en otro partido político más, pero no es algo que se deba descartar como posibilidad.
Otro camino sería que las Asambleas apoyaran en masa a algún determinado partido político, aunque eso lo veo mucho más lejos que formar un Movimiento.
En fin, las nuevas posibilidades se abrirán a nuestros ojos a medida que pase el tiempo. Creo, por lo que he hablado con varias personas, que tenemos que empezar a tratar de romper los márgenes de nuestra mente y nuestras propias estructuras y pensar libremente en una nueva forma de funcionamiento político y social. En ese lugar está la clave, en esa parte de la mente que está siempre reprimida por las estructuras sociales que nos impusieron durante más de dos siglos.
Autocrítica.
Me gustaría aclarar que a lo mejor, es más, estoy casi seguro, peco de ansioso al escribir todo este choclo de pensamientos, pero creo que el momento histórico para empezar, aunque sea empezar, a cambiar las cosas es ahora. Si le damos tiempo, el Sistema se reacomodará y nos volverán a derrotar. Yo lucho por lo que creo y creo que es el tiempo de armar un Movimiento Político, aunque expongo otras dos formas de Asambleas - en Estado Puro y Estado Paralelo- para que cada Asamblea decida qué camino desea seguir en el futuro, después de un largo debate, en el que tal vez surjan nuevas propuestas que se sumen a éstas.
Creo que ya están dadas las condiciones para que las Asambleas se miren al espejo, hagan autocríticas y decidan qué quieren hacer en el futuro. Es importante que se debata este tema, ya que aunque no parezca, este NO es un proceso que se va a dar solo, sino que hay que ayudarlo a nacer, sean las Asambleas en Estado Puro, el Estado Paralelo o el Movimiento Político de Asambleas Populares.
Si sabemos a dónde queremos llegar, pondremos las energías en conseguirlo, pondremos los ojos en el horizonte y empezaremos a caminar.
Nicolás Furlanis
15/06/02 (resumen realizado el 8/8/02).