Compañero Pablo Micheli,
Secretario General de ATE Capital y Adjunto de CTA Capital:
Recibimos tu carta con respecto a las conclusiones del Plenario Federal de la Juventud de la CTA. Tomamos tus impresiones, con las que podemos discrepar, como un aporte y no como una actitud divisionista o sectaria, como la de cualquier compañero de nuestra Central. Precisamente todas nuestras declaraciones desde la Juventud de la CTA tienen el espíritu de profundizar debates, dentro y fuera de la Central, aunque a veces no gusten o pongan en tela de juicio cuestiones que al parecer son tabú en nuestra CTA.
En ese marco creemos conveniente expresarte que algunos de los elementos que nos planteas no los compartimos en absoluto. El primero surge de la mención de "la Juventud de la CTA de Patria Libre". No es esa la forma en que te dirigís a otros integrantes de la CTA que legítimamente militan en organizaciones políticas, por ejemplo Ariel Basteiro del PSD/ARI, Alberto Piccinini del ARI, Edgardo Depetri de la Corriente de Kirchner, compañeros que militan en partidos de izquierda, o Luis D'Elia, ex Frente Grande/Frepaso/Polo Social hoy duhaldista. Es una forma sutil de descalificación esa que usás justamente cuando decís venir a debatir ideas.
En otro orden de cosas no recordamos que hayas tenido la misma molestia que revelas hoy ante nuestras apreciaciones con la patoteada –armas mediante- de D'Elia y sus matones a los compañeros de Barrios de Pie en pleno edificio de la CTA, al mejor estilo de la burocracia sindical. Tampoco hemos escuchado opiniones críticas tuyas a las dos injustificadas suspensiones de nuestro Confederal desde la Mesa Nacional solo porque tenemos diferencias con lo que allí muchas veces se resuelve. Por ejemplo no ir a la marcha del 27/6 en repudio al asesinato de los pibes en el puente Avellaneda; decisión hecha pública por Victor De Genaro. ¿Y si uno de los muertos de ese trágico 26 hubiese sido un compañero de la Juventud de la CTA, que sí estuvo en el puente, que hubiera resuelto la Mesa Nacional? ¿Hubiese dicho que era de Patria Libre para justificar no ir?
Es bueno también aclararte que nosotros no chicaneamos a nadie, solo introducimos los debates que creemos importantes. El documento del Plenario de la Juventud es en ese sentido muy claro, el mismo dice así: "vimos con honda preocupación la aparición mediática del debate electoral no solo vinculando directamente la figura de nuestro compañero secretario general Víctor De Genaro a las candidaturas del A.R.I., sino a su vez la afirmación por parte de Elisa Carrio en un reportaje de Pagina 12 del ultimo sábado haciendo referencia a nuestra participación como Central dentro de su estructura partidaria. Nosotros entendemos que no podemos seguir escondiendo la cabeza ante semejante ofensiva y que se hace necesario hacer pública una tajante desmentida por parte de la conducción nacional de la CTA de que seamos parte o apoyemos el proyecto de Elisa Carrió". En éste sentido sería necio pensar que ésta preocupación que planteamos sea exclusiva de la Juventud ya que es un debate que aparece atravesando toda la Central y también buena parte del activismo de todo el país. A punto tal que hoy, lunes 12 de agosto, Victor De Genaro toma de hecho el problema y en declaraciones realizadas al diario Clarín dice que la CTA no dará apoyo a ningún candidato, aclarando que "la Central mantendrá su autonomía de los partidos". ¿Qué otra cosa que esta planteábamos nosotros en la resolución que te causó tanta molestia?
Sabemos perfectamente que desde la CTA Capital, junto con otras regionales, en muchas ocasiones se han tenido posiciones críticas hacia determinadas políticas nacionales con las que legítimamente se puede discrepar, como cuando el 1ro. de Mayo hicimos el acto en Congreso o cuando Capital marchó desde la estación Avellaneda mientras D'Elia venía desde Once. No vemos entonces porqué te molesta tanto que nosotros desde la Juventud del CTA no podamos plantear nuestras divergencias. Decís que "el enemigo se va a hacer un picnic" con nosotros si hacemos públicas estas discrepancias. En realidad nosotros creemos que el enemigo se va a hacer un picnic si nosotros aceptamos calladamente en nuestra Central conductas y posturas macartistas como las de Luís D’Elía, porque significa que aceptamos el doble discurso de decir una cosa y bancar después otra. No subestimes el impacto en la adhesión al proyecto de la CTA que estas cosas conllevan, mas aún si pasan como si todo estuviera bien.
Criticas en tu carta que la Juventud no haya ido en las marchas contra O’Neil en la convocatoria realizada desde el "espacio de Nazareth" sino en la materializada al día siguiente. En realidad no es la primera vez que esto sucede. El 19 de Enero, a un mes del Argentinazo del cual la Juventud de la CTA participó activamente, volvimos a Plaza de Mayo junto a otras organizaciones populares sin el acompañamiento de la Central, fuimos a la marcha del 27/6 en discrepancia con lo resuelto por la Mesa Nacional de la CTA (no en la columna de los partidos políticos, como erroneamente mencionás, sino con los piqueteros y en particular con Barrios de Pié integrante también de la Central como su regional Capital); luego marchamos el 9 de julio contra Duhalde, el FMI y por la Segunda y Definitiva Independencia de la patria, nuevamente contra la opinión de nuestros dirigentes nacionales que optaron por no asistir adonde sí fueron decenas de miles de argentinos; y por último decidimos marchar contra O’Neil el 7 y no el 6 de agosto porque interpretamos que esta convocatoria de nuestra central y la CCC tenía intenciones divisionistas. No solo nosotros vimos esa conducta, sino tambien múltiples sectores sociales. Por ejemplo –entre otros muchos- las Asambleas Populares que se volcaron masivamente a la marcha del día 7/8, algo que te debería preocupar mucho más que si nosotros no respetamos la directiva de la Mesa Nacional.
Esperamos que éste debate sirva para profundizar las discusiones que nos atravesarán en el próximo Congreso, que por suerte parece se hará en Diciembre y no en Abril del año que viene (después de las elecciones) como pretendían no pocos dirigentes de la CTA. La autonomía y la pluralidad dentro de la Central no tendrían que ofender a nadie salvo que en su nombre se digan canalladas o se consumen traiciones, de otro modo la participación y la democracia interna dejarían mucho que desear.
Un abrazo
Nestor Moccia
Coordinador General